Categoría: Editorial

  • TELEMAX: RUMBO A UNA TELEVISORA DE ESTADO. Y EL COVID PEGA CON TUBO

    TELEMAX: RUMBO A UNA TELEVISORA DE ESTADO. Y EL COVID PEGA CON TUBO

    Con 998 nuevos casos, ayer fue el día con más alto registro oficial de contagios Covid19 en lo que va del años y como comentábamos ayer, el panorama no es alentador.

    Pese a que la letalidad de la variante Ómicron cuya presencia en Sonora reconoció ayer el secretario de Salud, José Luis Alomía es menor que la Covid19, tiene una transmisibilidad más alta y eso ha provocado el disparo en los contagios.

    Por todos lados se están reportando casos con síntomas leves y no tanto, pero en el gremio periodístico el virus pegó con tubo en este inicio de año y ya nos mandó a la banca a más de una veintena de comunicadores y comunicadoras a quienes desde nuestra propia convalecencia enviamos deseos de pronta y total recuperación.

    Hasta ayer, la lista de colegas infectados iba así: Hilario Olea Ruiz, Juan Carlos Zúñiga, Gerardo Moreno, Germán Contreras, Guillermo González, Gil Reyes, Juana María Olguín, Karina Barraza, Lorena Martínez, Isela Hong, Rafael Rentería, Arturo Salcido, César Fraijo, Ángel Lozano, Gamaliel González, Leonor Hernández, Mónica Miranda, Polet Ruano y Martín Holguín.

    Por la naturaleza propia del trabajo y aunque ya se ha normalizado el ‘reporteo a distancia’, es altamente probable que el brote en el gremio se dispare en los próximos días.

    Por lo pronto ayer se cambió, acertadamente la comparecencia semanal del gobernador Alfonso Durazo ante los medios de comunicación, mudándola de la sala de prensa al patio central de Palacio de Gobierno, un espacio mucho más amplio, abierto y naturalmente ventilado. Y este día la secretaria de Seguridad y la fiscal estatal, María Dolores del Río y Claudia Indira Contreras ofrecerán una rueda de prensa, misma que será en modalidad virtual.

    Ahora sí que por el bien de todos, primero los protocolos.

    Fuera de eso, es predecible el desfile de cuentas alegres sobre órdenes de aprehensión ejecutadas, disminución de delitos, vinculaciones a proceso y un largo etcétera de ‘logros’ en materia de seguridad, pero siempre estará presente la sombra de los delitos de alto impacto que mantienen en la zozobra a los habitantes de varios municipios especialmente conflictivos en esa materia.

    Cajeme sigue siendo una brasa ardiendo y no hay día en que no se reporten asesinatos y/o hallazgos de cadáveres; Guaymas, Caborca y San Luis Río Colorado son también focos rojos en el tablero de la seguridad pública y no hay, hasta el momento una estrategia más o menos articulada para devolver la paz a esos municipios.

    Cajeme es la locura. El año pinta para romper todos los récords de ejecuciones. Nada más en los primeros días de este año la cifra ya llegó a 30 asesinatos con los tres que perpetraron anoche en la colonia Misión del Real, Más temprano habían asesinado a otro frente a las instalaciones del cuartel militar de Esperanza, donde no es el primer tiroteo que se registra.

    Si el mes pasado cerró con un promedio sostenido durante los últimos meses de 2021 de dos asesinatos diarios, enero 2022 ya promedia tres.

    Veremos si hoy aparece algún anuncio importante al respecto, lo que se antoja difícil considerando la complejidad multifactorial del fenómeno de la violencia criminal, que lamentablemente no cede.

    II

    Pero volviendo con la rueda de prensa del gobernador, en temas más amables anticipó ayer el rediseño de la programación de Telemax y si nos atenemos a la visión de Estado que Alfonso Durazo ha forjado a través de su larga carrera política en las más altas esferas del poder, seguramente vienen buenas noticias.

    Reconvertir un medio de gobierno -o peor aún, de partido- en uno de Estado es algo más que una redefinición teórica: atraviesa por dotar a la televisora de contenidos que recojan la pluralidad política y la diversidad social de los sonorenses, abandonando la tentación de instrumentalizarlo como un altar para el culto a la personalidad del gobernante, una herramienta para el ajuste de cuentas políticas y un ‘garrote de trapo’ para la descalificación y el denuesto de los adversarios, algo que fue moneda corriente en sexenios anteriores, señaladamente en el de Guillermo Padrés, y no se diga más atrás, en el de Manlio Fabio Beltrones.

    Durante la administración de Claudia Pavlovich se avanzó en ese camino, pero se quedaron lejos de la idea original con la que fue concebida la función de la televisora oficial en el sexenio de Samuel Ocaña, por cierto uno de los referentes del gobernador Durazo, que a su vez tiene en la dirección de Telemax a Paulina Ocaña, nieta del neumólogo de Arivechi.

    Ayer el gobernador fue claro al advertir que la televisora estará dedicada exclusivamente a difundir información, entretenimiento y programas que sirvan a la superación cultural y educativa de la gente de Sonora; que sirva al fortalecimiento de sus valores y no para destinarla al desprestigio de adversarios y a lastimar reputaciones de la gente. Lo dijo con todas sus letras.

    El próximo viernes será presentado el nuevo diseño programático de Telemax, que en esta administración ha sido concebida como parte integral de un sistema estatal de comunicación en el que se incluye a Radio Sonora llevando como cabeza de este a Edgar Hiram Sallard, que mucho ha tenido que ver en este relanzamiento cuyo diseño se viene trabajando desde hace tres meses.

    Por cierto, la televisora estatal ya no transmitirá dos programas de corte religioso, aunque conservará la misa dominical católica.

    Esperemos al viernes para ver de qué van los cambios en la televisora.

    III

    Ya para cerrar, agradecemos los mensajes y llamadas de colegas, amigos y familiares reportándose para saber cómo va la convalecencia en esta su humilde casa donde permanecemos aislados y en espera de ahuyentar el maldito bicho, que ciertamente ya va de salida.

    No enumero a todos y todas por cuestiones de espacio, pero reconozco el detalle de la ex gobernadora Claudia Pavlovich que se dio un tiempo para saludar y quedarse un ratito platicando de varias cosas relacionadas desde luego con su quehacer político, mismas que no estoy en condiciones de contarle porque estuvieron ‘fuera de libreta’, pero de que ando buchón, ando buchón y mejor aquí la dejo antes de que se me salga algo.

  • 2022: ENTRE LA ESPADA DE LA VIOLENCIA Y LA PARED DE LA PANDEMIA

    2022: ENTRE LA ESPADA DE LA VIOLENCIA Y LA PARED DE LA PANDEMIA

    Diez días apenas van del nuevo año y en Sonora sumamos ya 4 mil 163 nuevos casos de Covid19, más los que se acumulen en lo sucesivo.

