Categoría: Editorial

  • #OPINIÓN LAS PLURIS, LA REVOCACIÓN Y LAS CAMPAÑAS

    #OPINIÓN LAS PLURIS, LA REVOCACIÓN Y LAS CAMPAÑAS

    Por: Bulmaro Pacheco
    Los “diputados de partido” se crearon en 1963 para darle espacios a los partidos de oposición que llevaban varios años participando en las elecciones y no lograban representación en las Cámaras.

    El PAN fundado en 1939 había ganado algunos distritos de mayoría: 4 en 1946 y 1949; 5 y 6 en 1952 y 1955; 6 y 5 en 1958 y 1961, hasta que subió a 18 (Ya con los de partido) en 1964, cuando logró el 11.5% de la votación nacional. El blanquiazul había empezado a ganar también ayuntamientos desde 1946 en Michoacán, Jalisco, Durango y Chiapas.
    Además, alcanzaron diputados federales los partidos, Popular Socialista (PPS) y el Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM).

    El requisito para obtener “diputados de partido” en 1964 era lograr el 2.5% del total de los votos con derecho a 5 diputados y uno más por cada 0.5% adicional. En 1972 se redujo el porcentaje del 2.5% al 1.5% y ni así se lograba “cuajar una estructura auténticamente pluripartidista” que era el objetivo de la primera reforma impulsada por el PRI.

    Cuando México contaba con 65 millones de habitantes, en diciembre de 1977 se reformó el artículo 52 de la Constitución que amplió a 400 diputados la integración de la Cámara. 300 de ellos serían elegidos a través del sistema de mayoría relativa y 100 mediante el sistema de “representación proporcional”. En 1986 se modificó de 100 a 200 la representación proporcional, con lo que se estableció un espacio más amplio para las oposiciones en la Cámara de Diputados.

    El Senado se reformó para incluir la senaduría de primera minoría en 1993 y para los senadores de lista o de partido (plurinominales) en 1996.

    Es decir, lograban un espacio en el Senado los mejores perdedores en la elección (32) y los que los partidos lograban enlistar (32) de acuerdo a su porcentaje de votación (casi siempre una curul por cada 3% de la votación), con lo que se quebró el principio de igualdad de los estados, la representación auténtica del federalismo, porque los senadores de lista no representaban -ni representan- a los estados, sino a los partidos.

    Con el tiempo, el debate sobre los “pluris” evolucionó cuando los partidos tuvieron financiamiento para sus actividades, lo que los ponía con piso parejo en la competencia desde 1997 -con una autoridad electoral autónoma- y cuando las oposiciones lograron la mayoría en la Cámara de Diputados.

    Mucho antes dice la propuesta presidencial, el debate de 10 años a la fecha se ha centrado en proponer eliminar 100 diputados “pluris” y también los 32 senadores de lista porque carecen de representación federalista, lo que es correcto. Al haber piso parejo e igualdad de representación ni 100 de las 200 pluris ni las 32 senadurías de lista tienen ya sentido. Deberían borrarlas del mapa.

    Las izquierdas fueron las principales promotoras -y beneficiarias- de la representación proporcional. Hay personas que han logrado ocupar curules en más de tres o cuatro ocasiones sin hacer campaña.

    Ahora el Presidente López Obrador propone la desaparición de los “pluris”. No se sabe si todas o una parte ¿Logrará convencer a sus aliados?, ¿Qué irán a decir algunos de sus cercanos que han brincado de partido en partido ocupando “pluris”? Habrá que esperar el contenido de la reforma y la reacción de las oposiciones. El debate sacará chispas. Las pluris que en un tiempo ayudaron -y ayudan- a la gobernanza, ahora son cuestionadas hasta por sus propios promotores.

    AMLO sabe que se trata de una bandera política que le puede redituar bonos con las clases medias y la enarbola, aunque sus clientelas cercanas no compartan la idea y que seguramente tendrán mucho que decir.

    Da pena ver a Mario Delgado, el dirigente nacional de Morena, advertir (y amenazar) a los mexicanos de que si desean que sigan las becas, el gasto social a los adultos mayores y los subsidios a diferentes grupos sociales, voten favor de que el presidente de México se quede en el cargo el próximo 10 de abril en la revocación de mandato.

    Delgado y sus asociados tienen pánico de que la próxima consulta sea desdeñada por la gente como lo fue la del juicio a los expresidentes, que solo motivó al 8% de los inscritos en la lista nacional de electores. Ahora requieren el 40% de participación para que el evento promovido por ellos mismos surta efectos y al parecer no les salen las cuentas. Algo están viendo los de Morena que no les cuadra, quizá demasiado rechazo.

    Pena ajena causan también los activistas pagados por el poder público llamados “Siervos de la nación”, que de casa en casa entrevistan a la gente para preguntar si van a votar o no el próximo 10 de abril para que el presidente de México se quede en el poder, y así sigan los grandes cambios (sic) impulsados por la autodenominada “cuarta transformación”.

    ¿Ignoran los dirigentes y promotores de la revocación de mandato que el presidente López Obrador fue elegido para que concluya su mandato el próximo 30 de septiembre del 2024, tal y como lo establece el artículo 83 de la Constitución mexicana? No, no lo ignoran. Y ante la ausencia de logros concretos en el gobierno han intensificado trabajos políticos con el fin de sacar adelante la revocación de mandato y cuidar que la imagen presidencial no sufra desgaste ante tanta crítica y tanto problema sin resolver. Además les servirá de ensayo para lo que viene en el 2024.

    El actual proceso de revocación de mandato establecido desde el 2019 en el artículo 35 de la Constitución ha sido organizado, promovido y publicitado principalmente por el Gobierno y su partido Morena. Se ha promovido la recolección de las firmas requeridas (3% de los inscritos en la lista nominal de electores en por lo menos 17 entidades federativas) y a los gobernadores de Morena les fijaron su respectiva cuota, aun cuando establece la fracción 7 de dicho artículo: “queda prohibido el uso de recursos públicos para la recolección de firmas, así como con fines de promoción y propaganda relacionados con los procesos de revocación de mandato”. Pero ahí están los espectaculares, las marchas con acarreos y con recursos públicos al más viejo estilo, las entrevistas y las giras de trabajo que no han parado por parte de los servidores públicos, para hacerle promoción al evento del próximo 10 de abril.

    El artículo 35 establece el derecho ciudadano de votar y ser votado. En un ejercicio de libertad, el ciudadano deberá decidir si votará o no. Se requerirá la votación del 40% de los inscritos en la lista nacional de electores, equivalente a 37 millones, para que el ejercicio sea vinculante, es decir, que surta efectos.

    Habrá quienes no vayamos a votar, pero que vote el que quiera sin dejar de registrar que el debate sobre el 2024 ya está aquí y el tema de la revocación de mandato -aunque no es retroactivo- por interés oficial, lo han convertido en la primera instancia para medir la verdadera fuerza político electoral del Presidente y su partido después del 2021, de tanto problema y de tanto desgaste… Algo están viendo que ya no les cuadran las cuentas triunfalistas que hasta hace muy poco tenían. Algo ven.

  • EL ZANCUDO | HERMOSILLO: ¿LISTOS PARA EL TANDEO?

    EL ZANCUDO | HERMOSILLO: ¿LISTOS PARA EL TANDEO?

    Por: Arturo Soto Munguía

    El verano de 2005 fue uno de los más horribles que se recuerden en Hermosillo. La ciudad se quedó sin agua y entonces comenzó a racionarse el suministro de manera que en la mayor parte de la ‘capital del noroeste’ al abrir la llave salía solo el chasquido del aire que movía los medidores. Es decir, que también se cobraba.

    Ya hace 17 años de aquellos episodios tomados a chunga hoy, en que nos bañábamos como los mosquitos, pegados a la pared, acopiábamos los ahorros para comprar un tinaco o en un desplante de opulencia fifí que incluso ahora resultará extravagante para algunos, llegamos a usar un garrafón de agua purificada para el aseo personal.

    Así fuera un ‘baño vaquero’ que, para referenciar a los desconocedores, digamos que consiste básicamente en lavarse el pescuezo, los sobacos, las patas, el culo y sus zonas adyacentes.

