Categoría: Bulmaro Pacheco

  • RAMÓN CORRAL Y PORFIRIO DÍAZ: VIDAS PARALELAS

    RAMÓN CORRAL Y PORFIRIO DÍAZ: VIDAS PARALELAS

    Por Bulmaro Pacheco

    La ciudad de París, Francia, cuenta con dos grandes panteones históricos: El Pére Lachaise, de 34 Ha, fundado en 1804, y el Mont Parnasse, de 18 Ha, creado en 1824.

    ¿Qué tienen en particular esos panteones históricos franceses?

    Pues que son importantes para los oaxaqueños y sonorenses. Desde 1912 en el Pere Lachaise están los restos de Ramón Corral Verdugo, ex gobernador de Sonora, gobernante del Distrito Federal y vicepresidente de México. Y desde 1915 -año de su muerte- en el de Mont Parnasse están los restos mortales del oaxaqueño Porfirio Díaz Mori, el personaje de México que por más años ha ejercido el poder presidencial.

    Corral viajó a Francia para tratar de curarse un cáncer de garganta, que lo empezó a molestar desde que era gobernador de Sonora. Primero buscó alivio en Estados Unidos, después en Alemania, y finalmente le dirían que en París había muy buenos médicos que podrían ayudarle a combatir la enfermedad.

    Ya en París tuvo que enviar su renuncia a la Vicepresidencia en mayo de 1911. Moriría poco después, el 12 de noviembre de 1912.

    Corral había nacido en Álamos el 10 de enero de 1854.

    Cuando terminó su período de gobernador de Sonora (1895-1899). Asumió el gobierno del Distrito Federal de 1900 a 1903. En 1903 asumió la secretaría de Gobernación y fue ungido vicepresidente con Porfirio Díaz en 1904, en un primer período, y electo en 1910 para el período 1910-1916.

    Corral es recordado por el gran impulso que le dio a la educación en Sonora desde finales del siglo XIX y los primeros años del XX. También por haber impulsado la construcción de los palacios de gobierno de Hermosillo, Guaymas y Álamos, por la introducción de los alumbrados públicos en las principales ciudades de Sonora y haber promovido mas de 300 kilómetros de telégrafo.

    Díaz había nacido un 15 de septiembre de 1830 en Oaxaca y murió el 2 de julio de 1915 en París, donde se había exiliado después de renunciar a la Presidencia de la República, después de 31 años de haber ejercido el poder en México. Murió a los 85 años.

    Ambos cementerios amplios y espaciados se ubican a pocos kilómetros uno del otro, con calles empedradas bien trazadas, una abundante colección de árboles y una vegetación con buen mantenimiento. Dada su importancia histórica y la enorme distinción que los franceses le dan a sus personajes en calles y monumentos, reciben a diario infinidad de visitantes de todo el mundo. Cuentan con expertos en la biografía de los personajes que ahí se encuentran y -en recorridos ex profeso- explican a los visitantes las aportaciones de cada uno de ellos en la historia.

    Ramón Corral había sido recomendado por el poderoso secretario de Hacienda de Porfirio Díaz, José Yves Limantour, ante el escepticismo de los inversionistas de Francia e Inglaterra que tenían sus dudas sobre la avanzada edad de Don Porfirio, y reclamaban a alguien más joven que pudiera sustituirlo en caso de que faltara.

    Corral no era del grupo de los llamados “científicos” que rodeaban al presidente Díaz; pero era muy bien visto por el gabinete debido a las aportaciones realizadas como gobernador de Sonora desde secretario de Gobierno, vicegobernador y gobernador. Su obra contribuyó a la importante presencia de Sonora en la vida política del país, y también como miembro destacado del llamado “triunvirato sonorense”, que junto con Luis Emeterio Torres y Rafael Izábal ejercieron el control político en Sonora desde 1879 hasta 1911 como lo señalara en su momento en su obra “la sucesión presidencial”, Francisco I. Madero.

    Como gobernador Corral apoyaría económicamente al profesor del Colegio Sonora Plutarco Elías Calles para que viajara al centro de la República a congresos pedagógicos, y a los hermanos (Rosa y José) de Álvaro Obregón Salido nombrándolos como responsables de las primeras escuelas que se fundaron en Huatabampo.

    Tanta era la identidad entre los Salido y los Corral de Álamos, que Álvaro Obregón, entonces regidor del ayuntamiento de Huatabampo, hizo campaña a favor de Corral para la Vicepresidencia.

    La tumba de Corral en el cementerio de Pere Lachaise se encuentra en la sección 11- Chemin Denon-6, y se ubica tres filas atrás de la de Frederick Chopin que yace ahí desde 1849. Es una una sección muy visitada por los turistas, mucho árbol, llena de enredaderas y abundante musgo, con algunas tumbas grises, quebradas, abandonadas, sin identidad y deterioradas por el paso del tiempo que al parecer no han recibido visitas en muchos años -a excepción de la de Chopin-, que registra frecuentes recados, veladoras, macetas y mensajes.

    Metros más a la izquierda se encuentra la sencilla tumba de Jim Morrison (1943-1971), vocalista de Los Doors, adornada con fotografías, veladoras, copas, macetas y ramos de flores. Y muy cerca están las de Oscar Wilde, con abundantes huellas de besos; Honorato de Balzac, con un ejemplar de la Comedia Humana; la de Moliere; y otras tumbas austeras como las de Augusto Comte, La Fontaine, Edith Piaf y Gilbert Becaud.

    La tumba de Porfirio Díaz en Mont Parnasse, resguardada por un enorme encino y rodeada de maples, ha sido modernizada -en los últimos 30 años- y reconstruida en forma de triángulo de granito, con el águila de la bandera mexicana estilo siglo XIX en la cúspide y con una enorme puerta de acero, que deja entrever por una pequeña rendija, un altar, donde están ubicados un busto, una bandera de México, monedas y billetes mexicanos de baja denominación, pequeños candeleros, e innumerables recados de mexicanos que la visitan saludando y exaltando al ex presidente.

    Probablemente sea la tumba de un mexicano más visitada en Europa, según los responsables del cementerio.

    A unos metros hacia la izquierda de la tumba de Díaz se encuentran los restos del escritor Jean Paul Sartre, fallecido en 1980, y los de su esposa Simone de Beauvior (1986). En el mismo panteón reposan también el expresidente francés Jacques Chirac y el actor Jean Paul Belmondo.

    ¿Qué hace que esos personajes sigan en la atención de mucha gente y en el interés de historiadores y visitantes de esos archivos ricos y vivos que son los cementerios? Ya decía el clásico que el historiador ha de desempeñar cabalmente su tarea que consiste en elevarse por encima del cronista y el anticuario. Pienso que Corral y Díaz pasaron en París sus últimos días con una gran nostalgia -relatan sus biógrafos- que ambos sentían, uno por La Noria, Oaxaca, y el otro por Álamos, Sonora.

    La esclerosis múltiple ocasionó la muerte de Díaz tres años después del fallecimiento de Corral. Falleció a los 85 y Corral a los 58, cuando la expectativa de vida en México no pasaba los 40 años.

    Controvertidos, importantes para la historia de México y con largos años de carrera en la política, las armas y el gobierno, no dejaron grandes herencias de tipo económico. Durante el exilio a Díaz lo apoyaron algunos empresarios mexicanos y del extranjero. A Corral, sus familiares.

    La viuda de Corral, Amparo Vélez de Escalante Montijo, que había nacido en Hermosillo en 1865 y esposa de Corral desde 1888 con 11 hijos, se regresó a la Ciudad de México y murió ahí un 17 de enero de 1952, a los 86 años, sus restos reposan en el Panteón Español.

    La viuda de Díaz, Carmen Romero Rubio, que había nacido en 1864, también se regresó a México y murió un 25 de junio de 1944. Sus restos reposan en el Panteón Francés de la capital mexicana.

    La Revolución los alejó de México. Tanto Díaz -en la Ciudad de México- como Corral -a la distancia y por telégrafo- presentaron sus renuncias en 1911 y dieron por concluidas sus prolongadas carreras políticas. A 110 y 107 años de sus decesos todavía los sigue la controversia y la polémica.

    Muchas de sus obras todavía se conservan y han quedado para la posteridad, lo que indica que el juicio de la historia, en el caso de estos dos importantes personajes todavía se debate, al igual que sus biografías… y lo que falta.

  • ANOTACIONES SOBRE LA CRISIS DEL PRI EN SONORA

    ANOTACIONES SOBRE LA CRISIS DEL PRI EN SONORA

    Por Bulmaro Pacheco Moreno

    La actual crisis que enfrentan los partidos PRI, PAN y PRD en Sonora tienen claros antecedentes y orígenes.

    El PAN, por su salida del poder en 2015. Duró solo un sexenio en el gobierno de Sonora, cuando sus miembros más conspicuos hablaban de que permanecerían mínimo tres. Llevan siete años sin hacer autocrítica y con una mínima representación en Sonora. Su bancada de cuatro diputados locales perdió a su original coordinador: Ernesto Munro Jr., que en una decisión fuera de lugar, pasó al partido encuentro solidario (el nuevo dirigente panista Gildardo Real lo había sustituido por la diputada Alejandra López, de intensa carrera en el legislativo).

    Sufrió antes también la baja de panistas históricos como Gustavo de Unanue, padre e hijo, Shirley Vazquez, además de Humberto Sousa, que le disputó la dirigencia a Gildardo Real en diciembre y qué decir de Célida López y Dolores del Río, entre otros muchos.