    No, por ningún lado que se vea, este ha sido un arranque de año que se acerque siquiera al más modesto de los parabienes por los que brindamos al despedir un 2021 fatídico. Si aplicásemos las cabañuelas considerando no el clima, sino los contagios, el reporte de estos primeros diez días proyectarían un 2022 lúgubre, por decir lo menos.

    1 de enero: 201 nuevos casos y una defunción.
    2 de enero: 68 nuevos casos y una defunción.
    3 de enero: 129 nuevos casos y dos defunciones.
    4 de enero: 349 nuevos casos y dos defunciones.
    5 de enero: 639 nuevos casos y una defunción.
    6 de enero: 696 nuevos casos y una defunción.
    7 de enero: 669 nuevos casos y una defunción.
    8 de enero: 762 nuevos casos y una defunción.
    9 de enero: 306 nuevos casos y una defunción.
    10 de enero: 344 nuevos casos y ninguna defunción.

    En total, 4 mil 163 nuevos casos.

    En el plano nacional la cosa no pinta mejor. Los últimos días se han reportado cifras superiores a los 30 mil contagios cada 24 horas. La cuarta ola llegó a México como un tsunami y si bien la letalidad ha disminuido considerablemente, ya por las vacunas, ya por los tratamientos probados, ya por la atención oportuna, los estragos en la vida productiva, académica y social son devastadores.

    Escribimos estas líneas desde el confinamiento obligado al que nos remitió la enfermedad, inopinadamente pescada ‘gracias’ a una persona que acudió a visitar esta su humilde casa después de una navidad celebrada en la acogedora calidez del hogar, precisamente para no andar exponiendo el físico al veleidoso bicho.

    Pero las cosas pasan y como bien dice el refrán, de donde menos se espera salta la liebre. Afortunadamente los síntomas han sido prácticamente imperceptibles y ya vamos de salida, pero decenas de familiares, amigos y conocidos no pueden decir lo mismo.

    La confinada lectora, el convaleciente lector no me dejarán mentir: hubo días en que la cantidad de casos reportados en redes sociales daban la impresión de que las nuevas variantes de la cepa maldita estaban pegando más fuerte que en sus primeras oleadas, y apretando el cerco incluso contra quienes conservábamos el invicto de manera más o menos decorosa.

    Ya no. El virus ha llegado a las oficinas gubernamentales, a las empresas de todo tamaño; está en los centros comerciales y en cualquier sitio. Menos letal, cierto, pero más contagioso.

    Y en ese contexto el presidente de la República arengaba en las últimas semanas instando al regreso a clases presenciales, sobre todo en las universidades, donde hoy el personal académico, administrativo y manual, así como los estudiantes mantienen muchísimas reservas a propósito de un regreso seguro a las aulas.

    Pero si el mismísimo presidente anunció ayer su condición de contagiado (por segunda ocasión) de Covid19 ¿qué pueden esperar alumnos y maestros en planteles que están lejos de cumplir protocolos mínimos de seguridad?

    El regreso a clases presenciales, que involucra no solamente a las escuelas, sino la intensa reactivación de la movilidad urbana y potencia el riesgo de contagios incalculablemente parece el camino más corto a la llamada inmunidad del rebaño, aquella inicial idea con la que se estrenó el ahora conocido como Doctor Muerte, Hugo López Gatell, cuando planteaba que era preferible una gran cantidad de infectados en las escuelas.

    Después de casi dos años de pandemia y más de 300 mil muertos parece que la apuesta sigue siendo esa, en medio de una estrategia de prevención que ha ido de tumbo en tumbo y que terminó saturando clínicas y hospitales, provocando una crisis de salud descomunal que se agrava con la falta de reactivos para pruebas y medicamentos, sin contar los desbarres en las áreas de comunicación donde también parecen traer la brújula perdida.

    Entre spots de botargas promoviendo el consumo de frutas y verduras y yerros garrafales como incluir la vasectomía como refuerzo gráfico para ilustrar propaganda oficial de la secretaría de Salud federal sobre prevención de la Covid19, las políticas del gobierno en la materia rayan en lo hueco, por no decir en lo demencial.

    En Ciudad de México, por ejemplo, epicentro de la pandemia, la jefa de gobierno llamó a no hacerse pruebas sino a confinarse ante la sospecha de contagio por la aparición de cualquier síntoma parecido a los de la gripe. Muy pocos, sin embargo están dispuestos a acatar la instrucción, comenzando por el mismísimo presidente de la República que todavía el lunes apareció sin cubrebocas en la mañanera, después de encabezar la reunión del gabinete de seguridad y luego de sostener reuniones con sus secretarios y secretarias. López Obrador ya estaba contagiado y presentaba síntomas cuando sucedió esto, y horas más tarde confirmaba el positivo a Covid19.

    La posibilidad de salir pronto de esta pesadilla aparece así, cada vez más lejana.

    II

    El año no comenzó bien tampoco en seguridad pública. En Sonora, Cajeme, Guaymas y Caborca siguen siendo focos rojos en ese rubro. Esos municipios, y otros, empezaron el año tal y como lo terminaron: reportando balaceras, enfrentamientos y asesinatos a diestra y siniestra.

    Así como no hay estrategia para frenar la pandemia, tampoco parece haberla para poner un alto a la escalada de violencia que recorre el país, desde Chiapas hasta Baja California, pasando por Veracruz y Zacatecas donde no cesan las masacres.

    La primera columna de este año debería ser una llena de buenaventura. La realidad, sin embargo, se empeña en no dejar una sola ranura por donde se filtre la luz de la esperanza.

    Tenemos frente a nosotros un año nuevecito, con sus hojas en blanco y la pluma lista para escribir limpiamente las mejores historias. Lástima que haya tantos codos rozando el tintero. Lástima que los mexicanos estemos atrapados entre la espada de la violencia y la pared de la pandemia.

  • MAS MEDIO: ¿ES CLAUDIA CONDENABLE O RESCATABLE?

    MAS MEDIO: ¿ES CLAUDIA CONDENABLE O RESCATABLE?

    Por Rodrigo Sotelo / Twitter: @masmedio

    En el caso de la priista Claudia Pavlovich, el gobernador Alfonso Durazo debe ponerse de acuerdo con el presidente Andrés Manuel López Obrador.

    Aquí, aunque con insostenible tibieza, Durazo ha dibujado un escenario de desfalco, corrupción y abandono que, cuando menos, los tuvo que obligar a priorizar en las consecuentes denuncias que legitimen los señalamientos sobre el supuesto daño a las finanzas estatales.

    El secretario de Hacienda, Omar del Valle Colosio, ha detallado, además del déficit financiero por casi 5 mil millones de pesos, que se encontró una inexistente política de contención del gasto y una inercia que ocasionó un desequilibrio en las finanzas públicas.

    Deuda por 22 mil millones de pesos, pasivos y un abuso en solicitud de participaciones federales que no se reflejan en las acciones de gobierno durante la pandemia.

    No somos expertos en materia hacendaria, pero estos descubrimientos con los que “justifican” incumplimientos y carencias actuales, no pueden ser las credenciales que ameriten un consulado.