    No quiero asustarlos, pero desde hace unas semanas, en varias zonas de la ciudad se comienza a sentir una disminución en el suministro de agua.

    Las noticias que llegan no son alentadoras. La presa El Novillo, de donde tuvo a bien robar agua ese santo varón llamado Guillermo y apellidado Padrés se encuentra tan seca, que las ‘tomas’ (esos tubos de donde se extrae el agua) ya no pueden ‘jalar’ sino aire.

    También me tocó reportear ‘in situ’ esa magna obra de ingeniería (eufemismo que se ruboriza para esconder el atraco de más de tres mil millones de pesos ¡tres mil millones de pesos!) y observar los megatubos sumergidos en el agua de El Novillo, que se prolongaban cerro arriba y luego bajaban por kilómetros y kilómetros para llevar esa agua a Hermosillo.

    ‘El Novillo’, y ‘El Oviachic’ por consecuencia andan hoy por el 20% de su embalse y lo peor es que no llueve en Sonora. Es la hora de ponerse serios y no apelar a la sobrepoblación de ‘putos’ en Guaymas y otras sandeces que pueden resultar cómicas en algún momento, pero no ahora.

    Hermosillo no tiene agua y Ciudad Obregón tampoco. El acueducto fue un negociazo para los mismos, incluyendo a esos que ahora levantan la mano como alternativa ante el mismo caos.

    En aquel entonces hice una crónica que pudiera parecer apocalíptica, pero 17 años después recobra vigencia porque otra vez estamos a punto de quedarnos sin agua, de bañarnos como mosquitos pegados a la pared o de buscar cualquier recipiente para almacenar algo con qué lavar los trastes. O el cabello, o el sobaco o algo.

    Ahí les va. No quiero buscar culpables, porque las víctimas podemos ser tod@s doña María Antonia, esa señora que le da vida al periodismo a ras de tierra, que jamás morirá bajo el fardo de los ‘datos’, siempre tan coquetos con el poder en turno.

    II

    Va la crónica:

    Hace diez años que a doña María Antonia la alberga la misma casa, construida con lo que hace un día fue lámina negra y hoy tiene el color del desconsuelo.

    En los veranos de Hermosillo, esas láminas suelen ser utilizadas como referencia para ilustrar las bondades del clima. Sobre ellas, aseguran, se puede guisar un huevo a eso del mediodía, y a lo mejor es cierto.

    María Antonia Armenta, se llama y tiene 76 años. En los últimos diez ha sido -como el resto de sus vecinos en La Alborada-, nopales que los políticos van a ver, sólo cuando tienen tunas. Digámoslo más claro: votos.

    Pero en estos días no tienen ni tunas, ni votos ni agua.

    Bueno, agua nunca han tenido. Ni drenaje. La energía eléctrica llega a algunas casas a través de una maraña de cables que cuelgan a baja altura, enredados en árboles y postes improvisados.

    A doña María se le ha venido el mundo encima desde hace cinco meses, fecha en que víctima de un aneurisma, falleció su hijo mayor, empleado de maquiladora. Tenía 40 años y era el sostén económico del hogar donde vivía junto a su madre y su hermano menor, de oficio albañil.

    El muchacho le ayuda desde entonces con un poco de dinero. 150 pesos a la semana, según comienza a platicar, cuando ni siquiera parecía que de sus ojos grises podría brotar más llanto.

    «Imagínate. Te voy a decir la verdad, un tambo de estos vale 150 pesos, a eso nos lo venden; entonces si compro el tambo, me quedo sin comer en toda la semana», dice la señora tratando de cubrirse del sol con una mantilla que parece gajo de cebolla.

    Por eso no ha podido comprar un tambo para guardar agua, ahora que de plano las ‘pipas’ han espaciado sus visitas a la colonia, debido a que el racionamiento impuesto por el gobierno municipal las trae ocupadas día y noche, repartiendo agua en las zonas más afectadas.

    «El agua se nos enlama porque la ‘pipa’ dura muchos días sin venir, y tenemos que pichicatearla, no vaya a ser que no venga y nos quedamos secos», explica mientras pone su mano en el filo de un tambo que alguna vez fue de 200 litros, pero el óxido ya lo lleva a la mitad.

    En su casa, como en muchas otras de la colonia Alboradas, tampoco hay agua y los vecinos carecen de recipientes adecuados para almacenarla.

    La guardan en contenedores de los materiales más dudosos, que tapan con tablas, pedazos de sillas o cualquier otra cosa. Ni pensar en un tinaco. Muy escasos vecinos cuentan con uno de ellos y su situación es verdaderamente complicada, ya que en toda la colonia hay una o dos llaves para abastecer a todos.

    Y es que durante 20 horas al día, más de la mitad de la población hermosillense se queda sin suministro de agua potable.

    A doña María Antonia eso le tendría sin cuidado, pues nunca ha tenido el servicio de agua en su casa, y desde hace diez años va y viene cargando sus cubetas para llenar sus tambos, incluido el oxidado.

    Hace cinco meses, un aneurisma mató a su hijo mayor y desde entonces «todo se me ha venido encima, todas las enfermedades», dice, citando una larga lista de achaques y males que comienzan con la diabetes.

    «Esta es la casita donde vivo, si quieren pásenle para que vean la pobreza», dice, como tratando de convencer a los reporteros, del infierno que vive bajo esas láminas que en un tiempo fueron negras.

    Un tormento que hasta hace poco le tocaba de a menos, porque lo compartía con su hijo, el mayor, el sostén económico, el que murió hace cinco meses… el que desborda de llanto los ojos grises y entrecerrados de doña María Antonia, que aprieta en su boca la mantilla, como para no desgarrarse toda por dentro.

    «Ya hemos ido a pedir tinacos, pero no nos hacen caso; hemos ido al Ayuntamiento, a esa otra parte donde dicen que están dando (tinacos); hemos ido a todas partes pero nadie nos escucha», prosigue, sollozante.

    Pero ya no puede ir al centro. Su salud se fue hasta el suelo en las últimas semanas; está enferma y caminar le cuesta mucho trabajo.

    Sobre todo en las accidentadas y calcinantes calles de su colonia, una más de las 200 a donde el agua no llega, por disposición de la presidenta municipal, que cada vez parece más confundida, errática y desinformada con respecto al problema.

    De la alcaldesa se acuerda doña María Antonia, cuando habla del tandeo:

    «Todo se me vino encima; yo no sé de qué partido sean ustedes, pero si son del PAN, díganle a esa señora que con esto, me ha quitado la vida», dice sollozando.

    Alguien debería venir a decirle, mirando a los ojos de María Antonia, que el problema del agua sí se va a resolver, pero hasta el verano que entra.

    Justo cuando hay elecciones, por cierto.

  • OPOSICIÓN DEVALUADA… ¿Y ERNESTO GÁNDARA?

    OPOSICIÓN DEVALUADA… ¿Y ERNESTO GÁNDARA?

    Por: Rodrigo Sotelo.
    Hablemos de la oposición en Sonora, de su diagnóstico y de sus impedimentos para convertir en oportunidades el desastre que vemos y padecemos con Morena en el gobierno.

    No hay duda de dos realidades: Morena es un esperable fracaso a nivel nacional, en el estado y en todos los municipios que, accidentalmente, encabeza; pero, quienes tendrían que compensarlo con ingenio y determinación política, lo están haciendo peor.

    En el PRI siguen aterrados, todavía aturdidos por la derrota y la orfandad en que los dejaron.

    Como esperando alguna llamada de las que solían recibir de parte de “la señora” para despertar e indignarse por lo que pasa y, sobre todo, por el maltrato que sistemáticamente reciben de quienes, no hace mucho, los veían con una fobia que parecía admiración.

    Están tan devaluados como partido, como opción política, que su todavía líder estatal puede anunciar que está por renunciar al cargo y hasta se atreve a dar pistas de a dónde se iría… ¡pero a nadie interesa, a nadie asusta!

    El PRI Sonora es tan absurdo, que igual se puede ver a más de un aspirante (Pascual Soto o Zaira Fernández) recorrer el estado como no lo hace ni el dirigente o a otro utilizar de pretexto a Colosio (David Palafox), para reclamar el dedazo que antes anhelaban.

