Por: Arturo Soto Munguía
Pues ya dijo el señor presidente que no hay nada que impida el regreso a clases presenciales para finales de agosto, de acuerdo al calendario escolar; que el ‘pequeño rebrote’ de coronavirus no será ese impedimento y que todo mundo debe ponerse a trabajar desde ya, para preparar los planteles y establecer protocolos que eviten los contagios.
El anuncio, desde luego generó polémica, pues aunque nadie niega que a los educandos y a los padres y madres de familia les urge regresar a una normalidad que, aun sin ser la misma de antes de la pandemia, libere un poco sus agendas cotidianas, que durante más de un año han provocado un variopinto espectro de problemas sicológicos, estrés, ansiedad y no pocos conflictos que han llegado al extremo de la violencia intrafamiliar.
La planta docente también requiere volver a las aulas y la interacción personal, que nunca podrá ser sustituida por la educación a distancia. Los niveles de aprovechamiento han caído, en algunos casos dramáticamente y eso está relacionado fundamentalmente con las posibilidades de acceso a internet de millones de niños y niñas mexicanas, sobre todo en las áreas rurales y las zonas marginadas en las ciudades.
El regreso a clases presenciales tiene en esas urgencias, al mismo tiempo, los principales riesgos, porque la socialización en las aulas y los patios de recreo entraña necesariamente un incremento en las probabilidades de contagio, con una pandemia que nunca fue ‘domada’ y hoy se reconoce oficialmente la presencia de una tercera ola, con nuevas cepas del virus que, aseguran, son más peligrosas que la causante de millones de muertes en el mundo.
Frente a una decisión ya tomada -y vaya que el presidente, cuando se obstina en algo difícilmente algo o alguien lo hace desistir-, lo único que resta es extremar las precauciones, equipar y sanitizar las escuelas, replantearse horarios, grupos, distintas medidas para niños, adolescentes y adultos, y combinaciones presenciales-virtuales, entre otras previsiones.
La UNICEF recomienda observar los siguientes principios: de seguridad, para las escuelas y centros de cuidado, según los riesgos y el escenario epidemiológico; de equidad, para facilitar el regreso de los niños, niñas y adolescentes en condiciones de mayor vulnerabilidad; de aprendizaje y bienestar, considerando necesidades educativas y de revinculación; de fortalecimiento de las escuelas, con el acompañamiento a docentes y cuidadores; y de flexibilidad, potenciando diversas modalidades que alternen entre la educación presencial y a distancia, con los recursos necesarios.
Padres de familia, estudiantes, maestros, directivos escolares y autoridades educativas tienen enfrente un reto de proporciones mayúsculas, para siquiera acercarse al cumplimiento cabal de estas recomendaciones.
Estamos a 45 días de que comience este nuevo episodio de la pandemia. Ojalá sea para bien.
II
Y como la vida no se detiene, la gobernadora Claudia Pavlovich completó hace un par de días su gira número 500 por los municipios del estado (va por su sexta vuelta a cada uno de ellos y a varios ha visitado en más de una ocasión), a donde ha acudido llevando los distintos programas y acciones de su gobierno.
Ayer estuvo en Cajeme y conviene subrayar esta visita porque son pocas las buenas noticias que llegan de aquel municipio y ésta es una de ellas. La gobernadora recorrió las instalaciones de la empresa Younger Optic Pitam que actualmente genera 400 empleos en Ciudad Obregón y tiene planes de ampliar su planta para duplicar el número de fuentes de trabajo.
Esta empresa se especializa en la producción de micas para lentes (por prescripción y polarizado) y cuenta con otra nave en Empalme que en conjunto generan más de dos mil 200 fuentes de trabajo y en los próximos años aumentará su planta laboral.
Esto tiene su mérito, pues particularmente en el último año ha sido bastante complicado reactivar la economía en todo el país, como consecuencia de la pandemia de la Covid19, pero hay que hacer notar el trabajo desempeñado por el secretario de Economía, Jorge Vidal Ahumada, inamovible funcionario que fue pieza clave para la atracción de inversiones extranjeras a Sonora, y para la ampliación de otras empresas ya instaladas, sobre todo del ramo aeroespacial.
De hecho, Sonora encabeza la lista de estados fronterizos donde la inversión no ha dejado de fluir pese a la pandemia.
En esa misma gira, la gobernadora entregó 16 proyectos productivos del programa Soy Pilar, de la Sedesson, para mujeres jefas de familia, así como un camión escolar para la Secundaria Técnica 75.
Otro que no le ha bajado el ritmo a su agenda es el gobernador electo, Alfonso Durazo Montaño, que ayer participó junto a 16 gobernadores -electos y en funciones-, con el presidente de la República e integrantes del gabinete de seguridad, para tratar precisamente ese tema del que ayer hicimos mención en esta columna como una de las asignaturas pendientes del gobierno federal.
Por lo pronto se acordó concentrar esfuerzos en 50 municipios del país que hoy representan la estadística más grave en delitos como el homicidio doloso, y aunque no se dio a conocer la lista de esos focos rojos, con toda seguridad Sonora aportaría fácilmente tres de ellos, con Cajeme encabezando la lista.
En otros temas, sostuvo encuentros con funcionarios del gobierno federal a quienes les expuso diversos proyectos de infraestructura para Obregón, Guaymas y Nogales.
Y ya para cerrar esta columna, avísole a la deshidratada lectora, el acalorado lector habitantes del sector sur de Hermosillo, que cojan temprano agua, porque todo el sábado se quedarán sin suministro debido a obras de reparación que realizará Agua de Hermosillo en un tramo del acueducto Independencia que resultó dañado por la empresa Gas Natural del Noroeste al llevar a cabo trabajos de excavación.
Todas las colonias ubicadas del bulevar Paseo Río Sonora hacia el sur se quedarán sin agua a partir del sábado a las 11:00 horas, hasta la tarde noche del domingo. Así que ya saben, tomen sus providencias porque con estos calores hay que remojarle la paja al cooler con mayor frecuencia.