    En Educación, el secretario Aarón Grageda Bustamante fue lo suficientemente elocuente y gráfico para demostrar las sistemáticas negligencias en el sector que han imposibilitado un regreso a clases presencial en condiciones medianamente aceptable.

    El gobierno de Claudia Pavlovich, interpretó el inicio de la pandemia como la culminación de su responsabilidad con las escuelas, docentes, los alumnos y padres de familia afectados.

    El estado de deterioro en que entregó las escuelas, podría ser la mejor representación de la ruindad con que se despidió Claudia Pavlovich.

    ¿Y qué se puede decir del manejo alevoso y escandaloso que la administración de la priista le dio a la pandemia por coronavirus?

    Puede demostrarse, pero sospechosamente no está en el interés de Alfonso Durazo y su gabinete, que la emergencia que provocó la llegada del Covid a Sonora significó para el anterior gobierno una oportunidad de negocios irresistible.

    ¿Por qué de los millones y millones destinados a mitigar contagios (sin conseguirlo), José Luis Alomía Zegarra no transparenta conceptos y empresas a las que se le asignaron contratos para medicinas, pruebas, ventiladores, publicidad?

    ¿A quién le beneficiaba redireccionar todos los recursos y esfuerzos, de todas las dependencias, a la atención de una pandemia que los rebasaba y exhibía a todos?

    Lo más que se ha dicho, que no es menor, es que les heredaron la falta de insumos en los hospitales, irregularidades en la subrogación y la falta criminal de medicamentos –ya presupuestado- que llegaba al 8 por ciento.

    Lo mismo en Isssteson, donde el director Jesús Acuña Méndez se ha casi obsesionado con el “desmadre” que enfrenta y que lo mantiene desquiciado, confundido y frustrado.

    Pero bueno, al parecer estos argumentos que aquí se exponen no llegan a Palacio Nacional o son tomados con la informalidad con que se presentan.

    La semana pasada, en la mañanera, ante los rumores y reclamos el presidente López Obrador atajó, de entrada, que se requerirían denuncias presentadas y que se demuestre la responsabilidad de la señora.

    “No se puede juzgar a nadie si no hay pruebas, si no hay elementos; entonces, no podemos nosotros descalificar a la ex gobernadora de Sonora”.

    -¿El nombramiento es un hecho, entonces?

    -No se descarta.

    Con esa facilidad que espanta, que alimenta la impunidad y la suspicacia, mientras aquí el gobernador y su gabinete acusan, en su conferencia el presidente los desestima.

    Uno pide no juzgar y no descalificar, mientras que el otro se ha dedicado –aunque moderadamente- a remarcar que no le dejaron ni para los chicles.

    A lo mejor la 4T termina por ofrecerle una disculpa a la ex gobernadora del PRI y hasta le encuentra algún rasgo de santidad.

    Sería el primer gran fracaso político y de gobierno para Alfonso Durazo.

    Los priistas cruzan los dedos.

    Por cierto, si habrá favorecidos con este inminente nombramiento diplomático para la ex gobernadora, serán precisamente quienes ahora desde su partido la ven como la mayor fuente de su abyección y su desvergüenza.

    Los priistas de Sonora cruzan los dedos porque sean sus similares morenistas los que se enreden en la indecorosa tarea de, si no defender, apoyar con su sepulcral silencio o disimulo el consulado con el que rescatarían a su aliada electoral.

    Y no, no creemos que los priistas sonorenses se ocupen ni de tocar a la jefa con el cuento de la traición partidista.

    Sería tanto como escupir para arriba.

  • ¿CON EL NOMBRE QUE PONGAS, SERÁS MEDIDO?

    ¿CON EL NOMBRE QUE PONGAS, SERÁS MEDIDO?

    Las únicas medallas son las que da la posteridad: Voltaire.

    José María Maytorena Tapia, Cesáreo Soriano, Fausto Topete, Ramón Ramos y Carlos Armando Biébrich son ex gobernadores de Sonora que están desterrados de nombres de calles, escuelas o monumentos públicos. Todos ellos fueron controvertidos y tuvieron serios problemas políticos que los obligaron (a la mayoría) al exilio.

    Eduardo Bours dió instrucciones precisas en su sexenio que no quería nombres de él o sus colaboradores en calles y monumentos. No hay calles Faustino Félix Serna ni en Pitiquito ni en Obregón. Tampoco de Rodolfo Félix Valdés en Nacozari.

    Sin embargo, todavía se conservan nombres de calles como Comonfort, Bernardo Reyes y Manuel González, a pesar de su controvertido papel en la historia de México.

    Del Porfirismo se heredaron los nombres de las principales estaciones de ferrocarril. Estaciones Don y Luis, en Huatabampo (en honor al gobernador Luis Emeterio Torres); Estación Corral, en Cajeme (por Ramón Corral ex vicepresidente); Estación Lencho, a la salida de Tórim (en honor a Lorenzo Torres, que ahí vivió); Ortiz, por Carlos Rodrigo Ortiz (1851-1927) Torres, en la Colorada (por Luis Emeterio); y Esqueda, en el municipio de Fronteras, llamada antes Estación Izábal (Los revolucionarios le cambiaron el nombre al probar que Rafael Izábal ordenó la muerte del maderista Enrique Esqueda).

    Entre las grandes obras públicas de Sonora están las presas, y todas llevan nombres: En la región del Mayo la Adolfo Ruiz Cortines, o Mocúzari en Álamos; En el Valle del Yaqui la Álvaro Obregón, o del Oviáchic, en Cajeme; La Plutarco Elías Calles o El Novillo, en San Pedro de la Cueva; la Ignacio R. Alatorre -guaymense y militar juarista (1832-1899)- o “punta de agua”, en Guaymas; la Abelardo L. Rodríguez, en Hermosillo; y la Lázaro Cárdenas, o de La Angostura, la más antigua de todas en el municipio de Nacozari.

    Las calles principales de las ciudades: Pesqueira (por el liberal juarista), en Navojoa; Miguel Alemán (en agradecimiento por la carretera federal 15), Rodolfo Elías Calles y Rodolfo Félix Valdés, en Ciudad Obregón; Juárez y 16 de Septiembre, en Huatabampo; Aquiles Serdán, en Guaymas; Rafaela Rodríguez y 16 de Septiembre (la que cruza la cabecera), en Etchojoa; Francisco I. Madero (antes la aurora), en Álamos; Adolfo López Mateos, en Bácum; Reforma, en Empalme; Álvaro Obregón, en Nogales; Benito Juárez y Samuel Ocaña, en Puerto Peñasco; y el Blvd. Luis Encinas (antes transversal, que va desde la presa y la antigua vía de ferrocarril hasta el periférico) y el Blvr. Abelardo Rodríguez. También en la capital, Gral. Piña por el ex gobernador Miguel, y Francisco Serna también ex mandatario.