    No se discute que Ernesto De Lucas está desdibujado, literal, que está lejos de representar aquel Pato arrojado: astuto como funcionario, creativo como candidato e irreverente como político.

    Aquel que actuaba, luego pensaba. El que se congració con Beltrones, sin faltarle al ingeniero. El mismo que con todos esos alcances, ahora se sienta a negociar con Ernestina y le opera a un aprendiz como Memo Díaz…

    Pero los baches, los altibajos de El Pato no le restan capacidad, ni borran sus méritos, son reflejo de la decadencia opositora que alimenta la ineptitud e irracionalidad de la cuarta transformación.

    Lo mismo con quienes tendrían que asumir el liderazgo de esta oposición casi extinguida, como el ex candidato a gobernador Ernesto Gándara. ¿Quién mejor que Ernesto Gándara? ¡¿Qué mejor oportunidad quiere?!

    El Borrego también es la imagen de una oposición en espera de un milagro, que reza porque quienes gobiernan se sigan equivocando, pero sin intervenir para corregir y construir una alternativa.

    Gándara es otro de los antagonistas de café que aparecerán 5 u 8 meses antes de la próxima elección para volver a ser candidato, sin haber recorrido el estado, sin cuestionar, sin representar, sin haber tomado riesgos, sin aportar absolutamente nada.

    Pero lo más indicativo, es que tal vez estemos frente a una oposición desfasada, inadaptada.

    Frente a una clase política imposibilitada para asimilar esta nueva realidad, esta nueva normalidad que trajo Morena a los gobiernos.

    Ellos, como muchos, pudieran no entender estos tiempos de austeridad: de falta de planes, de estrategia, de talento, de buenos gustos, de sentido común.

    No saben qué hacer con tanta ocurrencia, con tanta rusticidad.

    Gildardo sí está aquí

    Por cierto, hemos dicho que el dirigente panista Gildardo Real es de los pocos que percibe esta realidad y que actúa acorde a las necesidades de la circunstancia política.

    Y sostenemos que Gildardo es del tipo de líder opositor que se necesita en estos momentos.

    Gildardo lo mismo se concentra en la discusión nacional, sin olvidar nuestras propias tragedias, que en la confección y conducción de una opción electoral que propicie beneficios sociales.

    Ayer, por ejemplo, tuvo de invitado a Marko Cortés en la colonia Los Olivos.

    Junto al Presidente Nacional, el equipo de Gildardo Real ofreció consultas médicas, medicinas, bazar de ropa, gestiones y asesoría legal, entre otros apoyos.

    Y es lo menos que se espera de un partido político que realmente busque regresar al gobierno.

    Nuevo Subsecretario en Sedesson

    Tenemos noticias sobre el berrinche de la secretaria Wendy Briceño con la hasta hace unos días subsecretaria de Inclusión Social, Paty Medina.

    Lo han manejado con especial discreción, pero ya sabemos hasta el nombre del personaje que sustituirá a Paty Medina luego de que la Secretaria la despidiera fulminantemente desde el pasado 15 de marzo.

    En lugar de Paty Medina, llegará Alejandro Castro Sandoval que, recientemente, despachaba desde la dirección de Vinculación con Organismos e Instituciones Asistenciales del DIF Sonora.

    El único detalle es que Alejandro Castro no llegará a la Sedesson con los mejores antecedentes.

    Este personaje tiene un historial nada presumible, que involucra escándalos de riñas en vía pública por presuntamente haber insultado mujeres.

    Sí, aunque no se pueda creer (bueno, sí), la untrafeminista Wendy Briceño se deshizo de una mujer para entregar el espacio a un hombre con señalamientos de violencia.

    Gracias y hasta la próxima con el favor de Dios.

  • EL ZANCUDO | VAN CONTRA EL ACOSO SEXUAL EN LAS UNIVERSIDADES

    EL ZANCUDO | VAN CONTRA EL ACOSO SEXUAL EN LAS UNIVERSIDADES

    Por: Arturo Soto Munguía

    Como le adelantamos oportunamente, ayer se discutió en las comisiones de Educación y Derechos Humanos una iniciativa de ley que busca prevenir, atender y erradicar el acoso y el hostigamiento sexual en las universidades de Sonora.

    El tema no es menor. Las instituciones de educación superior son un espacio que de un tiempo a la fecha ha sido tomado por las estudiantes para denunciar múltiples casos de estos delitos, pero la mayor parte de ellos no llegan a las instancias donde se puedan resolver y sancionar.

    Se ha llegado al extremo de apelar a la autonomía universitaria o a la protección sindical para evadir la acción de la justicia.

    La iniciativa en mención es autoría de la diputada María Alicia Gaytán, de Morena, que en la legislatura pasada presidió la Comisión de Igualdad y Género desde la cual dio una férrea batalla por la protección de los derechos de las mujeres y hoy retoma el tema con una propuesta que desde ya está sacando chispas, sobre todo por las obligaciones que plantea a las autoridades universitarias para denunciar ante el ministerio público y proceder para que exista una consecuencia laboral si el victimario es un trabajador de la institución.

    Cito el artículo 11 de esta iniciativa porque creo que es el que mayor polémica generará.

    “Al interior de la institución educativa el nivel de gravedad de los actos de acoso sexual se determinará de conformidad con la normatividad interna, pero el responsable de sustanciar el procedimiento que nazca de la denuncia deberá hacer del conocimiento inmediato de estos hechos al agente del ministerio público en los términos y de conformidad con lo dispuesto por el artículo 222 del Código Nacional de Procedimientos Penales y de la dirección de Recursos Humanos de la respectiva institución para el inicio del procedimiento rescisorio si así resulta procedente de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo, contratos colectivos o reglamentos que los rija”.

    “Desde la perspectiva de las estudiantes resulta complejo enfrentarse y defenderse de situaciones de acoso sexual porque además del caso personal, se enfrenta al condicionamiento que la propia estructura educativa, jerárquica y masculinizada aporta al silenciamiento del problema por parte de las víctimas que no disponen de herramientas necesarias para enfrentarse mediante la denuncia a toda la estructura de poder”, expone la iniciativa, que también apunta la ausencia de protocolos para atender este tema en la mayoría de las universidades.

    Frente a esto, surge la necesidad institucional de prevenir, atender y sancionar este ejercicio de poder materializado en una relación de subordinación real de la víctima en los ámbitos escolares (…) que se expresa en conductas verbales, físicas o ambas, relacionadas con la sexualidad, de connotación lasciva y que va dirigida a exigir, manipular, coaccionar o chantajear sexualmente a personas del sexo opuesto o del mismo sexo, lo cual trae efectos perjudiciales en el ambiente académico y personal de la víctima, agrega.

    Aunque también reconoce los esfuerzos de autoridades universitarias para combatir este problema, sostiene que hay un vacío en el marco normativo que actualmente se limita a resoluciones no vinculativas y recomendaciones ambiguas, “pero de lo que se trata es de establecer sanciones proporcionales a los actos cometidos, a que se delibere sobre posibles responsabilidades penales y laborales de sujeto activo de estas conductas tanto por la autoridad civil como por la universitaria”.

    En resumen, el objetivo es prevenir los actos de acoso y hostigamiento sexual, pero también crear los mecanismos, protocolos, programas y demás para atenderlos y sancionarlos, garantizando un ejercicio pleno de los derechos de las y los estudiantes universitarios en un ambiente de paz, concordia y ausente de violencia.

    En este objetivo se incluye la corresponsabilidad de la comunidad universitaria, así como la capacitación al personal docente y administrativo para que promuevan la prevención y en su caso la intervención correspondiente.

    Un punto muy interesante es la prohibición de prácticas de conciliación y mediación para casos de acoso y hostigamiento sexual, pues se sabe que éstas promueven la revictimización y culpabilización de la víctima.

    Y otro no menos importante es la consideración como omisiones de la autoridad universitaria, de aquellos casos en que se nieguen a atenderlos o canalizarlos; evitar el acceso a la justicia o impedir a la víctima el acceso a información, material probatorio y evidencias necesarias para la integración del expediente.

    La iniciativa generó consensos en las comisiones y pronto será llevada al pleno, donde la discusión para su eventual aprobación promete ponerse intensa.