    El PRD solo cuenta con un ayuntamiento (Bacoachi), 10 regidurías y una diputación local de representación proporcional. Casi toda la militancia perredista se vació hacia Morena. El partido había perdido el registro local en el 2018 y lo recuperó con la alianza en el 2021.

    Al PRD le ha afectado sensiblemente la aparición de otras opciones de izquierdas, como el Partido del Trabajo, que han merecido más apoyos de los gobiernos y más impulsos al trabajo partidista, aunque sigan creyendo en Corea del Norte y las dictaduras rusa y cubana.

    Hay que recordar que el PT -que no sabemos dónde están los trabajadores que dice representa- había perdido el registro nacional en 2015, pero lo salvó el PRI con votos de una elección extraordinaria de diputado federal en Aguascalientes, lo que le permitió seguir con vida, gracias Enrique Peña Nieto y Miguel Osorio Chong. ¿recordarán eso?

    En Sonora el PT es la quinta fuerza política, el PAN la tercera y el PRD se ubica en la octava posición.

    El PRI perdió la gubernatura de Sonora por primera vez en 2009, pero no perdió el legislativo e importantes ayuntamientos. Y no se dividió. Aún cuando a nivel nacional gobernaba el PAN, el PRI todavía contaba con un importante número de gobernadores y legisladores, que contribuyeron a mantener las estructuras partidistas en regiones donde gobernaba la oposición. Resolvió con gritos y sombrerazos, pero en paz, la elección de su dirigencia estatal en 2010 y ganó la elección de senadores del 2012 después de haberla perdido en dos ocasiones.

    Por la enorme corrupción, bien explotada políticamente del sexenio padrecista, y por la vuelta al poder presidencial en el 2012 con Enrique peña Nieto, la sucesión del 2015 se resolvió a favor del PRI. Gracias también, entre otros factores, a la disciplina y colaboración de Ernesto Gándara y Antonio Astiazarán, los aspirantes que se quedaron en el camino ese año, que se sumaron a la campaña de Claudia Pavlovich que ganaría por una buena diferencia de votos contra de el ex priísta convertido al PAN Javier Gándara Magaña.

    En el 2018 se presenta de nuevo una crisis en el PRI al negarle el registro a Antonio Astiazarán como candidato al Senado, y quien ya había sido alcalde de Guaymas, funcionario público y diputado federal en dos ocasiones. Era la primera ocasión en la historia del PRI en Sonora que se daba una ruptura por la candidatura al Senado. Esta ruptura le costó al PRI 236 mil votos en la elección del 2018.

    En el 2021 el PRI vuelve a perder la gubernatura, con un margen mayor al del 2009. ¿Razones? Principalmente el efecto López obrador, que todavía pesó en esa elección; una alianza muy defectuosa del PRI con el PAN y el PRD; y la abstención casi total de la gobernadora Claudia Pavlovich para apoyar a su partido y a su candidato; quizá cuidando las formas, pero también -se sospechó- en una franca alianza con el presidente de la República, lo que se probaría después con su nombramiento de cónsul de México en Barcelona. Al final de la elección del 2021 y con el triunfo de Alfonso Durazo, el PRI estatal quedó suelto, entre la negativa de Ernesto Gándara a asumir su rol de líder opositor y el más votado a través del PRI y la pretensión de la gobernadora Pavlovich por imponer dirigente estatal antes de dejar el poder en septiembre de ese año.

    También influyó la tardanza y el desdén del CEN del PRI en revisar el caso Sonora, quizá pensando en la asamblea nacional de ese año y en la selección de candidaturas en los seis estados que tuvieron elección en junio del 2022.

    La indefinición acerca del perfil del nuevo liderazgo del PRI en el Estado por parte del CEN, la abstención de Gándara y la expulsión de Claudia Pavlovich del PRI, provocaron que subieran a la palestra nombres de personajes cercanos a la ex gobernadora (un secretario de desarrollo social, un ex director del Issteson, un subsecretario de gobierno y otro de educación, una directora general de alcoholes, uno más de catastro, entre otros), que empezaron a dar la batalla en los medios de comunicación buscando ser tomados en cuenta como aspirantes. Ninguno de ellos, salvo uno, criticaron la decisión de la ex gobernadora de aceptar un cargo en el gobierno de la llamada 4T. Los demás callaron.

    La batalla por el CDE se tornó entonces en una reacción del grupo de la ex gobernadora y sus beneficiarios económicos para quedarse con el PRI y negociar con Durazo, contra quienes apelando al relevo del grupo de Pavlovich, confiaron en la dirigencia nacional para que mediar y evitar a los excesos de años recientes.

    En el mes de mayo el CEN envía un delegado especial para el manejo del proceso, que se tornó ríspido por las características de la convocatoria, un mal manejo político y por un inconformidades manifiestas entre los participantes acerca del “piso parejo”.

    El proceso lo resuelve el CEN eligiendo a Onésimo Aguilera de Iris Sánchez, que solo duran poco más de un mes en la dirigencia.

    Pretextando la decisión del CEN se anuncian las renuncias al PRI de los diputados Ernesto de Lucas y Natalia Rivera afirmando que se van a Movimiento Ciudadano.

    A decir de la militancia priísta, fueron esos diputados, dos cuadros políticos excepcionalmente bien tratados por las oportunidades que se les dieron en el PRI y por haber recibido mucho más de lo que aportaron. Otra despistada legisladora del PRI afirmaría después que iba a ¡esperar la decisión del tribunal! para ver si se iba ¡a otro partido! (sic).

    Varios alcaldes del PRI invitados a sumarse en paquete a Movimiento Ciudadano se negaron y la salida de priístas no tuvo el efecto que esperaban los promotores de la migración.

    El grupo inconforme con la decisión del CEN impugnó ante el Tribunal Estatal Electoral y tiempo después, en una decisión que ya se esperaba dadas las características de la actual TEE, logró que se reconocieron los derechos a participar de Zaira Fernández y Pascual Soto. El Tribunal local ordenó reponer el proceso.

    Esta decisión ha sido impugnada ahora ante la sala regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial Federal en Guadalajara por el CEN del PRI y la fórmula desplazada.

    ¿Que va a pasar con el PRI de Sonora en su actual crisis? Los tiempos electorales ya están encima y en el 2023 todos los partidos locales deberán enfocarse en seleccionar a más de 100 candidatos competitivos (72 ayuntamientos, 21 distritos locales, 7 diputados locales y 2 candidaturas a la senadurías), para dar la batalla en 2024, y en septiembre del año entrante se instalarán los organismos electorales encargados de la próxima elección. La pelota ahora está en la cancha del CEN del PRI, que deberá en los próximos días, designar un delegado en funciones de presidente provisional del Comité Directivo Estatal para hacerse cargo del partido. La otra, esta es la decisión de la Sala Guadalajara del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

    En la actual crisis del partido deberán prevalecer la política y el derecho. La política para sumar, conciliar, consultar, dialogar y evitar las fracturas.

    El PRI deberá hacer un esfuerzo para evitar simulaciones y conflictos porque hacia el 2024 ya no tendrá tiempo para reponerse.

    Cualesquiera que sean las decisiones del CEN y del TEPJF será muy difícil evitar la división en un ambiente tan polarizado. En un contexto así y con las decisiones en curso, nunca sabremos bien a bien quién ganará pero si quien perderá. Por eso urge la política… ese remedio tan cuestionado, pero tan útil y necesario en la política actual.

  • LO QUE MORENA QUISO DECIR

    LO QUE MORENA QUISO DECIR

    Por Bulmaro Pacheco

    Nadie en sus cinco sentidos se sorprendió por los eventos políticos que Morena organizó el último día de julio en la tarea de integrar sus órganos de gobierno interno, que a decir de su dirigente nacional Mario Delgado, habrán de decidir la próxima etapa del partido: la elección de la candidatura Presidencial y su participación la elección 2024.

    El “decidir” la candidatura es un decir, legitimar sí. Porque es de todos sabido que la decisión de la candidatura presidencial le tocará al presidente López Obrador que ha sostenido ante tirios y troyanos que la decisión final se tomará mediante una encuesta y con aquellos a quienes él personalmente ha encartado (Sheinbaum, Ebrard, Adán Augusto) y descartado (Monreal, Noroña, De la Fuente, etcétera).

    Aunque a cada rato sus dirigentes afirmen que Morena “es” un “movimiento” y no un “partido”, para mandar la señal al electorado de que se estaban deslindando del término “partido” -quizá ante el descrédito de la palabra partido ante la sociedad-, con los eventos recientes no les quedó otra opción más que ajustarse a lo dispuesto tanto por el Cofipe como por la ley general de partidos políticos, no solo en sus disposiciones generales sino en los requisitos que señalan para que los partidos políticos cumplan con la ley y se sujeten a las prerrogativas y dividendos que las mismas leyes señalan para la operación y funcionamiento de los partidos en la temporada de elecciones y en el ejercicio de los gobiernos.

    Morena es ahora una mezcla pesada, densa y amplia de varias izquierdas tradicionales -no se ven las nuevas todavía- donde coexisten con ex perredistas, ex priistas, y ahora también invadido por una infinidad de panistas renegados y restos de organizaciones de lucha social que tuvieron su mejor expresión en décadas pasadas. Por eso sale sobrando el calificativo que “recuerdan al Viejo PRI” los mecanismos utilizados por Morena para llevar a votar a su gente.