    En Agua Prieta, la principal avenida lleva el nombre de Avenida 6, a la 35 le pusieron Los Apson. A pesar de la importancia histórica del municipio no ha existido una política de nomenclatura que haga justicia a quienes desde ahí libraron importantes batallas contra la federación, como los firmantes del Plan de Agua Prieta, por ejemplo.

    En Cananea la avenida principal lleva el nombre de Benito Juárez, desde la entrada de la mina hasta el final del cementerio (Severiano Moreno). La Álvaro Obregón está a un costado de la Juárez.

    La calle principal de Naco lleva el nombre de Francisco I. Madero

    En San Luis Río Colorado la calle principal lleva el nombre de Álvaro Obregón -la antigua carretera a Baja California- desde la fundación del municipio en 1939. Después de la mesa arenosa cambia a Luis Donaldo Colosio, desde el 2009.

    En Hermosillo, la antigua avenida Yucatán, posteriormente Norberto Aguirre Palancares, pasó a llamarse Luis Donaldo Colosio.

    Con el triunfo de la Revolución muchos nombres de calles, parques y edificios públicos cambiaron de nombre. Por ejemplo, el Parque Madero, de Hermosillo se llamaba Ramón Corral, en honor del exgobernador sonorense, que no está sepultado en Sonora. Después del asesinato de Madero (1913) se le cambió el nombre por Parque Madero.

    En otro ejemplo, la Avenida Serdán se llamaba calle de Don Luis, en honor del exgobernador Luis Emeterio Torres. También se le llamó Calzada de los Naranjos. Después del sacrificio del poblano Aquiles Serdán (nov. de 1910) se le cambió el nombre. También en Guaymas la avenida principal lleva el nombre del prócer de Puebla, en lo que antaño fuera la Calle Real de Guaymas o Avenida 14.

    Hay muy pocas calles con el nombre de Adolfo de la Huerta, y aún cuando su principal batalla (contra la invasión extranjera) la libró en Guaymas en 1854, José María Yáñez tiene una avenida más amplia en Hermosillo que en el Puerto. En Guaymas permanece el callejón Porfirio Díaz, contiguo al mercado municipal. En la capital, a la antigua avenida del expresidente Díaz se le sustituyó por la Gustavo Garmendia.

    Siempre será recomendable poner nombre de calles, municipios o edificios públicos a personajes que ya no viven. Nadie discute los méritos de los nombres de los personajes de la Independencia (Aldama, Hidalgo, Morelos, Allende) o de la Reforma (Juárez, Ocampo, Degollado, Prieto) o de la Revolución (Calles, Obregón, Hill, De la Huerta, Rodríguez). Los méritos y las aportaciones históricas están fuera de duda.

    Las controversias se originan cuando se pone el nombre de una persona viva a una calle, monumento o edificio público. Esto siempre acarreará debates y controversias. En muchos casos las decisiones para poner el nombre de alguien vivo a una entidad oficial llevan un alto contenido de zalamería, cursilería y abyección hacia gente sin mayores méritos.

    En el PRI fueron varios los excesos con nombres y estatuas que posteriormente fueron retiradas de donde se pusieron por ejemplo; la estatua ecuestre de López Portillo, en Monterrey que fue retirada, o la de Miguel Alemán, en la UNAM que después de tanto bombardeo para destruirla, la autoridad decidió retirarla.

    Y ahora la llamada 4T y Morena, que odian el pasado y sienten que la historia de México empieza con ellos, les da por solicitar a España un perdón por la Conquista, retiran el monumento de Colón del Paseo de la Reforma y las placas de Díaz Ordaz de la Línea 1 del Metro; como si eso negara la importancia de las obras y el recuerdo de sus autores. Y en algunos estados como Sonora no quieren saber nada de los gobernantes de los últimos 30 años y proceden a borrarlos del mapa.

    Aquí comenzaron con el bulevar de San Carlos Nuevo Guaymas al borrarle el nombre de Manlio Fabio Beltrones para cambiarlo por Tetakawi. Controversias aparte, los partidarios del ex gobernador dicen que en su gobierno hizo mucho por San Carlos. En esos tiempos (1997) nadie protestó por el nombre; pero tiempos traen tiempos y en política, la forma es fondo. ¿La forma?, la sesión de cabildo, ¿el fondo? La instrucción para retirar el nombre. Lo sorpresivo para Beltrones no ha de ser la actitud de la llamada 4T para con él y la mayoría de políticos del PRI en estos años.

    La cuestión es otra: ¿Dónde están los beneficiarios de las obras que entonces aplaudieron el nombre del bulevar y que ahora no han dicho ni pío?¿silencio prudente o reciclamiento de lealtades?.

    En adelante, lo mejor será legislar en serio para ordenar los nombres de calles y edificios públicos. Ya no más nombres de personas vivas a calles y monumentos. Solo aquellas que -Ya desaparecidas- rescaten la memoria de quienes con sus acciones y obras hayan aportado al desarrollo de Sonora y de México.

    Así de sencillo.

  • MAS MEDIO | NO LE AYUDAN AL GOBERNADOR

    MAS MEDIO | NO LE AYUDAN AL GOBERNADOR

    Por Rodrigo Sotelo / Twitter: @masmedio

    Como pocas veces, la conferencia semanal del gobernador Alfonso Durazo fue rica en contenido, definiciones y determinaciones.

    No es necesariamente la constante, y puede entenderse, pero ahora sí vimos a un gobernador relajado, animoso, accesible, franco.

    Demostradamente, Alfonso Durazo suele ser solvente cuando se trata de enfrentar una dificultad que le demande habilidad política o para expresar una postura contundente de gobierno.

    Su problema inicia cuando recurre a sus colaboradores, que si algunos no terminan de entender el tamaño del reto y no están a la altura de las circunstancias, otros de plano no pueden ni con lo más básico de sus responsabilidades.

    Hay funcionarios tan limitados e incompetentes, que ni viendo atinan. Que además de la falta de iniciativa e imaginación, no sirven ni para seguir una orden.

    También los hay diligentes, cuando menos ocupados en cumplir al pie de la letra una asignación que corresponda a la dependencia o se soporte en las ideas de la Cuarta Transformación.

    Así ocurre en Educación con Aarón Grageda Bustamante, a quien no puede reprochársele la decisión de obligar al regreso a clases presenciales sin alumnos ni maestros vacunados, al tratarse de una orden –bien ejecutada- de Palacio para ponerse en sintonía con la estrategia presidencial.

    El volado de regresar a clases sin el total de las escuelas adecuadas y sin los insumos suficientes, en medio de la cuarta ola y la escalada de contagios pos diciembre, es una determinación del gobernador Durazo.

    Para el gobernador de Morena, que finalmente se define un escéptico de la gravedad sanitaria y las consecuencias económicas que provoca el Covid, esta pandemia ya superó su etapa más difícil.

    “Yo creo que tenemos que analizar el problema con una gran frialdad, no podemos dramatizar, es todo un tema, según los indicadores estadísticos la etapa más difícil ya pasó.