    II

    Hermosillo se convirtió ayer en la primera ciudad del país en contar con una flotilla de patrullas eléctricas. El alcalde Antonio Astiazarán entregó las primeras seis unidades de este tipo, en un ambicioso plan que proyecta completar un parque vehicular de 300.

    Actualmente la capital cuenta con 70 patrullas de propulsión mecánica, lo que no solamente resulta insuficiente para las labores policiacas en una ciudad de casi un millón de habitantes, sino que su gasto en combustible y costo de mantenimiento constituyen una grave sangría al presupuesto municipal.

    Comparadas con estos vehículos, las nuevas patrullas eléctricas generarán un ahorro de hasta 54 mil pesos mensuales, ya que funcionan con electricidad y se cargan con energía solar. Una carga les permite recorrer hasta 394 kilómetros en la zona urbana.

    El alcalde anunció que tiene programadas otras dos entregas para el 31 de mayo, cuando se sumarán 220 unidades eléctricas nuevas. Con esto, el tiempo de respuesta se reducirá de 30 a cinco minutos, explicó.

    Al igual que las motocicletas eléctricas que recientemente entregó, las patrullas serán asignadas a un solo elemento de la Policía Municipal para incentivar su cuidado, toda vez que en un plazo determinado, el agente podrá adquirirla para su uso particular.

    Actualmente, cada patrulla es utilizada por tres elementos, y si tienen ‘la patita pesada’, se la acaban en dos o tres años.

  • EL ZANCUDO | P. D.- VIVA LA VIDA

    EL ZANCUDO | P. D.- VIVA LA VIDA

    Por: Arturo Soto Munguía
    Se tomaron muy en serio las y los diputados el tema de la legislación con perspectiva de género y ayer dictaminaron sendas reformas que vendrán a resolver asuntos que realmente tocan y lastiman la vida cotidiana sobre todo de las mujeres.

    De entrada se aprobó reformar el artículo 24 del Código de familia, que parece haber sido redactado en el medioevo, ya que impedía a las mujeres divorciadas volver a casarse en un plazo no menor de 300 días, o someterse a una prueba de embarazo, esto último con la finalidad de saber con certeza la paternidad del bebé en gestación, en caso de que el resultado fuera positivo.

    Esta fue una propuesta de la diputada Elly Sallard, del PRI, quien calificó la legislación derogada como una norma totalmente discriminatoria para las mujeres (los hombres pueden casarse cinco minutos después de haber firmado el divorcio), vulnera los derechos de igualdad de las mujeres, su dignidad y el libre desarrollo de la personalidad, pero además es violatoria de tratados internacionales en la materia.

    La iniciativa, expuso, surgió de sus recorridos en campaña durante el proceso electoral del año pasado, cuando varias mujeres le plantearon el drama que representa un divorcio cuando la pareja es uno de los típicos machos que todavía actúan bajo la premisa de que ‘si no eres mía no eres de nadie’; que albergan dudas sobre la paternidad de algún hijo y que hasta llegan al hostigamiento y la violencia.

    En ese mismo tenor, la diputada Alejandra López Noriega, del PAN, presentó una iniciativa de ley que busca proteger al cónyuge que, habiéndose dedicado a las tareas del hogar y encontrándose en situación de desigualdad, usualmente queda en el desamparo en caso de divorcio.

    También se trata de una reforma al Código de familia para proteger al cónyuge (generalmente la cónyuge) que realiza tareas no remuneradas y a quienes la legislación actual deja en el desamparo en caso de divorcio, si no adquirió bienes o no desarrolló una carrera profesional por dedicarse al hogar.

    Por último, el diputado Jacobo Mendoza, de Morena, presentó una iniciativa a favor de la adopción post-mortem, esto es, un mecanismo que garantiza el derecho de adopción aun cuando los padres adoptivos hayan fallecido en el proceso.

    La propuesta va en el sentido de que si en el proceso de adopción fallece uno de los cónyuges adoptivos, el otro puede continuar el proceso; o si fallecen ambos, los abuelos pueden seguir el procedimiento siempre y cuando así sea su voluntad y se hayan creado entre ellos lazos afectivos de carácter filial.

    La iniciativa también protege a todos aquellos menores que se encuentren sujetos a un juicio de adopción y cumplan la mayoría de edad durante el proceso. En esos casos el juicio debe continuar y la sentencia surtir efecto como si se tratara de un menor de edad.

    Son iniciativas que sin duda van orientadas a proteger a las personas más vulnerables, especialmente las mujeres, por lo que probablemente también causen escozor entre la población masculina, señaladamente en aquellos que siguen viviendo en el México decimonónico y creen que aún está vigente el derecho de pernada y otras prácticas históricas de abuso y servidumbre sexual y económica.

    Pero si creen que esto para aquí, permítanme decirles que no. Muy pronto habrá de presentarse una iniciativa que sacará aún más chispas entre el machirulismo rapaz, solo que no estoy en condiciones de darles más detalles. Pero aquí se van a enterar en los próximos días sobre este tema.

    Y ya que andamos por rumbos del Congreso del Estado, los y las legisladoras enviaron un exhorto al gobernador del estado para que se ponga las pilas en la resolución del conflicto con los concesionarios a quienes se les requisaron los títulos y que desde hace varias semanas mantienen un ruidoso plantón exigiendo se les indemnice conforme a lo que ellos consideran justo (un millón y medio de pesos), aunque el gobierno ya abrió una ventanilla para pagar a razón de medio millón de pesos por concesión requisada.

    La bronca, obviamente le va a caer al gobernador Alfonso Durazo (por si le faltara alguna) y en muy buena medida eso deriva del deficiente trabajo que ha realizado en la Dirección del Transporte su titular Lirio del Castillo, que nomás no encuentra la punta de la hebra a la enredada madeja de este conflicto.

    Lirio del Castillo, quien solicitó licencia para separarse de su cargo como diputada local (llegó como plurinominal del Partido Verde) y prefirió asumir las riendas de aquella dependencia estatal, ahorita debe estar dándose de topes contra las paredes, porque eso de echarle problemas encima al gobernador en lugar de quitárselos no suele ser lo más recomendable.

    Lo paradójico del caso es que fue Claudia Zulema Bours, su ex compañera de bancada verde (aunque ésta sí electa por el voto popular) quien presentó el exhorto de marras, en el que se admite estar al tanto de las negociaciones entre las partes en conflicto, sin embargo no se ha logrado resolver.

    Esto debería servir para que la señora Del Castillo pusiera más de su parte para destrabar el conflicto, pero me dicen que no suda ni se acongoja mucho y ahorita anda más ocupada en una consulta popular para modificar rutas del transporte en Hermosillo. Su despreocupación, me dicen, obedece a que se siente muy respaldada por un padrino cuya identidad no me quisieron revelar, pero está fuera de la esfera gubernamental. Eso dicen.

  • EL ZANCUDO | LILLY TÉLLEZ, LA CANDIDATA IDEAL. PARA AMLO

    EL ZANCUDO | LILLY TÉLLEZ, LA CANDIDATA IDEAL. PARA AMLO

    Por: Arturo Soto Munguía
    La afiliación de Lilly Téllez al PAN y su intención manifiesta de abanderar a la oposición como su candidata a la presidencia de la República ha hecho reverdecer esperanzas en esa oposición tan huérfana de liderazgos.

    Creo, desde esta humilde tribuna, que representa todo lo contrario a esas expectativas. La ex conductora de televisión encarna precisamente todo aquello que alimenta y refuerza la narrativa que mejor le ha funcionado al presidente y al aparato de Estado para ganar la agenda, conquistar audiencias, acendrar la polarización en la que AMLO se mueve como pez en el agua.

    Lilly Téllez representa la traición, la incongruencia, el oportunismo, el berrinche y la ausencia de propuestas (¿conocen alguna iniciativa que haya presentado como senadora?).

    Sin duda su discurso está plagado de los clichés y lugares comunes que suelen contraponer a los clichés y los lugares comunes oficiales, pero eso no lleva a ningún lado.