    No, los procedimientos de acarreo de votantes -capacidad de transportar, dicen-, los han utilizado tanto las izquierdas como el PAN y el PRI cuando han accedido al poder. Morena solo recicla hoy una vieja política y los viejos vicios de las izquierdas, que no le han permitido a esos partidos, por ejemplo, tener nunca relevos de dirigencias en paz; siempre en conflicto, sillazos y en los tribunales.

    Han traído a colación también la utilización de recursos públicos para eventos partidistas, ahora más notable por la cantidad de estados y municipios gobernados por Morena, donde ha tenido la necesidad de demostrar capacidad de movilización. Pero se la llevan diciendo que son diferentes y que ya nada es como antes, incluido el proceso sucesorio, donde están reviviendo las viejas prácticas del “tapadismo” y la decisión unipersonal del presidente.

    Lo más criticable del proceso que acaban de vivir los morenistas ha sido la utilización -sin pudor alguno- de los miles de adultos mayores y empleados públicos que forzaron a ir a votar.

    Con el del domingo pasado ya son tres los experimentos de la llamada 4T: La consulta para el juicio a los expresidentes, que movilizó a 5 millones de personas; y no fue vinculante, pero hizo ruido. La de revocación de mandato, que logró la participación de casi 17 millones; que tampoco fue vinculante, pero hizo más ruido que la primera. Y ésta última, que a juicio de los dirigentes de Morena alcanzó casi 3 millones de participantes.

    Esta participación interna, en apariencia exclusiva para integrantes y simpatizantes de Morena -con excepciones claro-, participó una gran cantidad de tránsfugas de otros partidos que ahora tienen trabajo en la administración pública de Morena y buscaron exhibirse en público yendo a votar para que los vieran sus jefes, y se notara que están cumpliendo al pie de la letra con la oportunidad laboral que les dieron a cambio del brinco político realizado para fortalecer a la llamada cuarta transformación.

    El proceso electivo también mostró inconformidades y fisuras, golpes y tensiones que la dirigencia de Morena y el presidente han tratado de minimizar. ¿Qué sigue?

    Mario Delgado ha dicho que en junio del 2023 convocarán a inscribirse a quienes tengan interés en la candidatura presidencial. Que habrá una primera criba de aspirantes en el mes de julio con las encuestas respectivas para ver quienes tienen mayor aceptación.

    Todo eso antes de tomar la decisión definitiva sobre su candidato(a) en el mes de agosto, por lo tanto, a 10 meses de la elección del mes de junio del 2024 Morena tendrá ya definida su candidatura presidencial, cuando de acuerdo a la ley las campañas presidenciales duran tres meses.

    Hay un aspecto que ni el presidente ni el dirigente de Morena van a poner evitar: La muy probable división en las filas de Morena.

    ¿Qué va a pasar con Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal en caso de que no sea alguno de ellos el próximo candidato?
    Monreal fue convencido por López Obrador en 1998 para que abandonara el PRI y aceptara la postulación del PRD al gobierno de Zacatecas.

    Ebrard, ex priista también y constructor del PCD con Manuel Camacho en el 2000, se disciplinó en 2012 cuando terminaba su gestión al frente del gobierno de la Ciudad de México para que López Obrador se quedara con la candidatura a la Presidencia de la República por el PRD.

    Monreal se disciplinó en 2018 cuando no logró la candidatura al gobierno de la Ciudad de México, porque AMLO se la otorgó a Claudia Sheinbaum y aceptó ser senador y a la vez el coordinador de los senadores de Morena de 2018 a la fecha.

    Ambos han pedido piso parejo ante la obvia preferencia de López Obrador por impulsar las candidaturas de Sheinbaum y Adán Augusto.

    No se sabe qué va a pasar. Monreal ha dicho que, de cualquier manera, él irá en las papeletas electorales del 2024. ¿Por Morena? Hasta ahora dice que sí, pero en el fondo está enviando mensaje de que pudiera ir por cualquier otro partido. ¿MC o el PT? Pudiera ser.

    Ebrard sigue muy activo en el país a través de grupos promotores de su candidatura y no se sabe si pudiera disciplinarse a la decisión de que él no fuera el candidato escogido por AMLO. A Monreal quizá le ofrecerían la Ciudad de México; pero ¿a Ebrard qué?

    ¿A dónde iría Ebrard? Muchos piensan que el Partido Verde se ofrecería a postularlo. Otros hablan de una probable candidatura para Ebrard por la alianza PAN-PRI-PRD-MC, que en principio -como idea- luce descabellada, pero en México todo puede suceder.

  • REPRESENTACIÓN Y CRISIS EN LA TRANSICIÓN SONORENSE

    REPRESENTACIÓN Y CRISIS EN LA TRANSICIÓN SONORENSE

    Por Bulmaro Pacheco

    Reciben el dinero del que les da el gobierno federal mes a mes, pero sienten que eso no arregla los problemas de fondo: La pobreza y las carencias.

    Informes van y vienen sobre los beneficios sociales a las comunidades, pero basta tomar una muestra como el pueblo de Querobabi, en el municipio de Opodepe, para darnos cuenta de que mucho de lo narrado respecto al progreso de los pueblos, en mucho ha sido puro cuento, y que la narrativa local solo ha servido para alimentar los informes burocráticos -a veces optimistas- de las autoridades.

    Sus pobladores que se dedican básicamente a la elaboración de ladrillos tienen muy poca agua para uso humano. “Pocas horas al día cuando llega a haber”, dice una de las vecinas más antiguas del pueblo. Los servicios de salud siguen siendo deficientes, porque no se cumple con la norma de un médico por cada 1,500 habitantes. “En el centro de salud no es constante la presencia del doctor”, dicen, y buscan como pueden consultarse en Hermosillo (124 km) o Santa Ana (61 km), y así no correr el riesgo de que una urgencia se agrave o de no contar con las medicinas que deben tomar a diario.

    ¿Y qué decir de la seguridad? Ya no se puede dormir en las noches con las puertas abiertas de los hogares, porque los ladrones (que abundan) hacen de las suyas metiéndose a las casas, sobre todo a las de los adultos mayores y las que están solas. Toda una tragedia la seguridad en ese pueblo, que trabaja y aporta, dicen.

    Buscan alternativas a la educación de los jóvenes que van a la preparatoria hasta Benjamín Hill (23 km) y para los más de 40 que no pueden costearse la estancia, el transporte y comida en la capital, donde cursan la educación superior, y plantean la posibilidad de una casa de estudiantes o un sistema de becas para que les ayude a paliar sus necesidades.

    En Rayón tienen buen tiempo solicitando la intervención de las autoridades educativas para crear una institución de educación media superior, que ayude a los padres de familia a sortear los problemas económicos y de seguridad que implica enviar todos los días a Ures a más de 20 jóvenes de Opodepe -cabecera- y 40 de Rayón -cabecera-, donde se encuentra el CBTA más cercano. El camión luce deficiente y destartalado con una descompostura cada tercer día y el costo por estudiante (2 mil pesos al mes) por puro traslado, se ha incrementado notablemente.

    ¿Qué hacer? Ya están listos los estudios de factibilidad para crear una nueva institución en la cabecera municipal de Rayón y garantizarle a los jóvenes espacios en el nivel medio superior ahora que es el año en el que los gobiernos estatales deben cumplir el compromiso adquirido con la reforma Constitucional del 2012 al artículo Tercero para garantizar la educación media superior obligatoria, y espacios para todo aquel que la demande (cuyo plazo fatal es el 2022) pero a las autoridades parece no preocuparles.

    En Rayón gobierna otra vez el ganadero Alejandro Luis Grijalva Robles, que ya había sido alcalde del 2009 al 2012 y del 2015 al 2018 y ganó otra vez (¿repetirán por vocación política y social o solo para someterse a intereses de grupo?) postulado ahora por la alianza PRI-PAN-PRD, con una ventaja de (877 votos) sobre Morena (464).

    Algo ocurrió, porque meses después de la elección aparecieron juntos el alcalde de San Miguel de Horcasitas Joaquín Munguía Coronado y él con el dirigente estatal de Morena David Mendoza Rivas, como queriendo enviar la señal de que se daban de baja de su antiguo partido y se sometían al partido en el poder en la entidad.

    ¿Por qué se los lleva Morena? ¿Por cuestiones ideológicas o por algún interés especial? ¿para hacer bola o para enriquecer sus cuadros? ¿Le irán a aportar algo al partido en el poder o solo es una estrategia para debilitar a los adversarios? No queda claro todavía ni tampoco lo explicaron.

    En Opodepe gobierna el Partido del Trabajo, con el ex panista y ex priista Lorenzo Fabián Santamaría. En Ures Morena ganó con el ex priista aliancista José Manuel Valenzuela apenas por 65 votos de ventaja a la alianza PAN-PRI-PRD. Se trata de un municipio donde los maestros han jugado un papel crucial, ahora convertidos a Morena.

    La primera pregunta que surge cuando uno ve que las realidades en los pueblos han quedado detenidas en el tiempo, a pesar de tantos anuncios de cambio y siguen con los mismos problemas -los ancestrales- de siempre como el caso de Querobabi, Opodepe y Rayón, que registran los mismos problemas y las mismas crisis de años a la fecha y las obras que más recuerdan son las carreteras que conectan a Rayón con Ures de 36 kilómetros (Bours) y Carbó de 42 (López Nogales) de principios del siglo XXI obras que sí resolvieron problemas de esas comunidades, dicen.