    “Tenemos un muro de contención, que representa un programa de vacunación nacional más importante del mundo”.

    “Las medidas son de carácter local, no podemos comparar a Sonora con Los Ángeles, ni a Hermosillo con ninguna otra ciudad porque las medidas responden a su circunstancia muy particular”.

    No puede menos que aterrarnos que se presuma la ineficiente y selectiva vacunación federal y que después de dos años aún no se asimile la forzosa conexión (comercial, educativa, turística, etcétera) que tenemos con el mundo.

    Compartimos, en cambio, ya con el conocimiento adquirido, la inconveniencia de dramatizar en lugar de informar y acompañar; así como en el error que sería volver a confinar para enfrentar la emergencia.

    No se aspira a que no haya más contagios, los va a haber. Se pide que los gobiernos no aprovechen el cansancio emocional para justificar su inoperancia. Que quienes estén facultados, se vuelvan más intransigentes con las medidas mínimas que evitan la propagación.

    No se le puede dar la bienvenida a un crucero rebosante de Covid y mandar a la titular de Turismo, Celida López, a abrazar a los viajeros para contrarrestar el natural temor que produce un arribo en estas indeseables condiciones.

    O permitir, en la propia conferencia del gobernador Durazo, que un reportero, por chairo que se diga, contravenga las recomendaciones más básicas que repiten hasta quienes minimizan la pandemia.

    ¿No es lo mínimo que tendría que cuidar el secretario José Luis Alomía? ¿Por qué tolera que en sus narices un irresponsable salude sin cubreboca al mandatario y se mantenga así durante toda la rueda de prensa?

    ¿Cómo, racionalmente, podría explicar este Alomía que no pasa nada con Ómicron, cuando todos vemos las filas en Salud Digna, San José o cualquier otro laboratorio particular donde se realizan pruebas como en maquiladora? ¿Llevan registro y rastrean todos los positivos que están brotando?

    Al gobernador Alfonso Durazo se le puede reconocer su invariable disposición para atender y valorar a los medios, pero requiere que su equipo le ayude en esa proporción.

    No es posible, más bien resulta penoso, que ayer haya tenido que regañar a Edgar Sallard (Comunicación) y a Rodolfo Castro (Oficina del Ejecutivo), al incumplir con un compromiso de transparencia que el propio Durazo había hecho en una anterior conferencia.

    El gobernador puede ofrecer carnita informativa, como la confirmación del Festival Ortiz Tirado, los ahorros o las alternativas y acuerdos que trae con los Yaquis, pero las torpezas de su gente terminan por opacar sus resultados y buenas intenciones.

    ¿No les dará tantita vergüenza que el propio Durazo les recordara que ellos tienen la responsabilidad de darle seguimiento a las instrucciones y los compromisos del gobernador?

    YA REGRESÓ EL MALORO
    Nadie duda que uno de los personajes políticos más favorecidos con la victoria electoral de Antonio Astiazarán, sea el ex alcalde Manuel Ignacio Acosta Gutiérrez.

    El Maloro fue perseguido y desprestigiado a la saciedad por su sucesora Celida López Cárdenas.

    Incluso, con un marcaje tan personal como el que le puso Claudia Pavlovich a Guillermo Padrés, la también ex alcaldesa obligó al priista a huir y refugiarse en Estados Unidos.

    Pues bien, ayer al Maloro Acosta se le vio muy campante y saludador en el homenaje a Jorge Valencia, donde se topó y hasta cruzó algunas palabras con la misma Celida López que juró llevarlo a la cárcel.

    Es la viva analogía de las reses y el carnicero o del borracho y el cantinero… como sea, es otro logro de Toño Astiazarán que consiguió lo inimaginable.

    Y es que, es como si Durazo pusiera en un mismo evento público a Claudia Pavlovich y Memo Padrés, ahora con el panista muy a la mano y la señora a salto de mata.

    Gracias y hasta la próxima con el favor de Dios.

  • SIN EDUCACIÓN, NO HABRÁ GRANDEZA | Por: Bulmaro Pacheco

    SIN EDUCACIÓN, NO HABRÁ GRANDEZA | Por: Bulmaro Pacheco

    No es bueno que, en el discurso oficial local, la Educación no figure como prioridad del actual gobierno si es que se quiere -como se dice- recuperar la grandeza sonorense.

    Se mencionan con mucha insistencia las obras de ampliación de Puerto de Guaymas, las vías del tren de Nogales, la carretera Chihuahua-Sonora y obras federales tendientes a la modernización administrativa federal de las aduanas y la expedición de pasaportes y está bien, pero no se mencionan con el mismo énfasis la Educación… y menos la cultura.

    Cuando mucho se habla del regreso a clases después de la pandemia (donde todavía reinan la confusión y la incertidumbre), la reparación de escuelas y la inversión en becas, derivada de los recursos que se le quitaron al Congreso local. Nada para presumir.

    No se habla por ejemplo del compromiso constitucional que se tiene para brindar espacios de educación media superior a quienes los soliciten ahora que se debe cumplir con el transitorio de la reforma al artículo Tercero Constitucional del 2012 que señala al 2022 como el año en que todas las entidades federativas deberán contar con oferta suficiente para cumplir.

    Tampoco se habla de la obligatoriedad de la educación superior legislada en el actual sexenio federal, -y que decir- de la gratuidad que se debe discutir con cada uno de los responsables de las instituciones para que dicho precepto Constitucional no quede en letra muerta pero que tampoco se aplique sin tomar en cuenta las condiciones de las instituciones de educación superior, donde los ingresos propios representan una parte muy importante de su operación y donde la Unison cubre solo el 30% de la demanda estatal, quedando el resto a cargo del sistema de educación tecnológica y de instituciones privadas.

    Tampoco se menciona lo que se va a hacer para incrementar la calidad de la educación que se imparte en Sonora porque si en esa materia, se quiere implantar el modelo federal -que luce apagado, desolado y en permanente conflicto- sin evaluaciones ni mediciones confiables y en manos de la CNTE -(que ha reducido el tema educativo a un tema de pagos y prestaciones)- no se llegará a ninguna parte y menos con algunas decisiones patéticas como el caso del Conalep-Sonora, que revelan se regresó al sistema de cuotas y cuates o simplemente de relaciones familiares.

    Sin una buena educación no se avanzará en la grandeza Sonorense. Hay que revisar la historia y sobre todo el papel que los ejecutivos estatales han tenido en la materia que sin duda, de la mayoría ha sido una de sus grandes preocupaciones desde los impulsos de Ramón Corral Verdugo, la trascendente obra educativa de Calles y de la Huerta, hasta la fundación de la Universidad de Sonora, la media Superior y los tecnológicos.

    La grandeza sonorense se empieza a notar en México cuando es designado vicepresidente el ex gobernador de Sonora Ramón Corral Verdugo.

    Los Científicos, al parecer no entendieron la señal que mandaba el viejo presidente Porfirio Díaz (1830) con la designación de un político 24 años menor que él, para responder en caso de que el dictador faltara y no se presentaran problemas de confianza en relación a las presiones internas y externas ocurridas en función de su avanzada edad.