    Habla y dice lo que quiere oír el sector que odia al presidente, endulzando sus oídos, pero al mismo tiempo se coloca en el pecho una diana donde caben todas las flechas de los tiradores oficiales: fifí, neoliberal, ultraderechista, conservadora, machuchona…

    Sería, creo, la candidata ideal. Para López Obrador.

    II

    Son varias cosas, además de la insuficiencia presupuestal, las que mantienen trabadas las negociaciones entre jubilados y pensionados del ayuntamiento de Hermosillo y la parte patronal que en este caso es el propio Ayuntamiento.

    Una de ellas es un convenio firmado entre el sindicato y la contraloría municipal donde se establece que las prerrogativas reclamadas por los inconformes (vales de despensa, apoyos funerarios, de salud y para el pago de luz eléctrica, básicamente) “únicamente podrán ser aplicadas en beneficio de los trabajadores que durante la vigencia del mismo se encuentren prestando sus servicios al referido ayuntamiento, mas no en favor de aquellos que han tenido un cambio de situación jurídica, entendiéndose por tales a aquellas personas que han pasado de ser trabajadores en activo (relación laboral) a formar parte de la lista de jubilados o pensionados de la institución de seguridad social que corresponde (relación administrativa.)”.

    Esta cláusula es de alguna manera el origen del conflicto y aunque se han trabajado algunas alternativas para apoyar a jubilados y pensionados con menores ingresos, el asunto se ha complicado porque en el grupo de inconformes hay personas que ganan hasta 182 mil pesos y que bien podrían prescindir de otros apoyos.

    Si bien son los menos (20), hay otro grupo que gana 50 mil pesos (28); uno más amplio que gana 35 mil pesos (111) y otro más formado por 298 personas con ingresos de 25 mil pesos.

    El grupo más amplio es el que percibe ingresos por 15 mil pesos, integrado por 399 jubilados y pensionados, mientras que aquellos que ganan 7 mil pesos suman 227 y los que ganan 3 mil pesos son solo 40.

    En las negociaciones de este conflicto ya hay avances para regresar algunos apoyos -independientemente del convenio que los excluye-, a las personas de menores ingresos (rango entre los 3 mil y 7 mil pesos) y se valora la posibilidad de ampliarlo a quienes obtienen 15 mil pesos, pero el tema ya derivó por el camino de la política partidista y eso entorpece las negociaciones.

    Ayer en la manifestación que realizaron en palacio municipal se hicieron presentes el diputado del PT, Sebastián Orduño y el dirigente estatal de ese partido, Ramón Flores para apoyar a los integrantes del Movimiento 30 de julio, como se conoce a la agrupación de jubilados y pensionados.

    Una agrupación que ya buscó la intervención del gobernador del estado, Alfonso Durazo, que por cierto se ha mantenido al margen; consiguió una recomendación de la CEDH y ahora llevó el tema al Congreso del Estado, donde estos temas suelen convertirse en moneda de cambio o instrumentos de presión política entre los partidos allí representados.

    La capital del estado, como se sabe concentra casi un tercio de la población del estado (y por consiguiente de la lista nominal electoral); constituyó para Morena y sus aliados la derrota más dolorosa en el proceso de 2021 y obviamente su proyección es conquistar esta plaza por primera vez en 2024.

    Es desde luego, una lucha legítima considerando que los partidos políticos tienen como divisa principal la conquista del gobierno, pero si en ese lance aprovechan un movimiento que surgió con demandas muy específicas, cabe la posibilidad de que esas demandas se inscriban en una plataforma partidista a la que eventualmente sean ajenos y en determinado momento sean utilizados solo como instrumento de golpeteo político, restándole legitimidad al movimiento.

    Se entiende que en su afán por conseguir sus demandas, jubilados y pensionados abran la puerta a la partidización del conflicto, pero también es previsible que eso entorpezca aún más las negociaciones, como ha ocurrido en otros casos. Veremos qué pasa.

    III

    Ayer hubo elecciones extraordinarias en siete municipios de Oaxaca y cuatro de Veracruz. A Morena le fue muy mal en ambos casos.

    No es una muestra representativa o que marque tendencias rumbo a las elecciones estatales del próximo 5 de junio en seis entidades, pero los resultados debieron prender alguna luz de alerta en el partido oficial que, pese a los saldos no del todo favorables obtenidos en 2021 cuando perdieron la mitad de la ciudad de México, han venido construyendo una narrativa de invencibilidad, que al menos ayer rodó por el suelo desde lo local.

    En Oaxaca, donde habrá elecciones de gobernador en junio, perdieron seis de las siete alcaldías en disputa. El PVEM, que fue solo, ganó en cuatro; la alianza PRI-PAN-PRD-PANAL ganó una y la alianza PAN-PANAL ganó la otra.

    En Veracruz mientras tanto, de las cuatro presidencias municipales que estaban en juego, Morena en alianza con el PT ganó solo una; el PT ganó una, el PRD otra y el partido de nueva creación ‘Podemos’ ganó la cuarta.

    Se trata de municipios pequeños, ciertamente, pero a Morena le habría servido mucho ganarlas para reforzar su narrativa triunfalista, sobre todo en vísperas de la revocación de mandato. Porque independientemente de la dimensión de estos triunfos de la oposición, el mensaje que se manda es que la gente desdeñó las opciones de Morena.

    En el plano nacional, esos pequeños municipios son una insignificancia en términos de votos. Pero la sumatoria de muchos acontecimientos que se han dado desde la elección de 2021 puede ser que no sea tan irrelevante.

    Vienen eventos interesantes como la revocación de mandato, la discusión y aprobación o rechazo de la reforma eléctrica (un tema para nada menor) y las elecciones estatales del 5 de junio, que servirán para dejar atrás el terreno de las especulaciones y arrojarán elementos más objetivos para un análisis de lo que podría ocurrir en 2024.

  • EL ZANCUDO | LOS RELÁMPAGOS DE MARZO

    EL ZANCUDO | LOS RELÁMPAGOS DE MARZO

    Por: Arturo Soto Munguía
    Cuenta el General Guadalupe Arroyo que cuando tomó la capital del estado de Apapátaro, las finanzas de su movimiento revolucionario eran más bien magras, de manera que al día siguiente metieron a la cárcel a cincuenta ricos, incluyendo al señor gobernador, al presidente municipal y a dos diputados locales.

    “Mucho se me criticó después porque no puse en libertad a estos prisioneros cuando se me entregó el rescate que pedí por ellos, pero quiero aclarar que ese rescate lo pedí no para soltarlos, sino para no fusilarlos”, cuenta el General al que da vida, en primera persona, el inigualable Jorge Ibargüengoitia en “Los relámpagos de agosto”.

    Pues acá en Sonora estamos a nada de que se escriba un pasaje parecido al de la novela citada, teniendo como protagonistas no a un pintoresco grupo de militares en una tragicomedia de disputa por el poder, sino a los hermanos yaquis que, a como pintan las cosas, no nos van a cobrar por dejarnos pasar sobre la carretera federal 15, sino por no pegarnos un balazo.

    Ayer se vivió un episodio en el que sacaron a relucir sus armas y dispararon contra el chofer de un camión de mudanzas que ya les había pagado la cuota en el retén de Loma de Guamúchil, pero según su testimonio, se bajó a tomarse una selfie en el danzante yaqui, una gigantesca escultura que se erigió en lo que fue proyectado como un parador turístico pero que nunca fue habilitado como tal.

    (En realidad se trató de otro atraco de Guillermo Padrés para pergueñar poco más de cien millones de pesos que costó la obra, pero esa es otra historia).

    El punto es que los yaquis siguen instalados sobre la carretera federal cobrando una cuota por el llamado ‘paso de servidumbre’ (lo cual tiene su razón de ser), pero no es la primera vez que entran en conflicto con usuarios de la carretera, generalmente porque se niegan a pagar la cuota (que en sentido estricto no les corresponde pagar a ellos, sino al gobierno que hizo la carretera y al que los usuarios le pagamos de todos modos en las casetas que administra Capufe).

    El gobierno, tanto estatal como federal han entablado negociaciones con autoridades tradicionales de la etnia para levantar esas ‘piolas de cuota’, pero los hermanos yaquis nomás no quieren.

