Por Arturo Soto Munguía
Clase de reto y de oportunidad la que tiene el gobierno de Sonora al ser incluido, junto a Estados Unidos como invitados especiales a la edición 51 del Festival Internacional Cervantino, el más importante de todo México y uno de los más visitados de América Latina.
Desde el mismísimo Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México el gobernador Alfonso Durazo ponderó la importancia de esta invitación que permitirá mostrar a los ojos del mundo lo que se está haciendo en el ámbito cultural en nuestro estado, especialmente de aquellas manifestaciones que emanan de los pueblos originarios.
El mandatario acompañó a la secretaria de Cultura del gobierno federal, Alejandra Frausto, al gobernador de Guanajuato Diego Sinhue y al embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar para hacer este importante anuncio que abre una posibilidad excepcional para ofrecer al mundo una muestra de lo que en Sonora se produce en las artes escénicas, musicales, plásticas, audiovisuales y literarias.
El Cervantino suele convocar cada año a alrededor de 400 mil visitantes nacionales y extranjeros, y aunque su oferta cultural incluye artistas y muestras de primerísimo nivel, también abre sus espacios para cualquier cantidad de manifestaciones artísticas populares y exhibiciones etnográficas.
Tenemos de aquí a noviembre para preparar una cartelera que posibilite presentar con dignidad el esplendor de la producción cultural sonorense. El reto es grande y el gobernador seguramente estará atento a los preparativos para que Sonora luzca bien en su debut en ese escenario tan relevante como es el Festival Internacional Cervantino.
La tarea implica una buena inyección de recursos económicos, pero sobre todo de capacidad de gestión con personas y grupos artísticos y culturales locales, algo en lo que por cierto las autoridades del ISC han quedado a deber recientemente. Porque si la señora Beatriz Aldaco, titular del instituto va a salir con un montaje como el del altar de muertos que se instaló el año pasado en el zócalo capitalino y que parecía un trabajo manual hecho por alumnos de alguna primaria rural, sería una verdadera pena.
Sería muy importante que el gobernador delegara en personas capaces, talentosas y responsables -que las hay- la organización de la propuesta con la que estaremos representados en Guanajuato.
Por cierto, y ya que mencionamos a la señora Aldaco, me confirman que se volvió a montar en su macho y se negó a firmar el convenio que regresaba el comodato de la Casa Hoeffer por parte del gobierno del estado a la Dirección Nacional de Culturas Populares, un acuerdo que se tomó durante la reciente visita de la secretaria de Cultura a Hermosillo.
Aunque hay órdenes superiores para ello, la señora se puso en un plan de “lo que diga mi dedito” y nomás no ha firmado. Ahí se las dejo.
II
Y ya que andamos por rumbos del espectáculo, la recreación y la cultura, finalmente fue positivo el saldo que dejó el carnaval de Guaymas, que tuvo un aforo superior a los 60 mil asistentes durante los días que duró esa ancestral fiesta, aderezada esta vez con la polémica sobre la madrina del carnaval, la exuberante Karely Ruiz a quien puede endosarse buena parte del aforo.
“El resplandor del Mar de Cortés”, como fue nombrada esta edición del carnaval tuvo un saldo blanco (salvo incidentes propios de un evento de esta naturaleza), pero en general hubo un buen despliegue de las fuerzas del orden para garantizar la seguridad de los parroquianos y hasta la de Karely, que ante el arremolinamiento popular obviamente tenía que salvaguardar la impoluta gala de su doncellez debido al desbordamiento de las lúbricas pasiones de guaymenses y no guaymenses que si por ellos fuera, no solo le hubieran aventado huevos, sino que habrían aprovechado cualquier descuido para arrimárselos.
Estamos hablando, desde luego, de los huevos que le arrojaron a la estrella de Only Fans, y que en realidad eran cascarones conteniendo confeti, proyectiles inofensivos y tradicionales en las fiestas carnestolendas.
Lo mejor de todo es que una parte de las ganancias dejadas por el carnaval, se destinarán a construir un albergue del DIF Sonora para niñas y niños porteños en situación de vulnerabilidad. Bien ahí por la señora María del Rocío Chávez, presidenta honorífica de esa institución, y su directora Lorenia Valles Sampedro.
III
Y bueno, van a decir que nos pusimos muy artístico-culturales este miércoles, pero hay que reconocer también la gestión del gobernador para que la vieja Villa de Seris en Hermosillo fuera declarada como el primer Barrio Mágico de Sonora.
Esto, como parte de un programa federal que inició el año pasado, con el que se busca detonar sectores únicos para convertirlos en un destino turístico atractivo para los visitantes. El programa solamente elige un sitio por cada estado de la república y en el caso de Villa de Seris un criterio de peso fue la particularidad de su historia, que lo convierte en un pueblo dentro de la ciudad.
El barrio se fundó en 1742, fue asentamiento del pueblo comca’ac; en dos ocasiones fue declarado municipio, hasta que pasó a formar parte de esta capital; algunas de sus edificaciones datan del siglo XVII y XIX; alberga la Casa de la Cultura y el Museo de Arte de Sonora.
Lugares atractivos para recrear la vocación bucólica de los visitantes hay algunos, como la Plaza de los Tres Pueblos erigida en honor a los habitantes de Suaqui, Tepupa y Batuc que fueron anegados al construirse la presa de El Novillo. En el centro de esta plaza luce la fachada original de la iglesia de San Francisco de Batuc, elaborada en cantera rosa en 1758. También se puede visitar la plaza de la Candelaria, sede del más grande evento anual en honor a esa patrona, en el que se vive una verdadera fiesta de tamales cada dos de febrero.
Y ya para aquellos visitantes que gustan de las emociones fuertes y los deportes de alto riesgo, pueden darse una vuelta por El Jito donde se pueden practicar diversas y emocionantes actividades como carreras con obstáculos, clases de esgrima pero con cuchillos cebolleros o el azaroso juego de piedra, papel o tijera, con piedras del cerro, tijeras de verdad y papel para limpiarse después del susto.
IV
Y para cerrar con una última remembranza, hoy se cierra un capítulo de 32 años en la Universidad de Sonora, al aprobarse la nueva ley que regirá a la Máxima Casa de Estudios.
La cita es en el Congreso del Estado al filo de las 11 de la mañana, donde seguramente se darán cita cualquier cantidad de aguiluchos para apoyar o rechazar la reforma que fue presentada por el gobernador del estado luego de recoger por diversos mecanismos el sentir de la comunidad universitaria.
Luego se realizaron tres parlamentos abiertos para continuar la socialización de la nueva ley, y otros foros en los que participaron diferentes sectores. Finalmente la propuesta original fue modificada y las diversas bancadas se reservaron varios artículos que serán discutidos en lo particular durante la sesión de hoy.
Aunque es previsible que la reforma sea aprobada mayoritariamente y sin mayor trámite, también se esperan manifestaciones y posicionamientos en contra, aunque nada comparable con aquella memorable sesión en la que se aprobó la Ley 4 que hoy llega a su fin, no sin cierto buqué de revancha.