    En esos municipios y otros de la entidad reconocen que no hay por ahora una obra importante -en proceso- estatal o federal, a pesar de que ya pronto cumplirán el primer año de ejercicio de gobierno. A eso le suman el problema de la escasez de dinero para la operación administrativa, una crisis que también afecta al estado y ahora con el llamado plan de “pobreza franciscana” del gobierno federal, no se sabe que va a pasar.

    Las ideas y los proyectos de lucha se han agotado por causa de los saltimbanquis políticos y la ausencia de auténticos liderazgos, ya que los nuevos han tenido como fondo la idea de acumular poder personal o de grupo y dejar de lado los proyectos de progreso de los pueblos. Faltaba más, progresan sus familias, los pueblos no. Por eso muchos problemas se han agravado y otros aparecen sin solución gracias a la indolencia y al olvido de las causas reales pretextando la falta de dinero.

    ¿Qué harán ahora los partidos políticos para recuperar su papel de interlocutores entre la sociedad y el gobierno para la atención de demandas? Esa será tarea fundamental en el corto plazo ante el desencanto social con algunos partidos y gobiernos y el incremente de los niveles de pobreza, la crisis económica, social y de inseguridad que están golpeando directamente al ciudadano que ya no halla la puerta.

    Dice Patrick Deneen que la tecnología política del liberalismo ayudó a liberar a los individuos de sus lealtades parciales a personas y lugares particulares, convirtiéndonos en vez de eso en individuos que por encima de todo lucharían por “conseguir sus propias ambiciones y deseos privados”. Para el momento actual la cita cae como anillo al dedo a quienes han convertido la actividad política en una feria, en una apuesta de casino o una serie de aventuras casi siempre sin un final feliz. Ni vocación de servicio, ni méritos, ni antigüedad ni carrera de partido se enarbolan ahora para la movilidad política. Simple y sencillamente, puro cálculo político y sentido de la oportunidad para brincar de un lado a otro.

  • LA MANZANA DE ADAN (AUGUSTO)… Y LA DISCORDIA

    LA MANZANA DE ADAN (AUGUSTO)… Y LA DISCORDIA

    Por: Bulmaro Pacheco

    El tabasqueño Adán Augusto López Hernández, de reciente incorporación al gabinete, vino a Sonora en su calidad de secretario de Gobernación -y presidenciable de primera línea-.

    Muchos pensamos que se había dado tiempo para dialogar con los tres obispos (Hermosillo, Cajeme, Nogales) y así pulsar las relaciones de la Iglesia católica con el gobierno federal, sobre todo por las tensiones generadas -no vistas desde el siglo pasado- entre el Gobierno federal y el Vaticano después del asesinato de dos sacerdotes jesuitas en Chihuahua hace un mes.

    Pensamos también que quizá se había trasladado al Sásabe o a Nogales, para palpar los asuntos migratorios y medirle el agua al tráfico de personas, que se da con una mayor intensidad en estas regiones y evaluar el trabajo de los agentes de migración, que si bien no están bajo su autoridad, le corresponde a Gobernación evaluar en forma permanente las cuestiones relativas a la población ahora que la migración de México hacia los Estados Unidos se ha convertido en un auténtico dolor de cabeza en las relaciones con ese gobierno.

    Dijimos: ojalá que se haya reunido con sus colaboradores del área de Gobierno y el renglón de juegos y sorteos para analizar el efecto de los casinos en Sonora, y si son necesarios tantos y si todos los instalados cumplen con la normatividad de la Secretaría a su cargo. ¿Se enteraría que en lo que va del sexenio federal, gobernación no cuenta con un delegado?

    También nos preguntamos si le informarían que las dirigencias de los partidos políticos en la entidad tenían puntos de vista distintos a los del gobierno con relación a la iniciativa de reforma electoral que impulsa el Presidente López Obrador, y por eso los invitó a dialogar para conocer sus argumentos, sobre todo y más importante, lo relativo a la supuesta desaparición del INE, los órganos estatales electorales, y la disminución de regidores en los ayuntamientos.

    O puede ser, pensamos que desde el Congreso del Estado lo invitaron a platicar con las diferentes fracciones legislativas (o lo que queda de ellas), para conocer la agenda de trabajo legislativo local y la postura del gobierno federal acerca de la disminución de diputados en los Congresos locales, dizque para hacer menos cara la democracia.

    Nos preguntamos si invitaría a los empresarios sonorenses a dialogar para conocer sus puntos de vista sobre la gobernabilidad, el estado de Derecho y las principales preocupaciones empresariales sobre los riesgos de la inversión privada a causa de la inseguridad pública existente en la entidad, o si escucharía a los presidentes municipales en su recurrente queja de falta de recursos para enfrentar la demanda ciudadana de más obras y mejores servicios, que a casi un año de gestión no ven claro todavía.

    O si revisaría con las autoridades del ramo la política penitenciaria y el estado que guardan las cárceles federales en Sonora y en general el sistema estatal penitenciario, para apoyar propuestas que permitan sanear el sistema y combatir sus ancestrales problemas.

    Pues no, no vino a eso Adán Augusto nos dijeron. Qué pena por los que se quedaron esperando. Y si no fue para eso la gira del titular de Gobernación, entonces ¿a qué vino a Sonora?

    En los primeros meses del año vino a promover la revocación de mandato, en manifestación pública organizada por el gobierno estatal, y acompañado del dirigente de Morena Mario Delgado, en esa ocasión le criticaron la utilización de un avión de la guardia nacional para hacer proselitismo.

    Ahora, la primera sorpresa fueron los espectaculares con su foto para darle la bienvenida. Algo innecesario y fuera de lugar en los tiempos de la modernidad política. Eso indicaba que se trataba de una gira de promoción personal y no de trabajo.

    Según los organizadores, solo vino a atender mineros y dar una conferencia sobre “la política interna de México” en el Expofórum Hermosillo.

    Su viaje fue autorizado desde luego por quien es su jefe directo, en un juego de promoción ya abierto a sus favoritos para la sucesión presidencial, y como se trata del último de los incorporados a la terna, no se le conoce mucho en el país y aparece todavía bajo en las encuestas.

    Entonces, si vino a placearse nada más, quedaron pendientes los grandes temas nacionales: El diálogo con las iglesias y los empresarios; las tensiones con Estados Unidos y Canadá; la alta inflación y sus efectos sociales; el futuro de la reforma electoral; el diálogo con las oposiciones; así como los distractores como el Caso Colosio, Enrique Peña Nieto, etcétera.

    Con tantos cambios en los últimos sexenios, hacía rato que no se veía a un titular de gobernación hacer proselitismo en busca de la candidatura.

    Desde Luis Echeverría Álvarez, que fue candidato y presidente de México para el sexenio 1970-1976, no ha habido otro secretario de Gobernación que haya sido candidato y presidente.

    Antes sí, lo fueron: Alemán, Ruiz Cortines y Gustavo Díaz Ordaz. Y después aspiraron al cargo: Moya Palencia, Olivares Santana, Bartlett y Labastida. Fox fue antes gobernador de Guanajuato, Calderón ganó la interna en el PAN, Peña Nieto fue gobernador del Estado de México y López Obrador fue dirigente nacional de un partido opositor.

    ¿Qué puede suceder en el 2024 con una autoridad electoral desgastada y vilipendiada (INE) y con una secretaría de Gobernación (que debería arbitrar en los conflictos) ahora como juez y parte, con un titular que afirma que el INE no lo va a sancionar por sus actos anticipados de promoción personal porque ¡los diputados lo van a desaparecer!? Cuidado con eso.

    Desde 1940, las únicas sucesiones en paz han sido las de 1958, con López Mateos; la de 1964, con Díaz Ordaz; la del 2000, con Ernesto Zedillo; y la del 2018, con Enrique Peña Nieto.

    Hubo problemas y tensiones fuertes en 1940, 1952, 1976, 1988, 1994, y una crisis mayor en 2006 cuando, a decir de José Antonio Crespo, nunca se supo quién realmente ganó la elección.

    El gobierno de la llamada 4T anda de mal humor, y más lo estará si la economía no crece, la inflación se dispara y las tensiones internas (iglesias) y las externas (TMEC) se complican aún más.

    Morena no le garantiza al presidente, unidad en el proceso de selección del (la) candidato (a) presidencial por la obsesión por heredar sucesor (a) y ese es otro riesgo. Lo estamos viendo en al caso del Estado de México que será su principal laboratorio en el 2023.

    Pocos saben a qué vino, el secretario de gobernación Adán Augusto a Sonora por segunda ocasión en un semestre, aunque muchos lo imaginamos. ¿Será el tercero en… o la auténtica manzana de la discordia? No tardaremos mucho en saberlo.

  • PARTIDOS Y ALINEACIONES, SONORA 2024

    PARTIDOS Y ALINEACIONES, SONORA 2024

    Por: Bulmaro Pacheco

    La reconfiguración de los partidos políticos avanza en todo el país. El Ejecutivo federal adelantó los tiempos políticos al revelar a los posibles aspirantes a la Presidencia y revolucionó las maquinarias partidistas en su intención de captar militantes, reorganizarse en el territorio nacional y de asegurar sus clientelas políticas mediante la disputa de clientelas y liderazgos de otros partidos.

    Estamos a 13 meses de la instalación del proceso electoral (septiembre del 2023) y un poco más de que los partidos cuenten ya con sus principales aspirantes presidenciales en la puerta de salida para el arrancadero final de la elección del próximo junio del 2024. Es decir, a menos de dos años de una elección que se supone marcará a México tras la intención de Morena y sus aliados de prolongar su gobierno y las fuerzas opositoras que buscarán desplazarlos mediante alianzas.