    En su más reciente visita a Sonora, el presidente Andrés Manuel López Obrador esbozó la propuesta de entregarles el monto de lo que recaudan en sus retenes, por la vía de un programa federal, pero ni eso ni anteriores propuestas incluidas en el Plan de Justicia para la etnia los ha convencido.

    El asunto se torna más complejo porque no son pocas las evidencias -reconocidas incluso por la Fiscalía General de Justicia del Estado-, de que en esta acción de los yaquis que, insisto, tiene un argumento de legitimidad, participan también otros personajes con intereses ajenos a la etnia y más bien ligados con actividades propias del crimen organizado.

    Al chofer del episodio de ayer lo agredieron físicamente, logró subir a su camión y emprender la huida, pero lo siguieron hasta entrar a Ciudad Obregón y le tiraron de balazos.

    Cualquiera que se asome a las redes sociales percibirá con preocupación la manera en que comienza a escalar seriamente la aversión y hasta el rencor hacia la tribu entre los usuarios de la carretera, no solo los sonorenses sino cualquiera que transite por ese tramo, y solicitan la intervención de las autoridades civiles y militares para que dejen libre la carretera.

    Con todos estos elementos, se está formando un coctel explosivo que cualquier rato puede estallar y salpicar de tragedia el sur del estado.

    Los hechos se dan apenas unos días después de que los yaquis habían anunciado una tregua por Semana Santa y de hecho, ayer mismo levantaron el retén, pero no se sabe si fue por esa tregua o porque ‘se calentó el terreno’ con la agresión al camionero.

    II

    Algo de pimienta le pusieron en días pasados al hasta entonces más bien desangelado proceso para renovar la dirigencia estatal del PRI.

    Me dicen que no fue casual el beligerante mensaje del orador oficial en la conmemoración luctuosa del 28 aniversario del asesinato de Luis Donaldo Colosio, David Palafox Celaya.

    Fuentes asentadas en la ciudad de México aseguran que han detectado la intención del dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, mejor conocido como ‘Alito’ (aunque algunos le digan Amlito, vaya usted a saber por qué), de elaborar una convocatoria diseñada como traje a la medida para uno de los aspirantes, lo que ha alborotado el avispero.

    Por eso, dicen, Palafox Celaya que por cierto está en la lista de aspirantes a suceder a ‘El Pato’ de Lucas en la dirigencia del expartidazo se lanzó duro con un discurso en el que llamó a los priistas a ser más revolucionarios y menos institucionales, a no permitir que los manipulen “con las conveniencias muy particulares de nadie” y, esperando que la convocatoria sea lanzada pronto soltó de su para nada ronco pecho un “no a las imposiciones, no a los dedazos, no a utilizar perversamente las dirigencias como plataformas políticas y sí y mil veces sí a la democracia”.

    No mencionó a nadie por su nombre, pero tiró el escopetazo “para que nos escuchen quienes tengan que escucharnos”.

    Pero, se preguntará la revolucionaria lectora, el institucional lector, ¿para quién estaría diseñada esa convocatoria con presunta dedicatoria?

    Pues nadie sabe, pero dicen entre veras y bromas que entre los requisitos para registrarse se encuentran los de haber sido diputado local y federal; senador, presidente estatal del PRI, cónsul general, asesor de funcionarios federales, presidente de la Fundación Colosio y que sus iniciales sean BAPM.

    Aunque el presunto perfil coincide, me rehúso a pensar que se trate de Bulmaro Andrés Pacheco Moreno, que jamás se prestaría a una machincuepa de esta naturaleza. La versión me llegó ya muy entrada la noche, de manera que no hubo chance de cotejarla con el buen Bulmaro, pero sin duda hoy conoceremos su sentir y su pensar respecto a lo que se dice en este tema.

    Lo cierto es que el proceso se encuentra ‘pasmado’ por alguna razón, y la convocatoria que debió salir en el mes de octubre no aparece; ya se fueron las nieves de enero y ya vienen las flores de mayo y a la dirigencia nacional nomás no se le ven ganas de lanzarla, mientras en Sonora a los interesados ya se les queman las habas.

    Y no son pocos: además de Bulmaro y David, han levantado la mano Pascual Soto, Zaira Fernández, Humberto Robles Pompa y se menciona hasta a Rogelio Díaz Brown entre ellos.

    Veremos y diremos.

  • COLOSIO, 1994, Y LOS USOS DE LA DEMOCRACIA

    COLOSIO, 1994, Y LOS USOS DE LA DEMOCRACIA

    Bulmaro Pacheco

    Con el advenimiento de la democracia en las naciones, muchos creyeron que se resolverían en automático los viejos y nuevos problemas. También pensaron que sería el instrumento ideal para atender cuestiones ancestrales como la pobreza, la distribución del ingreso, la justicia y la igualdad de oportunidades, entre otros.

    Ese debate se intensificó después de la caída del Muro de Berlín, a finales del siglo XX, y cuando las naciones rehenes de la cortina de hierro comenzaron a liberarse de sus líderes, ya eternizados en el poder obtenido tras el reparto del mundo después de la Segunda Guerra Mundial, que por cierto había marcado enormes diferencias entre la Europa del Este y el resto de las naciones desarrolladas.

    Las dictaduras interrumpieron el progreso de algunas naciones que gozaban de altos niveles de vida y bienestar, y sus habitantes no tardaron en entrar a los tiempos de escasez con largas colas para abastecerse de lo elemental. Esto engendró un malestar contra los gobernantes y estallaría como castillo de naipes a partir de la caída del muro. Igual sucedió en América Latina donde naciones desarrolladas como Chile y Uruguay y otras 15 más, experimentaron las dictaduras militares y tardaron años, en ver la transición a la democracia.

    Los nuevos dirigentes se plantearon el dilema: ¿Era la democracia el instrumento ideal para alcanzar el progreso o para resolver los urgentes problemas de cada país?

    No tardaron en darse cuenta que la historia es y ha sido siempre una caja de sorpresas. La democracia solo era un instrumento de libertad para ejercer derechos y para participar en la discusión libre de problemas y propuestas, no para lograr la felicidad de los pueblos o resolver los problemas en automático. -El problema era de los gobiernos-, Pero sí servía la democracia para sumar ideas y enfoques diferentes para abordar los problemas. Así surgieron todo tipo de propuestas, desde las del estado de bienestar hasta las del estado mínimo, por ejemplo.

    México se encaminaba a la modernidad al finalizar 1993. Finalmente se había aprobado el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos y Canadá y ya había tres candidatos presidenciales seleccionados por sus partidos: Diego Fernández de Cevallos (PAN), Cuauhtémoc Cárdenas, por segunda ocasión y ahora por el PRD, y Luis Donaldo Colosio (PRI).

    En ese entonces el PRI gobernaba en 29 entidades: Solo Baja California (1989), Guanajuato (1991) y Chihuahua (1992) se habían perdido.

    El 1 de enero de 1994 México inicia el año con el estallido de la rebelión campesina de Chiapas, encabezada por el EZLN, y con un problema de conciliación política al interior del aparato de gobierno: Manuel Camacho, el otro competidor por el PRI a la candidatura presidencial, no reconoce a Colosio como el candidato favorecido con la decisión presidencial (un método aplicado por los presidentes mexicanos desde 1924: dejar sucesor; que, por cierto ya había hecho crisis desde 1988).

    Colosio aventajaba en las encuestas, pero el asunto chiapaneco se metió en la agenda diaria desplazando a las campañas políticas. Colosio fue asesinado en Tijuana el 23 de marzo de 1994, y a partir de entonces se aceleraron los cambios en México.

    Ernesto Zedillo, excoordinador de campaña de Colosio, fue postulado como candidato, y en agosto de ese año ganó la elección con el 48.6% de la votación. En 1994 se logró la participación electoral más alta de los tiempos modernos con un 77.16%.

    En 1988 la participación fue del 52.01%; en el 2000, de 63.97%; en el 2006, de 58.55%; en el 2012, de 63.10%; y en el 2018, de 63.42%.

    La historia registra ese final de 1994 como el del inicio de las diferencias marcadas y públicas entre un presidente entrante y el expresidente saliente, que se ahondarían con el llamado “error de diciembre” y la aprehensión de Raúl Salinas de Gortari.