    ¿Cómo aceptar que un desconocido gobernador sonorense hubiera sido nombrado primero jefe de gobierno de la Ciudad de México, secretario de Gobernación y vicepresidente de México? Todo un acontecimiento que difícilmente digirieron los vetustos políticos, que rodeaban a Díaz, y toda una sorpresa para los sonorenses.

    Como gobernador del Estado, Corral le dio prioridad a la modernización estatal como la ampliación del ferrocarril de Guaymas a Nogales y a la educación pública. Intentó revivir un proyecto de educación superior que inició Ortiz Retes y por ello fundó el Colegio Sonora y escuelas primarias -entre ella la primera de Huatabampo-.

    Otra muestra de grandeza Sonorense fue cuando la XXIII Legislatura local 1911-1913 se negó a reconocer a Victoriano Huerta como presidente de México, después de los asesinatos de Madero y Pino Suárez.

    Diputados como Ignacio L. Pesqueira Gallegos, Flavio Bórquez Velderráin, Adolfo de la Huerta Marcor, Ignacio Bonillas y Alfredo Caturegli entre otros, dieron muestra de valor y grandeza cuando presionados por el golpista que los instaba a reconocerlo, nunca cedieron.

    Sonora resistió a las presiones y a la invasión del ejército federal, y no se dobló. Chihuahua y Coahuila hicieron lo mismo. El gobernador Abraham González (Chihuahua) fue asesinado, y Venustiano Carranza (Coahuila) rompió lanzas con el gobierno federal y se dirigió a Sonora para unir esfuerzos y dar la batalla contra el golpista, e impulsar la defensa de los principios que dieron fuerza a la Revolución Mexicana.

    De esa rebelión surgieron Obregón, Calles, De la Huerta y Rodríguez. También los diputados constituyentes de 1917 así como Benjamín Hill, Piña, Gutiérrez Cázares, Macías, Otero Pablos, Topete, Yocupicio, y otros, que le dieron lustre a Sonora y contribuyeron a moldear a México entre 1917 y 1934. Más grandeza: Entre 1920 y 1934 cuatro sonorenses gobernaron el país (De la Huerta, Obregón, Calles y Rodríguez). Circunstancia que no tiene parangón.

    Álvaro Obregón antiguo profesor de primaria en Moroncárit ya como Presidente de México creó la Secretaría de Educación Pública en 1921.

    Plutarco Elías Calles avanzó en la educación normal, en escuelas centrales agrícolas, creó el Banco de México y la Comisión de Irrigación.

    Gobernadores que apenas habían cursado algunos años de primaria, asesorados por profesionales sonorenses formados en la Ciudad de México propusieron la fundación de la Universidad de Sonora en 1942.

    Abelardo Rodríguez impulsó primarias y secundarias estatales y avanzó en la modernización de las principales ciudades del Estado.

    El gobernador Luis Encinas diseñó el primer gran plan de industrialización de Sonora que siguieron sus sucesores. Fortaleció a la Unison.

    Carlos Armando Biébrich sacó en 1975 las cuatro preparatorias de la Universidad de Sonora para crear el Colegio de Bachilleres (que hoy tiene 33 planteles). Gestionó con el Presidente Echeverría centros federales de media superior (Cbtis, Cbtas, Cetmar) y los Institutos Tecnológicos de Hermosillo y Nogales (que ya son 9 incluyendo los 3 federalizados)

    Ocaña impulsó la creación de instituciones educativas como el Colegio de Sonora y el CIAD y se trajo la Ford a Hermosillo.

    Rodolfo Félix Valdés se aplicó a la educación media superior y gestionó con el Presidente Miguel De Las Madrid la carretera de cuatro carriles de Estación Don a Nogales.
    Con Beltrones avanzaron los Cecytes (que ya van 83 planteles incluyendo los telebachilleratos), con López Nogales las Universidades Tecnológicas (que ya van 7) y escuelas importantes como medicina de la Unison. Con Bours se avanzó en la educación media superior y con Padrés en media superior y nuevas universidades tecnológicas.

    Sonora cumplió con la obligatoriedad de la educación primaria en 1946, la secundaria en 1996 y preescolar en 2002 y los indicadores principales de cobertura hasta Pavlovich en 2021 muestran un gran avance. Falta el reto de la calidad de la educación. Tremendo reto.

    ¿Cuál es el actual modelo educativo para Sonora? No lo sabemos. En métodos, contenidos y programas de estudio tampoco se sabe, pero deberá hacerse un gran esfuerzo para mejorar la calidad desde inicial a superior, combatir los vicios y la burocratización, dejar de lado el nefasto sistema de cuotas y aplicarse a la modernización del sistema, porque anotémoslo; Sin una buena Educación no habrá grandeza Sonorense. Así lo entendieron los pioneros de la educación en el Estado -más allá de apreciaciones temporales o coyunturales- desde Ramón Corral Verdugo a la fecha.

  • EL ZANCUDO | ALFONSO DURAZO: 100 DÍAS

    EL ZANCUDO | ALFONSO DURAZO: 100 DÍAS

    Por: Arturo Soto Munguía

    Este miércoles al filo de la una de la tarde, el gobernador habrá de presentar un recuento de lo alcanzado en estos sus primeros 100 días al frente de la administración estatal.

    Un arranque que no ha sido sencillo, pero en el que Durazo Montaño ha sabido aprovechar el bono democrático, la gobernabilidad que permite una mayoría legislativa afín a su proyecto y la excelente relación que tiene con el gabinete federal del que proviene, pero sobre todo con el presidente de la República.

    Se sabe que el principal problema que ha enfrentado es el de la falta de recursos y eso ha ocasionado algunos tropiezos, ya para arrancar programas o darles continuidad, o hasta para pagar la nómina de la burocracia. El gobernador a veces no puede ocultar su desilusión cuando tiene que apoquinar 450 millones de pesos mensuales para cubrir el adelanto de participaciones que consiguió la pasada administración, pero de las cuales él no vio ni el polvo.

    Eso lo llevó a incluir de último momento en el paquete fiscal presentado al Congreso una solicitud para un crédito de 990 millones de pesos que le permitiera solventar los compromisos de fin de año tanto para la administración estatal como para las municipales. Este monto es deuda de crto plazo que tendrá que pagarse el año próximo.

    Aun así la maquinaria estatal ha seguido funcionando y apoyado en un Congreso de mayoría afín consiguió sacar intacta su propuesta presupuestal para el 2022, destacando el extraordinario monto para los programas sociales en sintonía con la política federal, y los ahorros proyectados a partir de un plan de austeridad que algunos califican de agresivo, pero que espera lograr economías hasta por cuatro mil millones de pesos en los próximos años.

    Ayer el gobernador dio un adelanto de lo que seguramente incluirá en este recuento, destacando las multimillonarias inversiones para la modernización de aduanas y del puerto de Guaymas; los proyectos carreteros y la mega planta fotovoltaica para la que ya se anunciaron inversiones iniciales por el orden de los nueve mil millones de pesos.