    En Sonora ya empezó la búsqueda de clientelas políticas y grupos de apoyo para los principales aspirantes a la Presidencia.

    También en Sonora se han renovado la mayoría de las dirigencias partidistas locales posteriores a la elección del 2021: David Mendoza a Morena; Gildardo Real al PAN; Manuel Scott a Movimiento Ciudadano; Calvin Valenzuela al Verde Ecologista; Ramón Flores al Partido del Trabajo; Luis Montes Piña a Encuentro Solidario; Joel Ramírez al PRD; Manuel Fernando Aguirre a Nueva Alianza; y Onésimo Aguilera al PRI.

    Nueve partidos políticos en Sonora y solo siete a nivel nacional, en la inteligencia de que siete organizaciones presentaron solicitud para constituir partidos locales y de los cuales solo el Partido Sonorense de Alí Camacho y VAMOS (Voces Activas en Movimiento por Sonora) encabezado por Norberto Barraza, continúan en el proceso de organizar asambleas y cumplir con los requisitos que les exige la ley (en un Plazo que culmina el último día de diciembre de este año).

    ¿Por qué en Sonora actúan nueve partidos políticos y en la República Mexicana solo siete? (de concretarse los nuevos registros serían once) Porque en Sonora los partidos Nueva Alianza y Encuentro Solidario conservan el registro como partidos locales, aunque a nivel nacional lo hayan perdido por no alcanzar el 3% de la votación en la última elección de diputados federales en 2021.

    ¿Y cómo quedaron ubicados los partidos políticos que tienen registro en Sonora, de acuerdo a los resultados de la elección del 2021? En la contabilidad final para diputados locales, Morena avanzó al quedarse con el 31.6% de la votación final; el PRI quedó en segundo lugar, con el 18.01%; el PAN en tercero, con un 10.84%; Movimiento Ciudadano con 8.58%; el PT subió al 7.63; y Nueva Alianza a un 5.65%. Por otra parte, el Verde Ecologista llegó al 5.23%, el Partido de la Revolución Democrática al 3.96% y, al final, Encuentro Solidario con un 3.4%.

    Los mismos partidos políticos están experimentando cambios y reajustes en su vida interna con miras al proceso que viene.

    Los presidentes municipales de San Miguel de Horcasitas, Joaquín Munguía, y Rayón, Alejandro Grijalva, producto de la alianza PAN-PRI-PRD, decidieron reunirse con el dirigente estatal de Morena marcando distancia con sus partidos de origen. Grijalva, de origen priista, ya había sido alcalde en Rayón, y Munguía se reeligió en San Miguel. También el alcalde de Aconchi, Rafael Tobillas Durón, de Movimiento Ciudadano, decidió migrar hacia Morena y el de Divisaderos Misael Acuña anuncia su incorporación a Movimiento Ciudadano.

    Recientemente el coordinador de los diputados locales del PAN Ernesto Munro jr. decidió emigrar al Partido Encuentro Solidario, en una ceremonia especial realizada para hacer el anuncio.También renunció Humberto Souza que contendió contra Gildardo Real por la dirigencia estatal.

    Los diputados locales del PRI Ernesto de Lucas y Natalia Rivera Grijalva decidieron renunciar a su partido de origen y se sumaron a la bancada de Movimiento Ciudadano. De inmediato, tanto el dirigente local como el nacional de ese partido, manifestaron satisfacción al darles la bienvenida a ambos legisladores. Semanas antes, un enviado de MC había anunciado a ambos legisladores como nuevas adquisiciones.

    ¿Qué hay detrás de esas migraciones partidistas? ¿Es insatisfacción con sus partidos de origen o por problemas internos?

    En el caso de los presidentes municipales, sus razones tuvieron (razones inducidas desde el poder estatal, claro). Quizá porque pensaron que por la vía del acercamiento con Morena mejorarían sus niveles de gestión de asuntos con el gobierno estatal y les mejorarían el trato con los funcionarios estatales y federales. Hasta ahora nada de eso ha ocurrido.

    En el caso de los legisladores locales es entendible que desde el gobierno estatal se trate de mejorar y fortalecer a uno de sus partidos aliados, como es el Partido Encuentro Solidario (PES), que al perder el registro nacional solo quedó como local y su manejo en manos de la familia Terán, de Agua Prieta. Suponemos que ya están construyendo alianzas locales con Morena para el 2024 y que la inclusión de tránsfugas implica la expectativa de candidaturas en alianza para el 2024.

    Munro por su parte fue muy bien tratado en el PAN: dos veces alcalde (2015-2018 y 2018-2021) y una vez diputado local (2021-2024), nueve años de buen trato político consecutivo, además de impulsar a su propio sucesor en la alcaldía y dejar a Puerto Peñasco como el Municipio que más deuda per cápita registra a nivel nacional.

    Los diputados locales del PRI son otro caso. Ernesto de Lucas y Carlos Armando Biébrich son los únicos sonorenses a los que se le reformó la Constitución para ocupar un cargo público (secretario de Seguridad, en el gobierno de Eduardo Bours). En dos ocasiones dirigente estatal del PRI, fue diputado federal en 2009, funcionario federal de alto nivel, en 2012, secretario de educación y cultura de 2015 a 2018, candidato a la municipal de Hermosillo en el 2018 y diputado local del 2021 al 2024. Nada mal para una meteórica carrera política de 18 años.

    Natalia Rivera ex regidora de élite en Hermosillo, fue propuesta por Claudia Pavlovich como diputada local plurinominal en 2015 y solicitó licencia para incorporarse como funcionaria también de élite a nivel estatal durante los seis años de gobierno. La misma gobernadora la propuso al PRI de nuevo en primer lugar en la nueva lista de diputados locales para el proceso electoral del 2021 (que muchos rechazaron), un privilegio que cualquier aspirante del PRI quisiera haber recibido en otros tiempos. También fue secretaria general del CDE PRI.

    Y si les fue muy bien a ambos en el poco tiempo que militaron en el PRI: ¿Por qué se fueron entonces? No hay argumentos de peso en las cartas de renuncia de ambos al PRI que muestren una base fuerte a sus observaciones. La migración obviamente esta hecha por meros cálculos políticos personales y toman la presunta crisis del PRI como pretexto.

    La libertad decía Locke definida como, “la capacidad de satisfacer nuestros apetitos”. Que los partidos hagan su propia evaluación y tomen las medidas que correspondan.

    Hacer una evaluación temprana de las rupturas que han alcanzado a varios partidos sería superficial. Habrá que esperar los resultados de la elección del 2024 y si Movimiento Ciudadano logra los dos dígitos a que aspira en las cifras nacionales y estatales, que para eso recluta y se mueve. Hasta entonces lo sabremos.

  • ¿QUÉ LE DEBE SONORA A LA 4T?

    ¿QUÉ LE DEBE SONORA A LA 4T?

    Por: Bulmaro Pacheco

    Ya comenzaron a circular por la entidad algunos personajes que se hacen llamar representantes de los aspirantes de Morena a la Presidencia de la República. Buscan atraer seguidores, dentro y fuera de las filas del partido Morena, y en la clase política estatal en general.

    Es decir, Morena como partido nuevo en el escenario nacional y local, no cuenta con estructuras ni con el número de militantes activos que pudieran presumirse para sumar fuerzas a favor de cualquiera de las ahora conocidas como “corcholatas” presidenciales. Por eso buscan en forma denodada entre inconformes, pretensiosos o “asalta oportunidades”, -a la primera que se presente-, que en el momento político…No faltan.

    La candidatura y la encuesta definitiva deberán estar listas por allá a mediados del 2023. Se ha dicho que la candidatura recaerá en quien salga mejor en las encuestas, pero no han faltado voluntarios que ya empiezan a desplegar publicidad política de los aspirantes en edificios y calles, o tratando de agrupar a quienes se dicen miembros de ese partido como a quienes desde otras trincheras -y partidos- buscan acomodarse en espacios de los grupos promotores.

    Bueno será que quienes han aceptado la invitación para sumarse a esos grupos, realicen una reflexión seria y bien meditada de lo que para Sonora ha significado la llamada 4T y lo que ha hecho por el estado a la fecha, desde que en lo federal ha sido gobierno (a casi 8 años de su creación como partido político):

    ¿Qué tanto le debe Sonora a Morena y la 4T?, ¿Qué tanto han hecho Morena y la 4T por Sonora en esos años?

    Se trata de hacer un análisis objetivo, sin fanatismos, aunque se ve una pérdida de conexión con la realidad sonorense de parte de la llamada 4T, el embrollo de los graves problemas de seguridad es la mejor prueba.

    Dijeron, por ejemplo, que iban a formar “una nueva clase política” al tomar las riendas del poder, pero no lo han cumplido. Gobiernan con personajes reciclados de otros partidos y otras formaciones políticas y no se conoce de una nueva generación de políticos y administradores públicos que hayan traído una nueva mística de servicio o hayan aportado algo a la modernización de Sonora. Al contrario, experimentamos una verdadera regresión política con prácticas que se creían desterrados de las administraciones públicas, como el nombrar a parientes de todos los grados para los cargos públicos y revivir las plazas hereditarias sin rubor alguno en algunos rubros muy marcados en salud y educación.

    Desde el principio los filósofos de la 4T provocaron un caos administrativo con la supresión de la mayoría de las delegaciones federales, y crearon vacíos administrativos que dificultaron la relación de la gente con el gobierno federal. Se quejaron de un agotamiento en la función de los delegados federales, pero no diseñaron alternativas que hicieran más eficiente el servicio al público en general.