    México inicia 1995 con pésimos augurios por el “error de diciembre”, Chiapas y los asesinatos políticos. Ese año el PRI pierde Jalisco, Baja California (segunda vez) y Guanajuato (segunda vez). También se presenta la reforma más avanzada de la Suprema Corte de Justicia.

    En 1996 se da la reforma política más importante al crearse el TEPJF y al lograrse la plena ciudadanización del IFE (ya no más el Gobierno en el manejo de las elecciones). Se legisla para que la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México se logre por elección directa al siguiente año.

    En 1997 el PRI pierde la Ciudad de México y la mayoría en la Cámara de Diputados. Pierde también Nuevo León y Querétaro.

    En 1998 el PRI pierde Zacatecas y Aguascalientes. En 1999 pierde Nayarit, Baja California Sur y Tlaxcala.

    En el 2000 el PRI pierde la Presidencia de la República con el PAN. Fox gana con el 42.52% de la votación. Ese mismo año pierde también los estados de Morelos y Chiapas, y por segunda vez la Ciudad de México, y Guanajuato por tercera ocasión.

    En la mayoría de los estados el PRI logró recuperarse, a excepción de Baja California donde el PAN gobernó 30 años y Guanajuato, donde va por 31 años el próximo julio.

    En el 2001 el PRI pierde Yucatán y Michoacán, y gradualmente fue perdiendo distritos locales (del 97.8 al 49.6) y 583 de los 2400 municipios. De las entidades donde nunca se había dado la alternancia, en 2021 el PRI perdió Colima y Campeche, y solo quedan sin alternancias, Coahuila, el Estado de México e Hidalgo.

    Una enseñanza fundamental de los cambios políticos ha sido que la democracia garantizó las alternancias en los gobiernos, pero no la calidad de los mismos. La libertad de elegir en muchas ocasiones no coincidió con la eficacia de los electos. La política derivó en mercadotecnia y así emergieron aventureros políticos que “subieron en elevador” y “bajaron en elevador”. Con el tiempo desaparecían del mapa sin mayor pudor ni trascendencia. Eran los tiempos en que ingenuamente se creyó que los privados podrían sustituir fácilmente a los políticos de carrera.

    Fox empezó bien y generó expectativas, pero al rato, con un gobierno gris, dominó el desencanto entre la gente y el PAN casi pierde la presidencia en el 2006. Felipe Calderón batalló para legitimarse ante la escasa ventaja que tuvo en la elección sobre el segundo lugar (0.56%) y quiso colonizar el gobierno con pura militancia panista. Al final no pudo imponer sucesor y provocó que regresara el PRI al poder.

    Enrique Peña Nieto ganó bien y empezó por unificar a todas las fuerzas políticas de México para lograr reformas importantes en el “Pacto por México”, pero su inexperiencia, frivolidad y provincialismo lo hicieron desbarrancar a la mitad de su sexenio y encaminó al PRI a su tercera derrota en una elección presidencial (2018).

    Andrés Manuel López Obrador prometió una gran transformación que hasta ahora ha sido más palabras y promesas que realidades, y el desencanto popular ya le pasó una primera factura en la elección del 2021 al perder la mayoría en la Cámara de Diputados.

    También trata de imponer sucesor -a costa de la división en su partido- y muchos de los problemas que prometió resolver persisten o se han agravado, lo que será un obstáculo para que Morena pudiera volver a ganar en 2024 como lo afirman sus seguidores.

    A 45 años de las primeras reformas políticas y a 28 del sacrificio de Colosio, surgen las interrogantes: ¿Le ha servido la democracia a México para resolver sus principales problemas? ¿ha sido la democracia la panacea para atender sus crisis? ¿Qué le falta a la democracia mexicana para cumplir con las expectativas ciudadanas?

  • EL ZANCUDO | ALGO ESTÁ PASANDO EN HERMOSILLO

    EL ZANCUDO | ALGO ESTÁ PASANDO EN HERMOSILLO

    Por: Arturo Soto Munguía
    Sería quizás en la década de los 90 o en la siguiente cuando en Hermosillo se comenzó a hablar de la necesidad de una planeación de la ciudad a largo plazo.

    Varios grupos empresariales, en diferentes momentos y en coordinación con autoridades municipales presentaron planes que en aquel entonces hablaban del año 2020 con un aire de futurismo, pensando en una capital de crecimiento ordenado, con servicios públicos eficientes y desde una perspectiva sustentable.

    El planteamiento central solía estar relacionado con los virajes en programas y acciones de gobierno que cambiaban o se eliminaban y nacían otros cada trienio, a contentillo de quien encabezara cada administración, aun tratándose de personajes emanados de un mismo partido político.

    El futuro ya nos alcanzó y los resultados de una planeación reinventada cada tres años no han sido los mejores.

    Por razones que tienen que ver más con el interés pecuniario de gobernantes y empresarios -sobre todo de la construcción y los bienes raíces-, que con las necesidades de una ciudad en la que vive (y convive) una sociedad diversa, plural, heterogénea en sus características socioeconómicas y culturales, el desarrollo de Hermosillo ha sido más bien desordenado, por decirlo de un modo amable.

    Hoy el tema se ha vuelto a poner sobre la mesa, pero ya no como una proyección sobre las buenas intenciones, o en el peor de los casos, sobre las expectativas particulares de grupos político-empresariales que, para decirlo sin rebuscamientos, se han forrado de lana a lo largo de los años en aras del inmediatismo, las ocurrencias y la rápida multiplicación de las ganancias y el ‘bisnes’.

    Por primera vez se elaboró una agenda de largo plazo para garantizar el desarrollo económico y social del municipio para los próximos 12 años. La agenda 2022-2033 fue aprobada ayer por unanimidad en el cabildo hermosillense y es producto del trabajo de un subcomité técnico especializado del Comité de Planeación Municipal en el que participan expert@s en temas sociales, medio ambiente, financieros, económicos y de gobernanza.

    Como dato, Hermosillo es la primera ciudad en el país que cuenta con un proyecto de esta índole, con indicadores y metas específicas relacionadas con las prioridades de esta capital: el desarrollo económico y social, continuo y sistemático del municipio, así como el bienestar de sus habitantes, en forma sostenida y sustentable, de acuerdo con el documento al que tuvo acceso esta columna y que en breve abordaremos con más detalle.

    Otro dato muy poco conocido es que la Ley de Planeación del Estado de Sonora establece la obligación a los ayuntamientos, de definir una agenda de largo plazo que contenga esos temas, pero hasta donde se sabe no hay otro cabildo que la haya aprobado. Vaya, ni siquiera se conocen trabajos en ese sentido en otros municipios.

    Hay, en el subcomité técnico citado, especialistas en administración pública como María de Lourdes Ramos Loyo; dirigentes de organizaciones civiles como ‘Hermosillo cómo vamos’, representada por Ernesto Urbina Miranda. También académicos de reconocido prestigio como Jorge Inés León Balderrama, investigador del CIAD y Karla Mercedes López Montes, académica de la Unison, entre otros.

    Esto es resultado de una de las primeras acciones del alcalde Antonio Astiazarán Gutiérrez, que en noviembre del año pasado, apenas dos meses después de rendir protesta instaló el Coplam bajo la premisa de construir alianzas con los gobiernos estatal y federal, lo mismo que con la sociedad civil organizada.

    Desde entonces presentó algunos ejes rectores del desarrollo, como reducir la discrecionalidad del gobierno, transparentar y digitalizar trámites, comprometerse con la mejora regulatoria, estableciendo prioridades en las inversiones para infraestructura, agua potable y seguridad.

    No sé si la escéptica lectora, el desconfiado lector coincidan, pero algo se está moviendo en Hermosillo. En un contexto nacional donde el flujo de recursos para equipamiento e infraestructura no es la principal característica, la capital ha sido la única ciudad en el estado donde se han entregado motopatrullas (eléctricas, por cierto) y hay planes para adquirir una flota de automóviles con esa misma tecnología para fortalecer la seguridad pública. En la ciudad comienza a notarse el bacheo y la limpieza de camellones y canales, que estaban abandonados.