    Pero no adelantemos vísperas y mejor esperemos a lo que tenga que decir este día.

    Por cierto en la rueda de prensa de ayer Alfonso Durazo mostró la mano izquierda y luego de negociaciones que no debieron ser sencillas con autoridades tradicionales yaquis éstas acordaron ‘levantar’ la ‘piola de cuota’ que tenían instalada en Loma de Guamúchil liberando el tránsito por la carretera federal 15 en ese tramo.

    El asunto es notable porque justo en ese punto es donde se habían registrado más conflictos, algunos que rayaron en la violencia y donde recientemente fue grabado un agente de la policía municipal de Cajeme colaborando con los yaquis para obligar a pagar la cuota a un usuario de la carretera.

    Esta situación se fue volviendo más compleja porque se dejó crecer por muchos años, y en el caso de Loma de Guamúchil se pudo negociar porque allí son las autoridades tradicionales las que operan el retén, no así en los instalados a la altura de Vícam y en Pótam, donde los ‘cobradores’ de cuotas ‘voluntarias’ son indígenas (y algunos ni siquiera lo son) que se apostan arbitrariamente y sin representación alguna.

    Por las fechas que corren, cuando decenas de miles de ‘paisanos’ regresan por esa rúa a sus pueblos de origen el tema de las cuotas yaquis amenazaba con volverse aún más problemático, pero el gobierno del estado operó no solamente con el diálogo, sino que incluso se sabe que ya se liberaron algunas órdenes de aprehensión contra personas que organizan y operan los retenes, de allí que se hayan levantado.

    Trascendió que en el caso de Loma de Guamúchil se trata de una especie de acto de buena voluntad por parte de las autoridades tradicionales yaquis para dejar libre el tránsito al menos en las fechas entre navidad y año nuevo, por lo que posiblemente vuelvan a instalarse pasadas éstas.

    De cualquier forma el gobernador adelantó que se sigue trabajando en los trabajos del Plan de Justicia para la Etnia a fin de resolver también este, que es uno de los muchos asuntos en la agenda del gobierno con la etnia.

    Durazo dijo que su propuesta inicial era de la de ‘mover’ la caseta de cobro que opera Capufe en Esperanza, reubicándola a la altura del danzante yaqui y destinar una parte de los recursos allí captados para resolver problemas de la etnia, señaladamente el del pago de operación (tarifas eléctricas) del acueducto que está proyectado para dotar de agua potable a los ocho pueblos y el resto de las comunidades indígenas.

    Sin embargo esa propuesta no prosperó debido a los altos costos que representaba; en cambio se han proyectado paradores turísticos en los que se presten diversos servicios (como el de restaurantes) y actividades comerciales para ofrecer la producción artesanal de la etnia.

    Hay que anotar un punto al gobernador Alfonso Durazo que poco a poco está avanzando en la solución de añejísimos problemas en ese territorio.

    Sin duda una de las asignaturas pendientes y que resulta muy dolorosa para los ciudadanos es el tema de la seguridad pública, sobre todo en ciertas regiones del norte del estado, el desierto de Altar y de manera crítica en el corredor Cajeme-Empalme-Guaymas, donde no han podido dar pie con bola.

    Los últimos tres meses en Cajeme han promediado los 60 homicidios dolosos diarios, pero diciembre pinta para romper ese siniestro récord, ya que aún faltan diez días para que termine el mes y los asesinatos suman 50, con los tres ‘embolsados’ que encontraron ayer por la noche.

    Quizás el evento de los cien días sea el foro ideal para que el gobernador anuncie un golpe de timón en la estrategia, quizás algunos cambios en el gabinete de seguridad o al menos un jalón de orejas porque hasta el momento es la parte más crítica de su administración, lo que no deja de ser paradójico si se considera el muy reciente paso del hoy gobernador por la secretaría de Seguridad federal.

    Hoy se verá.

  • EL ZANCUDO | CANO AHUIR, EL ÚLTIMO MOHICANO

    EL ZANCUDO | CANO AHUIR, EL ÚLTIMO MOHICANO

    Por: Arturo Soto Munguía

    Andrés Humberto Cano Ahuir es el último de los cinco militares propuestos por el entonces secretario de Seguridad federal, Alfonso Durazo Montaño para hacerse cargo de las corporaciones municipales en igual número de municipios, a saber: Navojoa, Cajeme, Empalme, Guaymas y Hermosillo.

    El paso de los milicianos por esos cargos civiles fue de más sombras que luces. De hecho, luces hubo muy pocas y sombras, muchas.

    El 13 de agosto de 2019, casi al cumplirse el primer año de ejercicio de los nuevos alcaldes y alcaldesas en Sonora, el entonces secretario de Seguridad federal presidió un evento en el que estuvo acompañado de la gobernadora Claudia Pavlovich y altos mandos del Ejército y la Marina. Allí anunció que como parte de la nueva estrategia para abatir la criminalidad y recuperar la paz en el estado, serían elementos castrenses quienes asumirían el mando de las corporaciones municipales.

    Y es que de 2018 a 2019 la escalada de violencia criminal registró un inusual repunte sobre todo en los municipios del sur del estado, señaladamente Cajeme, Guaymas y Empalme.

    En Hermosillo, tomaría el mando el general de División Diplomado de Estado Mayor, Gilberto Landeros Briseño quien salió del retiro para sustituir en el cargo al comisario Luis Alberto Campa Lastra; en Guaymas, estaría el capitán de Fragata Infantería de Marina D.E.M. Andrés Cano Ahuir; en Empalme, el capitan Corbeta de I.M.P. Julio Alberto Hernández Cruz; en Cajeme, Jorge Manuel Solís Casanova; y en Navojoa, el general de División, D.E.M. Ismael Cervantes Ramos.

    Dos años después nadie de ellos sigue en sus cargos; unos tuvieron una permanencia tan breve como polémica -por decirlo amablemente- y en el caso de Navojoa, Cervantes Ramos ni siquiera tomó posesión ya que el cabildo nunca aprobó su nombramiento.

    Cervantes habría relevado en el cargo a Luis Gerardo Villalobos Hernández, pero al ser rechazado por el cabildo, tuvo que quedarse Villalobos.

    Al iniciar la presente administración de ‘El Mayito’ Martínez, el cargo fue ocupado por una experimentada policía que ya había sido comisaria en Etchojoa: Ana Lilia Córdova Herrera, quien apenas iniciando este mes de diciembre presentó su renuncia, aunque las versiones más extendidas en la Perla del Mayo indican que se resistió a abandonar el cargo hasta el último momento.

    Hoy ese cargo lo ocupa Javier Alatorre Correa, un policía de carrera, abogado y desde hace 20 años, agente de la Policía Muicipal, con experiencia en la FGR.