    La controvertida figura de los llamados súper delegados quedó desdibujada rápidamente porque fueron rebasados, y en sectores sensibles de la administración federal como la educación, la economía y las relaciones exteriores, donde complicaron innecesariamente la tramitología y cayeron en servicios deficientes e indolencia administrativa.

    Los grandes sistemas de salud con derechohabiencia afiliada no han sido prioridad para la 4T en Sonora y al parecer en ninguna parte de México.

    Las evidencias ahí están. Entraron en crisis los tiempos de espera -sobre todo en las consultas de especialidades-, el abasto de medicamentos y la programación de cirugías (por varias razones a cada rato se suspenden, con la consecuente molestia de los derechohabientes).

    Los problemas en esas instituciones están peor que antes, y nos les ha caído ninguna porción de la cacaraqueada transformación ofrecida y anunciada por la llamada 4T desde hace cuatro años.

    No hay una nueva institución de educación superior y/o media superior en Sonora (de 2018 a la fecha), que se deba al esfuerzo y a la intención del gobierno federal para contribuir con los ciclos anteriores y ampliar la cobertura en media superior y superior como había sucedido antes.

    Desde octubre del 2018 se anunciaron tres universidades: Una para Agua Prieta, otra para Plutarco Elías Calles y una más para Etchojoa (Buaysiacobe). Serían parte de las mil universidades “Benito Juárez” en toda la República. A cuatro años del ofrecimiento no se sabe que estas casas de estudio hayan sido inauguradas o estén aportando algo para los municipios en su desarrollo, o que las carreras ofrecidas a sus estudiantes tengan pertinencia con las características del desarrollo regional. Eso sí, han construido dos escuelas de béisbol que se crearon con la compra de los estadios de Hermosillo (Héctor Espino) y Cajeme (Tomás Oroz).

    Ha habido avances en el plan de justicia Yaqui y en los ocho pueblos de la etnia se observan nuevas viviendas (800), mejores caminos, una universidad indígena en construcción, una radiodifusora, el compromiso de restituir sus antiguas tierras y construirles un acueducto para dotar de agua potable a los habitantes de los 8 pueblos. Hasta ahora el avance en el plan de justicia Yaqui a juicio de los habitantes es del 50%. Falta que arranquen los planes destinados a los Mayos, Guarijíos y Seris.

    250 mil sonorenses adultos mayores reciben 3,850 pesos cada dos meses. Están becados 96 mil estudiantes de educación media superior (850 pesos mensuales) y siete mil en el nivel superior (2,500 al mes).

    Con todo y la crisis de inicio, los programas de vacunación han funcionado evitando más muertes.

    Los de la 4T no han concluido en cuatro años, los cinco kilómetros que quedaron pendientes de la carretera internacional en el tramo Imuris-Nogales, para concluir el esfuerzo de varios sexenios federales que desde 1986 la construyeron de Estación Don a Nogales.

    Falta que se inaugure el nuevo hospital general de especialidades (del que no se sabe cuál es la realidad) y se clarifique la nueva estrategia del sistema de salud y hospitalario sonorense, que por ahora luce en chino y donde se presentan nubarrones, como las nuevas plazas, las nuevas basificaciones y el financiamiento real (de dónde y cómo vendrá) para la prestación del servicio de salud a la población abierta, esa que no se encuentra afiliada a ningún servicio de salud y que en el pasado inmediato se apoyaba en el seguro popular que la 4T borró del mapa. También falta que se fijen fechas y plazos para la construcción de los -anunciados sexenios atrás- nuevos hospitales del IMSS en Navojoa, Guaymas y San Luis Río Colorado.

    No hay una gran obra de infraestructura que la 4T haya aportado a Sonora en 4 años como en su tiempo lo hicieron con las Presas, Cárdenas, Alemán, Ruiz Cortines y López Mateos, la educación con Luis Echeverría y las carreteras con De La Madrid, Salinas, Calderón y Peña Nieto. Quizá la carretera Agua Prieta-Bavispe cuando esté terminada. El resto de las inversiones anunciadas por el gobernador Durazo todavía no aterrizan, quizá esperando recursos y tiempos presupuestales, pero eso se verá en la evaluación del primer año del nuevo gobierno estatal.

    Va a cumplir cuatro años la llamada 4T y muchos en Sonora extrañan las estrategias de diálogo que los Presidentes de México desde Lázaro Cárdenas a Peña Nieto instauraron con los sonorenses todos (empresarios, agricultores, alcaldes, rectores, sindicatos, jóvenes, mujeres, dirigentes sociales y políticos etc.) Por ahora ese diálogo no se da y quizá no se dé en lo que resta del sexenio.

    En eso y otras cosas, la 4T le está quedando a deber a los sonorenses en los inacabables pendientes de México con Sonora y con quienes en 2018 creyeron en otro estilo y en otro modelo… y le aportaron 650 mil votos.

  • SUCESIÓN ADELANTADA ¿PORQUÉ EL MÉTODO NO CAMBIA?

    SUCESIÓN ADELANTADA ¿PORQUÉ EL MÉTODO NO CAMBIA?

    Por: Bulmaro Pacheco

    Venustiano Carranza fue el primer presidente de México que intentó dejar sucesor pese al costo político. Por alguna razón tomó partido por Ignacio Bonillas, a quien conoció en Sonora.

    Bonillas (1858-1942), ingeniero civil por la Universidad de Boston, presidente municipal de Nogales y prefecto de Magdalena y Arizpe, miembro del gabinete alterno carrancista y embajador en Washington, fue diputado de la XXIII Legislatura local que se negó a reconocer como presidente al usurpador Victoriano Huerta.

    El intento de Carranza por imponer a Bonillas le costó la vida en Tlaxcalantongo, Puebla, en mayo de 1920.

    Adolfo de la Huerta -como secretario de Hacienda- buscó ser el sucesor de Álvaro Obregón en 1923, pero Obregón ya tenía un favorito en la persona del secretario de Gobernación Plutarco Elías Calles. Inconforme, De la Huerta se rebeló y lo acompañó una parte importante del ejército; pero terminó exiliado en Los Ángeles, California, y regresó a México hasta el gobierno de Lázaro Cárdenas.

    Calles percibió de inmediato la intención de Álvaro Obregón de reelegirse en 1928 y poco hizo por evitarlo. El resultado es de sobra conocido: Obregón fue asesinado. El sistema político entró en crisis, porque iba a ser el primer sexenio de gobierno que se cubrió con tres presidentes: Emilio Porte Gil, Pascual Ortiz Rubio y Abelardo Rodríguez. Aun así, Calles -fundador del PNR- influyó en la postulación de Lázaro Cárdenas, que cubrió el primer sexenio de 1934 a 1940.

    Cárdenas batalló, porque su favorito era Francisco J. Mújica, pero optó por un perfil conciliador como Manuel Ávila Camacho.

    Ávila Camacho optó por un civil, su secretario de Gobernación Miguel Alemán, que desde inicios del sexenio punteó entre los aspirantes.

    Alemán por su parte sorprendió con Adolfo Ruiz Cortines, un personaje que había seguido la carrera política del presidente como gobernador de Veracruz y secretario de Gobernación.

    Ruiz Cortines hizo finta con varios aspirantes y al final se decidió por el secretario de Trabajo Adolfo López Mateos.

    Gustavo Díaz Ordaz, secretario de Gobernación, siempre fue el favorito de López Mateos. Gobernó México de 1964 a 1970.

    A su vez otro secretario de Gobernación, Luis Echeverría Álvarez, sería el favorito de Díaz Ordaz para gobernar de 1970 a 1976.

    Echeverría tenía varios aspirantes al final de su gobierno (Moya, Gálvez, Cervantes) y al final se decidió por José López Portillo, que gobernó de 1976 a 1982.

    López Portillo se decidió por Miguel De la Madrid, y él a su vez por Carlos Salinas de Gortari, su secretario de Programación y Presupuesto.

    Con De La Madrid en el poder se agudizó la crisis del método sucesorio al darse la primera ruptura en el PRI, por desacuerdos con una corriente política fuerte como lo fue en su momento el cardenismo. Esa ruptura le costó al PRI casi seis millones de votos (31.12% de la votación total) que se llevó Cárdenas en 1988, así como los resultados electorales más cuestionados de la historia reciente de México.

    La otra crisis del PRI se da en 1994 con el asesinato de Luis Donaldo Colosio, el candidato elegido por Carlos Salinas de Gortari después de un proceso sucesorio desaseado que había generado fricciones con Manuel Camacho Solís, regente de la Ciudad de México.

    Salinas vuelve a elegir candidato en la persona de Ernesto Zedillo, quien gana la presidencia con el más alto porcentaje de participación logrado en los últimos 28 años (el 77.7%) en la elección de 1994.

    En el 2000 el PAN gana la elección presidencial, y se pensó que el método sucesorio iba a cambiar con otro partido en la presidencia. No fue así y desde mediados del sexenio de Vicente Fox se empezó a hablar de Martha Sahagún, su esposa, y de Santiago Creel, secretario de Gobernación.

    El PAN impulsaba por su lado a quien había sido su presidente nacional: Felipe Calderón. Y en una interna en 2005 le gana a Creel la candidatura.

    Calderón ganó la Presidencia en 2006, y nuevamente se pensó que el método sucesorio iba a cambiar… pero no.