    Ahora ya hay un plan de desarrollo con proyección hasta el año 2033. Si uno voltea hacia otros municipios, señaladamente los más poblados como Cajeme, Nogales, San Luis Río Colorado o Guaymas por citar algunos verá que nada de esto está sucediendo. Ahora hay que estar pendientes de las metas proyectadas y el seguimiento para alcanzarlas.

    II

    Y para cerrar la semana con ánimo positivo, no es menos importante el anuncio que hizo ayer el gobernador Alfonso Durazo al fijarse como meta para el final de su sexenio lograr la gratuidad de la educación superior en las escuelas públicas del estado.

    Por lo pronto se comprometió a aumentar en 25 por ciento el fondo de becas para el próximo año, pero ese sería solo el primer paso de un plan para que al finalizar su administración se alcance la gratuidad de los estudios en las universidades públicas: que no haya costos de inscripción, cuotas de permanencia, cuotas de laboratorio, entre otras cosas.

    El anuncio lo hizo en la Universidad Tecnológica de Hermosillo a donde acudió acompañado del secretario de Educación, Aarón Grajeda para entregar equipo para el procesamiento de minerales a los estudiantes de Minería.

    El gobernador ha sido reiterativo en su convicción de que la educación es el gran equilibrador de las condiciones sociales y en ese sentido fueron los anuncios hechos ayer

  • EL ZANCUDO | SI COLOSIO VIVIERA, CON LA 4T ESTUVIERA

    EL ZANCUDO | SI COLOSIO VIVIERA, CON LA 4T ESTUVIERA

    Por: Arturo Soto Munguía
    Al menos en un par de ocasiones el gobernador hubo de hacer una pausa en su discurso para aclarar su gargantea, para que la emoción no le destemplara el ánimo. Para evitar que la remembranza le desbordara el pecho.

    De pie en la tribuna del Congreso del Estado, Alfonso Durazo ve a los ojos a Marcela y Laura Elena Colosio Murrieta, hermanas del hombre que fue su amigo, jefe y guía e inevitablemente debió pasar por sus memorias la recapitulación de aquellas horas trágicas: las transmisiones especiales en la televisión, el pulso desbocado de un país estremecido; las imágenes que se suceden en un bucle demencial y repetitivo. La multitud en Lomas Taurinas, ‘La Culebra’ a todo volumen, la pistola en cámara lenta, el disparo, el hombre caído, el terror, el susto y los jaloneos; la confusión. La tragedia. El 23 de marzo de 1994.

    En su relato de los días previos, Durazo recuerda el momento en que conoció a Luis Donaldo Colosio; el primer encuentro, el primer consejo cuando asumió el cargo como su secretario particular en el PRI nacional, luego en Sedesol, sin imaginar siquiera remotamente lo que sobrevendría después: la candidatura, la campaña, lo que pudo ser y no fue.

    No es solo el recuerdo del amigo vilmente asesinado lo que matiza la voz del gobernador en el evento protocolario para develar las letras doradas con su nombre en el salón de plenos del recinto legislativo. Como hombre de Estado, el gobernador sabe que en Tijuana no solo cayó abatido un candidato; con él se desmadejaron también las esperanzas de construir un país distinto al que veía el malogrado político de Magdalena, con hambre y sed de justicia.

    Porque las escenas de aquel aciago día en Lomas Taurinas eran a su vez el capítulo más intenso de una saga que fue la síntesis y el reflejo de un país convulsionado, un sistema político en crisis y un partido en descomposición que ya no daba para más. Cuando las diferencias políticas se dirimen a balazos, el estruendo hace que la paz vuele lejos.

    II

    En el recinto legislativo, algunos colegas comentaban, no sin cierto dejo de sorna la ‘cabeza’ de mi anterior columna: “Si Colosio viviera… ¿con Morena estuviera?”.

    Los signos de interrogación encierran, desde luego, una pregunta que nadie puede responder porque Colosio es hoy la historia de lo que no fue.

    Pero en el discurso de su amigo Alfonso Durazo aparecen algunas referencias que lo ubican en el punto de inflexión de un movimiento plural y diverso que trascendió las fronteras de su propio partido y se coronara con el resultado de la elección presidencial 2018: “Su lugar en la historia fue ganado a pulso con su sacrificio para que México dejara de ser patrimonio de unos cuantos y se convirtiera en la esperanza compartida de todos, particularmente aquellos que más lo necesitan”, dijo.

    Y fue más alla: “Rendir homenaje a su memoria es recordar una etapa trunca de nuestra historia, un futuro que no fue. Pero también es reconocer que ahora, en la etapa de transformación que vivimos en el país y en el estado su continua presencia camina junto a la gran obra de renovación y lucha democrática que ha vivido México desde aquel infausto día”.

    Luis Donaldo, siguió, no pudo atestiguar en persona estos tiempos donde la patria se revitaliza día a día, pero su legado nos ha acompañado y lo seguirá haciendo desde este recinto cuya memoria honra hoy.

    “Buscó ser presidente a través de elecciones limpias en un país que se encontraba tan lejano a una democracia realmente participativa; un país donde mandara el pueblo por encima de todas las cosas, de cualquier interés personal o de grupo: hoy podemos decir que ese reclamo es el estandarte que guía a la generación de mujeres y hombres que estamos comprometidos con el avance democrático y podemos asegurar que su muerte no fue en vano, sino que a partir de ella se levantaron voces plurales para impulsar la verdadera transición a la democracia”, apuntó.

    Y para que no cupiera duda remató: “Su idea de un país de libertades y justicia, de un poder público cercano a la sociedad está presente entre nosotros y no pudo ser derrotado por su muerte trágica e injusta; por el contrario, formó parte de los acontecimientos que llevaron a nuestra patria a tocar sus notas democráticas más altas en el 2018”.

    Se puede decir más fuerte, pero no más claro. Ahora sí que se le pueden quitar los signos de interrogación al título de la columna y decir, a partir de lo expresado por el gobernador: si Colosio viviera, con la 4T estuviera.

    III

    En el salón de plenos, Fermín Trujillo, del PANAL se lleva su cachito de gloria. Él fue el autor de la iniciativa para la inscripción de las letras doradas en honor de Colosio, una propuesta aprobada por unanimidad y sin regateos, lo cual también fue agradecido por el gobernador.

    Pero la que se llevó las palmas fue la presidenta de la mesa directiva, Natalia Rivera Grijalva, una joven que en aquel 1994 contaba apenas veinte años de edad y nacía a la vida política en medio de las convulsiones de un país cruzado por la inestabilidad, la crisis, los asesinatos políticos, la guerrilla zapatista y la despiadada guerra interna por la sucesión presidencial en un PRI que procesaba esa disputa en medio de celos, envidias y rencores.

    Como priista, Natalia cita casi de memoria el ideario de Luis Donaldo Colosio. Lo considera un visionario cuyo legado hay que integrar a la conversación con las nuevas generaciones que no lo conocieron, “para encontrar las coincidencias que nos permitan avanzar”.

    De hecho tocó fibras sensibles al gobernador al recapitular sobre la historia y enviar los recuerdos al momento preciso en que segaron la vida “de un hombre que llevaba sobre sus hombros muchas esperanzas de cambio y transformación”.

    Es la hora, dijo, de una nueva reflexión sobre el pensamiento de Colosio, de cara a una nueva generación que está viviendo los devastadores efectos del cambio climático y el surgimiento de enfermedades altamente contagiosas y de rápida expansión, algo que el asesinado candidato preveía como consecuencia de un desarrollo fincado en el abuso de los recursos naturales.

    “Sin duda Colosio era un visionario, sostuvo, porque lo que en 1994 hacía sentido, hoy, después de una pandemia, de profundas crisis económicas, de cambios de régimen y de conflictos internacionales, hace más sentido aún”, dijo.

    En el Congreso es la hora de los abrazos, las palmadas, los reconocimientos. La unanimidad en torno a un hombre que ya no está, pero que concita consensos en estos tiempos de disensos, así sea por un momento. Ya mañana será otro día.

    Por cierto, el PRI también realizó su tradicional guardia de honor en el busto a Luis Donaldo ubicado en el bulevar que lleva su nombre. Allá también estuvieron las hermanas del magdalenense, el dirigente estatal de ese partido, y militantes que aún le recuerdan.

    Pero el evento grande esta vez fue en el Congreso.