Por Víctor Fausto Silva D.
Comentamos ayer que en Etchojoa, el alcalde Arturo Robles Higuera entró exigiendo a su equipo trabajo de tiempo completo, pero en Huatabampo, Beto Vázquez Valencia no se quedó atrás y arrancó a tranco largo y con acciones inmediatas, dos de ellas en materia de seguridad, lo cual habla de la prioridad que marcó para ese rubro.
Seguridad: Espaldarazo a Iván Valenzuela (der.)
Inmediatamente después de asumir el cargo, le extendió un espaldarazo a su Comisario de Seguridad Pública, Iván Enrique Valenzuela Ruiz, implícito en la entrega de ocho motocicletas, adquiridas gracias a donaciones de ciudadanos comprometidos en meter el hombro para que las cosas mejoren en el municipio.
De esas unidades, cuatro fueron destinadas a Tránsito y 3 a la policía preventiva, que permitirán eficientar la vigilancia en calles de colonias y barrios. Una más fue entregada a Protección Civil, que la asignará a un paramédico para optimizar el tiempo de respuesta ante emergencias.
“Estamos preocupados por la seguridad de nuestro municipio y estas unidades son parte de los compromisos adquiridos durante nuestra campaña. Queremos hacer la diferencia en el municipio y demostrar que vamos a estar trabajando a ras de suelo,” dijo el alcalde.
Está probado y comprobado que una de las demandas más sentidas de la población, no sólo en Huatabampo sino en Sonora y el país entero, es que se le garantice seguridad sobre sus personas y sus bienes, y el hecho de que una de las primeras acciones de Vázquez Valencia se enfoque a ello, habla bien en cuanto a la definición de sus prioridades.
De paso, le brinda a su Comisario Valenzuela Ruiz, -elemento de carrera y probada capacidad- la certeza de que será escuchado y recibirá el respaldo que necesite para la corporación a su cargo y las directrices que en ella marque.
Otra decisión tomada “a ras de suelo” por el munícipe fue atender de inmediato el clamor de vecinos ante el problemón de tránsito que se registra en el crucero de las calles Juárez con Hermosillo y la Hermanos Gardenia, así como en la intersección Hidalgo, donde se las ven negras en horario escolar a raíz de la caída de un semáforo.
La salida inmediata fue la asignación de elementos de Tránsito que den fluidez a la circulación vehicular y eviten accidentes, pues son muchas las escuelas que operan en el oriente y el sur, y con un desperfecto así se registran fuertes embotellamientos, con las naturales molestias de los ciudadanos.
Por cierto, Vázquez Valencia agradeció a éstos por hacerle llegar sus inquietudes, lo cual habla de un trabajo “en equipo, como debe de ser, entre ayuntamiento y ciudadanía, una fórmula efectiva que da buenos resultados”.
Ya encarrerado, el alcalde se apersonó en la plaza Benito Juárez, uno de los símbolos distintivos del patrimonio cultural del municipio, donde puso en marcha los trabajos de rehabilitación.
El remozamiento incluye pintura general de guarniciones, bancas, impermeabilización y resanes en el auditorio cívico al aire libre y en las jardineras, rehabilitación eléctrica y luminarias en general, así como el repintado de los accesos para minusválidos.
Quizás de arranque no sean las grandes obras, pero las primeras acciones de Beto Vázquez respaldan y dan congruencia a los compromisos anunciados en su toma de posesión y el posterior mensaje político emitido en la comunidad de El Júpare, de desarrollar un gobierno cercano a la gente y sensible para escuchar y resolver sus necesidades.
En el Júpare: Contacto con las raíces
“No les vamos a quedar mal; seré el alcalde de a ras de suelo, así como lo ha hecho el Gobernador del Estado de Sonora, pero también como lo hizo el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador”, expresó, junto a su compromiso de gobernar sin distingo de siglas o colores partidista.
“Aquí vamos a trabajar por los ciudadanos huatabampenses”, dijo, lo que reafirmó luego desde El Júpare, donde reiteró que las comunidades rurales -especialmente las de población indígena-, serán también prioritarias para su administración.
Garantizó que habrá gestión “cercana y accesible” para atender a todos, y para ello se establecerán programas específicos para mejorar los servicios, todo tendiente a que el municipio alcance un desarrollo integral.
“Queremos asegurarnos de que cada comunidad reciba el apoyo necesario,” dijo ante los yoremes que lo recibieron, en un acto sin precedente de que algún alcalde haya arrancado su trienio otorgándoles tal deferencia.
Seguramente ese detalle de Beto Vázquez alentó en la etnia mayo la esperanza de que, ahora sí, una autoridad como el presidente municipal los escuche y atienda sus reclamos y necesidades, pero ya no en el discurso hueco y demagógico, sino en los hechos, porque para “rollos”, ya les han recetado demasiados y no salen del mismo y penoso atraso.
Un buen gesto, pues, el de acudir al Júpare, al contacto con las raíces étnicas, pero también con sus rezagos ancestrales.
En cuanto al arranque con acciones, Beto Vázquez está mostrando que le gusta madrugar para que le rinda el día.
Ojalá mantenga el paso. Hay demasiados marginados y olvidados, que seguramente se lo agradecerían de corazón.