    Desde el principio de su gobierno Calderón impulsó a Ernesto Cordero y lo promovió en distintas posiciones dentro de su gabinete. El PAN presionó por la exsecretaria de Educación Josefina Vásquez Mota, y al final fue ella la candidata que perdió ante Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, y llevó al PAN en el gobierno al tercer lugar de las preferencias.

    Peña Nieto tardó en tomar la decisión sobre quién sería la carta para sucederlo. Originalmente se pensó en su secretario de Hacienda (Videgaray) y el de Gobernación (Osorio). Al final se decidió por José Antonio Meade, al que fogueó antes en varias secretarías de Estado, pero que llevaría al PRI al tercer lugar en las preferencias en el 2018.

    Con el arribo de la llamada 4T al poder se pensó -por enésima ocasión- que daría un cambio en el método sucesorio iniciado por Carranza en 1920. Al tratarse de un partido (Morena) fundado apenas cuatro años antes de llegar al poder, y que llegó hablando de un cambio profundo en la vida política del país, había esperanzas de que así fuera… pero no.

    El presidente López Obrador decidió que el “método de encuestas” será el único para seleccionar al candidato presidencial del 2024, y él se reserva para sí los nombres de quienes pudieran participar en esas encuestas, dando prioridad a la jefa de gobierno de la Ciudad de México Claudia Sheinbaum, al canciller Marcelo Ebrard y a su recientemente incorporado secretario de Gobernación Adán Augusto López (el más cercano a su confianza y la verdadera carta sucesoria del presidente, a juicio de los críticos).

    ¿Por qué después de más de 100 años y con tantos cambios constitucionales y políticos, el método sucesorio no ha cambiado en México? ¿Por qué todos los presidentes, (incluso los que dijeron que cambiarían la política de fondo) se han reservado para sí mismos la decisión final?

    ¿Por qué (desde 1988, cuando De la Madrid propuso a Carlos Salinas) ninguno de los favoritos de los presidentes para la candidatura (Colosio, Labastida, Creel, Cordero, Meade) ha llegado a la Presidencia?

    ¿Por qué, a pesar de que la realidad política de México ha cambiado con la pluralidad, el voto a la mujer, el pluripartidismo y la ampliación de la representación, el método sucesorio sigue siendo el mismo que aplicaron los últimos presidentes de México?

    Años antes, la sucesión empezaba a ser tema después del cuarto informe presidencial. La opinión pública comenzaba a señalar nombres, sus virtudes y sus defectos. Ahora la situación ha cambiado.

    Ha sido el propio presidente López Obrador quien ha encartado y descartado a los probables del partido en el poder y sin rubor alguno los autoriza a que se promuevan incluso utilizando recursos públicos y distrayendo a la administración pública.

    Todo eso, con una marcada preferencia presidencial por Sheinbaum y Adán Augusto, frialdad con Ebrard y la exclusión de Ricardo Monreal -por la permanencia del método sucesorio que cumple 102 años-, auguran la posibilidad de fractura en ese partido y le baja a la euforia a quienes predicen que la historia ya está escrita para Morena y los mexicanos en 2024. Se me hace que exageran y que viven la euforia propia del triunfalismo y la soberbia… Los van a despertar… Todavía falta.

  • EL PRI Y SUS DIVISIONES EN SONORA

    EL PRI Y SUS DIVISIONES EN SONORA

    Por: Bulmaro Pacheco

    En el plebiscito de 1936 para elegir al gobernador sustituto de Jesús Gutiérrez Cázarez, participaron: Román Yocupicio (15,541 votos), Ignacio Otero Pablos (10,880) y Leobardo Tellechea (6,696).

    El PNR no registró división alguna. La oposición era interna -aún no se fundaba el PAN-, el presidente Lázaro Cárdenas controlaba la política nacional y Ernesto P. Uruchurtu dirigía al PNR en Sonora.

    En 1961 el PRI se cimbra con la voltereta de última hora para cambiar a Fausto Acosta Romo como candidato al gobierno estatal -que ya había sido propuesto por la CNC y la CNOP- por Luis Encinas Johnson, rector de la universidad. El conflicto se extiende a todo el estado con una huelga magisterial. La candidatura de Encinas se sostuvo con el apoyo del presidente López Mateos y el PRI nacional. En ese entonces, el PAN no postuló candidato al gobierno y al PRI estatal lo dirigía Julio Sánchez.

    En 1967 el PRI se vuelve a cimbrar por otro conflicto en la postulación de candidato al gobierno estatal. Figuraban: Enrique Cubillas, Fausto Acosta Romo y Faustino Félix Serna. Al final la candidatura recayó en Félix Serna que fue apoyado por el presidente Díaz Ordaz y el líder de los diputados Alfonso Martínez Domínguez. El PAN postuló por primera vez un candidato al gobierno estatal: al ex fundador de la UNISON Gilberto Suárez Arvizu. En ese entonces el PRI perdió siete municipios, entre ellos Hermosillo. Félix Serna desplegaría como gobernador una amplia estrategia de inclusión para sumar adversarios y el Estado volvió a la calma.

    En 1973 el PAN no postuló candidato a la gubernatura y desde 1976 el PRI se divide en Cajeme por la expropiación agraria y pierde todo en ese municipio en la elección de 1979. También se pierde en Agua Prieta, Huépac y Empalme. En 1988 el Frente Democrático Nacional como escisión del PRI apenas logra en Sonora 40,937 votos para Cuauhtémoc Cárdenas, (el 9.98%) de la votación local.

    En el 2003, durante el proceso interno para elegir candidato al gobierno estatal entre Alfonso Molina y Eduardo Bours, se generaron fisuras dentro del PRI, que al final llevaron a ganar con solo un punto de diferencia (7,923 votos) a Eduardo Bours contra Ramón Corral.

    En el 2009 el PRI vuelve a dividirse, ahora por las controversias previas a la selección de candidato a la gubernatura en una interna que disputaron Alfonso Elías Serrano y Ernesto Gándara. Las divisiones nunca se superaron, Gándara se apartó de la campaña y el PRI perdió por primera vez el gobierno estatal -por 39,697- votos ante Guillermo Padrés del PAN.

    En el 2015 el PRI se unificó por la decisión de Ernesto Gándara y Antonio Astiazarán de sumarse a la candidatura de Claudia Pavlovich, y el PRI recuperó el gobierno estatal con una diferencia de 71,199 votos.

    Tanto a Gándara como a Astiazarán les hicieron ofertas de otros partidos, pero mantuvieron la institucionalidad y la disciplina para apoyar a la candidata del PRI. Gándara terminó como senador en 2018 y se dedicó a asuntos partidistas. Astiazarán en la administración pública federal.

    En el 2018 el PRI se divide por las postulaciones al Senado de la República. Antonio Astiazarán, que se había disciplinado en el 2015 -quizá pensó que le iban a devolver la cortesía-, aspiró a la candidatura al senado, pero le fue negado el registro para favorecer a la fórmula de Sylvana Beltrones y Manuel Ignacio Acosta. La migración de Toño Astiazarán y su postulación por la alianza PAN-PRD-MC le costó al PRI 236,439 votos.

    En esa elección de senadores la alianza PRI-Verde-Panal perdió por 208,849 votos ante los candidatos de PT-Morena y Encuentro Social (Alfonso Durazo y Lily Téllez) que lograron 510 mil votos.

    Nunca en la historia política de Sonora se había generado una ruptura en el PRI por la postulación de la fórmula de candidatos al Senado.

    En el 2021 la gobernadora Pavlovich tampoco le devolvió el favor político del 2015 a Ernesto Gándara, y nadó de muertita en la campaña -dejando hacer y dejando pasar- a Morena que tuvo toda la cancha para actuar ante la tibieza de la gobernadora que ya había abandonado al PRI y sus organizaciones, impuso candidatos afines a su grupo político y al final resultó favorecida con un cargo diplomático del gobierno federal -¿en pago a sus servicios?- en Barcelona, España.

    Ese nombramiento le hizo ruido a Morena. Le mojó la pólvora al discurso ‘anti pasado’ del gobernador Durazo y le generó a la exgobernadora un amplio repudio entre los priistas y no priistas que, con el nombramiento de cónsul en Barcelona, España, incrementaron la sospecha de colaboración con la cuatroté en las elecciones del 2021, igual que Quirino Ordaz en Sinaloa, que fue designado embajador en España. ¿Casualidades? En política, difícilmente las hay.

    En 2022 se repite en Sonora la renovación de la dirigencia estatal del PRI sin un gobernador priista, como en 2010. En este año había varios gobernadores del PRI, no solo dos como ahora. Había diputados federales y senadores, más de 35 alcaldes y una bancada mayoritaria en el Congreso local. Ahora solo una senadora, cuatro legisladores locales y 16 presidentes municipales. Nada más.

    Ahora el CEN del PRI, -como en su tiempo le tocó- al PNR y al PRM, mediar y arbitrar entre los fines nacionales y los intereses locales en el manejo de los asuntos partidistas en los estados. En aquel tiempo (PNR-PRM) la normatividad interna se diseñó para combatir y evitar la perpetuación de cacicazgos locales y regionales en el manejo de la política partidista, y favorecer con ello la movilidad política entre grupos y clases sociales a la hora de integrar la representación política.

    Eso todavía no ha cambiado, a excepción de aquellos casos donde los gobernadores de extracción priista que por muchos años mantuvieron fuerza e influencia para manejar los asuntos del PRI en sus estados.

    Los gobernadores decidían casi siempre tanto el rumbo como los perfiles de las dirigencias estatales, cuidando la disciplina interna y la compensación política hacia quienes competían y no resultaban favorecidos, pero negociaban espacios administrativos.

    Eso se acabó para el PRI en Sonora a la salida del gobierno priista en septiembre de 2021, y por eso y por la tardanza en los cambios se complicaron las cosas en la renovación de la dirigencia estatal donde la única mediación correspondió a la dirigencia nacional tal y como lo establece la normatividad interna.

    Ya no es como antes, ahora hay una nueva ley de partidos políticos y existen instancias jurisdiccionales donde se arbitran inconformidades y desacuerdos. Desde finales del siglo XX las inconformidades por la exclusión en candidaturas a cargos de elección, o por resultados electorales controvertidos o por diferencias partidistas, han tenido su cauce en los tribunales para evitar que estos, se diriman a golpes, o sillazos o con violencia como ocurría antes. Ese es el valor de las Instituciones y ha sido el camino más recomendable más allá de las pasiones y las descalificaciones de coyuntura, o de los enfrentamientos entre grupos de interés casi siempre interesados en domesticar a los partidos.

    Los actuales debates en torno a la renovación de dirigentes en el PRI Sonorense no son nuevos ni serán los últimos. Ojalá que los militantes del PRI sepan encauzar sus diferencias y estar a tiempo para preparar al partido y convertirlo en un verdadero contrapeso político ante el desorden y la falta de resultados de los gobiernos de Morena. También para el máximo reto electoral del 2024 donde estarán en juego no solo la renovación del ejecutivo federal, también el proyecto de nación donde el PRI siempre ha tenido un papel destacado. Ya se verá.

  • ¿QUIÉN MATÓ A MADERO?

    ¿QUIÉN MATÓ A MADERO?

    Por: Bulmaro Pacheco

    Apenas iniciado el siglo XX en México, fueron asesinados tres presidentes de la República: uno en 1913, Francisco I. Madero; otro en 1920, Venustiano Carranza; y el electo Álvaro Obregón, en 1928.

    Madero fue asesinado por órdenes de Victoriano Huerta. A Venustiano Carranza lo mataron por el conflicto sucesorio con el grupo de sonorenses encabezados por Álvaro Obregón, quien también sería asesinado por José de León Toral. ¿No teme un atentado contra su vida? Le preguntaron alguna vez al general Obregón y contestó: “Cualquiera que intentara matarme sabría que cambiaría su vida por la mía”. Otros tiempos.

    José de León Toral, autor material del asesinato de Obregón, murió fusilado en febrero de 1929, a casi siete meses del magnicidio. De los autores intelectuales señalados por la opinión pública, como Luis Napoleón Morones —poderoso líder de la CROM—, poco se supo.

    José Rodolfo Gil Agustín Herrero Hernández, militar poblano, fue quien operó el asesinato de Carranza. Siguió en el ejército hasta que el presidente Lázaro Cárdenas lo dio de baja. Murió en el ostracismo, en Monterrey, Nuevo León, en enero de 1964, a los 84 años.

    Francisco I. Madero llegó a la Presidencia a los 38 años. Nació en Parras de la Fuente, Coahuila en 1873. Ocupó el cargo del 6 de noviembre de 1911 al 19 de febrero de 1913. No pudo cumplir los compromisos que hizo con sus seguidores. No lo dejaron gobernar las fuerzas y los intereses del porfirismo que—a diferencia de su jefe—, nunca terminaron de irse, y se dedicaron a obstruir su gobierno hasta que lo asesinaron, con la complicidad del embajador de los Estados Unidos Henry Lane Wilson y una parte del ejército federal que se negó a disolver siendo presidente.

    Por órdenes de Victoriano Huerta, Madero y Pino Suárez fueron aprehendidos el 18 de febrero de 1913, y se mantuvieron por varios días resguardados (presos) en el Palacio Nacional.

    Fracasaron las negociaciones de sus familiares y el embajador de Cuba Márquez Sterling con la gente de Huerta y el embajador Lane Wilson. Se negociaba un posible exilio a Cuba a cambio de sus renuncias.

    El general Felipe Ángeles había sido aprehendido después de ellos, pero Victoriano Huerta lo exoneró por temor a una reacción del ejército.

    La obra de Edgar Sáenz López: Francisco Cárdenas, una vida entre el orden y la transgresión, traza la ruta desde los orígenes hasta el final de Francisco Cárdenas, el asesino material de Madero.

    “Salieron con rumbo a la penitenciaría. El coronel Ballesteros recibió el aviso de que la misión estaba por cumplirse. El viaje se realizó sin contratiempos.

    Los automóviles (proporcionados por el yerno de Porfirio Díaz Ignacio de la Torre) llegaron a la entrada principal del recinto y Cárdenas bajó a entrevistarse con Román Rojas, jefe de carceleros, que lo esperaba en la puerta. Intercambiaron algunas palabras y después el mayor con prepotencia ordenó a los choferes continuar la marcha hacia la parte posterior del establecimiento, con argumentos de que los prisioneros serían entregados por una puerta trasera”.

    “Al llegar, Cárdenas dio orden de alto y obligó a Madero a bajar del automóvil Protos con la frase ‘baje usted, carajo’”. El expresidente dio unos pasos, el rural sacó su arma y le propinó dos tiros en la cabeza. Pino Suárez salió del Peerles y corrió la misma suerte, asesinado por el cabo Rafael Pimienta, amigo de Cárdenas y reclutado por él mismo.

    En su declaración, Cárdenas ratifica: “Disparé sobre el Sr. Madero cuando ponía un pie en el estribo del coche, mientras el sargento Pimienta hacía lo mismo con el Sr. Pino Suárez”.

    ¿Como se planeó el asesinato? Cárdenas confiesa: “Como a la una de la tarde un ayudante del comandante militar de México se presentó en el cuarto del hotel en que yo me hospedaba manifestándome que el General Aureliano Blanquet deseaba verme inmediatamente. Ocurrí al llamado y una vez en presencia del referido militar, éste me dijo que el país demandaba un gran servicio de mí: El asesinato del presidente Madero. La manera brusca en que tal cosa me dijo, me desconcertó momentáneamente. De allí fui conducido a la Secretaría de Guerra, donde se encontraban conferenciando los ex generales Félix Díaz y Manuel Mondragón”. Mondragón me dijo: “No tenga miedo, no es esta la primera vez que se echa a un hombre. Es cierto, le contesté, pero jamás he dado muerte a una persona de la importancia de ésta”.

    Continúa Cárdenas: “Blanquet me llevó a presencia de Victoriano Huerta. Cuando nos presentamos ante él, Huerta me dijo que los miembros de su gabinete habían acordado que se diera muerte al Señor Madero, y que por lo tanto yo debía proceder conforme a las instrucciones que se me habían dado, exceptuando al General Ángeles”. “De allí regresé al cuartel general, donde me encontré a Cecilio Ocón, acordando con Celso Acosta, el ataque simulado (a los vehículos) que debían efectuar 10 rurales”.

    Dice Stanley Ross: “La escolta acribilló los carros a balazos como prueba de un ‘ataque’, y después los cuerpos fueron llevados a la penitenciaría. La autopsia reveló que Madero había muerto a causa de dos tiros que le horadaron la cabeza y Pino Suárez a causa de tres heridas en la cabeza y de cinco balazos en el cuerpo”.

    Continúa Ross: “Madero, que se negó a matar, respetó la Ley y la dignidad del hombre, fue asesinado. Esos hechos, desacreditaron al gobierno de Victoriano Huerta y al Movimiento de la Ciudadela”.

    Francisco Cecilio Cárdenas Sucilla nació un 22 de noviembre de 1878, en La Palma, municipalidad de Sahuayo, distrito de Jiquilpan, Michoacán. Como miembro de la policía rural (creada por Porfirio Díaz en 1880) solo se dedicó a realizar tareas menores en materia de seguridad.

    Fue dado de alta en el Ejército cuatro días después del asesinato, el 26 de febrero de 1913, con el grado de mayor de caballería auxiliares. Fue dado de baja el 28 de julio de 1914 por el presidente Francisco S. Carvajal.

    Ante el repudio provocado por su acción y ante la caída del gobierno que lo impulsó a cometer el crimen, tuvo que irse a Guatemala, a donde llegó en agosto de 1914. El gobierno federal solicitó en diferentes ocasiones su extradición, pero sin éxito, hasta que el presidente Adolfo de la huerta lo hizo formalmente, en noviembre de 1920.

    Cuando fue apresado por la milicia guatemalteca con miras a la extradición y durante su traslado a la capital, la versión oficial señala que se suicidó de un balazo en la boca con una pequeña pistola que llevaba escondida en las botas.

    Dice Sáenz López: “Podemos preguntarnos cuál fue la importancia de Cárdenas. Su relevancia estriba en ser el asesino de Madero. No tomó decisiones ni encabezó grandes contingentes, fue uno más de los muchos oportunistas opositores de la Revolución Mexicana. Su estudio ayuda a entender el comportamiento de muchos militares contrarrevolucionarios. Su caso revela lo que el porfirismo heredó al maderismo, que no exterminó al Ejército Federal y eso fue lo que determinó su caída. Cárdenas fue un corrupto y arbitrario; el gobierno maderista lo toleró y el huertismo lo premió”. Tres balas de principios del siglo mexicano cambiaron el curso de la historia . Por lo menos en el asesinato de Madero si se supo, y bien, tanto del autor material (Cárdenas), como de los intelectuales ;Huerta, Blanquet y Wilson…