    En Cajeme, municipio rankeado en el top-five de las ciudades más peligrosas del mundo, donde este año los asesinatos violentos han promediado dos diarios, pero los años 2018 y 2019 no fueron menos sangrientos, tomó posesión el coronel Jorge Manuel Solís Casanova.

    No pasaron seis meses para que solicitara su primera licencia, ausentándose del cargo en medio de la escalada de violencia criminal; luego solicitó una nueva licencia y los regidores comenzaron a presionar para que presentara su renuncia, lo cual sucedió el 23 de enero de 2020, pero ni los regidores fueron enterados.

    Actualmente el coronel se desempeña como comisario de Seguridad Pública en Huimanguillo, Tabasco.

    En su lugar, fue nombrado Francisco Cano Castro, pero la violencia siguió imbatible. Para el 28 de noviembre de 2020, llegó al cargo el capitán Cándido Tarango, bajo cuya gestión el crimen alcanzó niveles de escándalo durante la administración de Sergio Pablo Mariscal. Al llegar Javier Lamarque Cano en septiembre de 2021, lo ratifica en el cargo. Las cosas siguen igual o peor en aquel municipio.

    En Empalme la situación no es menos dramática. En febrero de 2019 el comisario de Seguridad, Marco Vinicio Gálvez Gutiérrez fue ejecutado a tiros en la vía pública; hechos donde resultó seriamente herido su escolta Dominic Zazueta.

    En abril de 2020 el capitán de corbeta Julio Alberto Hernández Cruz, quien había llegado como parte de los militares nombrados desde la secretaría de Seguridad federal, fue sustituido por otro militar, Luis Alberto Taylor González, quien llegó junto a su equipo y permanece en el cargo en esta nueva administración municipal.

    Guaymas es el caso más emblemático de la estrategia fallida. Andrés Humberto Cano Ahuir llegó durante la administración de Sara Valle Dessens, un trienio de terror en el que fueron asesinados más de 10 agentes de la municipal y el contralor Daniel Morales Santini, quien previamente había ocupado un cargo directivo en Seguridad Pública. La propia casa de la alcaldesa fue baleada en hechos nunca esclarecidos.

    A pesar de todo, Sara Valle se empeñó en mantenerlo en su cargo.

    Más aún, la nueva alcaldesa Karla Córdova propuso su ratificación en cabildo, condicionando su permanencia a un ‘periodo de tres meses de prueba’. No se cumplía ese plazo cuando se dieron los violentos hechos en Palacio Municipal.

    El 25 de noviembre pasado un grupo de sicarios llegó hasta la llamada ‘Casa de piedra’ abriendo fuego contra el capitán Cano Ahuir, que se encontraba junto a la alcaldesa y acompañado de sus escoltas. Uno de los sicarios hizo estallar una granada y en el tiroteo fue asesinado Antelmo Gutiérrez, escolta de la presidenta municipal y Marisol Cuadras, una joven de 18 años que participaba de una manifestación pacífica en el Día Internacional de la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres. Vaya siniestra paradoja.

    Ayer finalmente el capitán presentó su renuncia. Lo releva en el cargo otro capitán, Eladio Amaya Muñiz.

    Cano Ahuir era el último de los cinco militares designados en 2019 al frente de las corporaciones municipales que se mantenían en sus cargos.

    En Hermosillo llegó el general Gilberto Landeros Briseño, quien renunció en junio del año pasado para incorporarse al equipo de transición de Alfonso Durazo Montaño en el tema de seguridad.

  • ¿HASTA CUÁNDO SOLAPARÁ DURAZO A LA PANDILLA DE DELINCUENTES YAQUIS?

    ¿HASTA CUÁNDO SOLAPARÁ DURAZO A LA PANDILLA DE DELINCUENTES YAQUIS?

    CARRUSEL: Por Víctor Fausto Silva D.
    Lamentablemente, estimado lector, tuvimos boca de profeta cuando meses atrás vaticinamos que ni pidiéndoles perdón ni dándoles las perlas de la virgen se lograría aplacar a los yaquis, que ya hicieron su modus vivendi de la extorsión sobre la carreta internacional.

    No pasa un solo día sin que se divulguen videos en los cuales una pandilla de delincuentes –no se les puede llamar de otra forma- exhiben la prepotencia y la impunidad que derivan en ataques a los vehículos y en agresiones físicas contra los automovilistas, mientras las autoridades se limitan a mirar de reojo y a chiflar quedito, con las manos en las bolsas

    Se hacen guajes, pues, aunque debe abonársele al alcalde de Cajeme, Javier Lamarque Cano, que suspendió de inmediato a un chota municipal que por sus pistolas –y quizá por jugosa mochada- se puso ¡del lado de los asaltantes!, pues con patrulla atravesada y arma larga en ristre, intimidaba a los automovilistas que se negaban a pagar la tan infame como ilegal cuota.

    Pero fuera de ahí, el descarado atracadero no parece molestar en lo más mínimo ya no digamos a nivel federal, porque el Presidente baila de contento confiado en que según él ya se embolsó a los yaquis (¡Mjú!), sino en el palacio de gobierno en Hermosillo.

    López Obrador: Lo mandaron por un tubo.
    A contrapelo de lo que se ha sostenido, desde AMLO hasta el gobernador Alfonso Durazo y de ahí hasta abajo, el plan de justicia para la tribu yaqui es una chulada y avanza de maravilla, pero no acababan de levantarse las autoridades de la ramada tradicional, cuando ya una fracción de alzados había retomado la reata para los bloqueos carreteros a la altura de la loma de Guamúchil.

    ¿Y qué dijeron los propios yaquis? Los participantes en los acuerdos se lavaron las manos diciendo que los asaltantes no son de su bando, sino indios alzados porque no confían en los tratos con el gobierno.

    Y sin embargo, cuesta trabajo creer que unos cuantos instalen un negociazo de tales proporciones a espaldas de una mayoría. Huele más bien a jugada propia de ladinos, a una estrategia tipo limosnero con garrote: con una mano te pido y con la otra te apaleo.

    Es un ganar-ganar: a corto plazo con los fogonazos de dinero que están obteniendo vía extorsión, y a mediano y largo plazo con lo que consigan tumbarle al gobierno, que ya les ofreció más tierras, más agua y otra serie de beneficios entre los cuales se cuenta incluso el usufructo de una próxima caseta de cobro en su territorio.

    Sin meternos en honduras históricas y de merecimientos o no, una cosa es palpable: al presidente López Obrador nada más le faltó traerles nieve de chorro (y tibiecita, no les vaya a afectar la garganta a los señores), y la supuesta mayoría yaqui estuvo de acuerdo en, por lo menos, entrar en una tregua para que avanzaran los compromisos pactados.

    Pero no. Un grupúsculo mandó al diablo a esa supuesta mayoría de hermanos de sangre, al propio AMLO y de refilón al gobernador Durazo, con todo y su juramento de hacer cumplir las leyes y su compromiso de campaña de lograr “un Sonora para todos, no para unos cuantos”, a los que acusó de haber saqueado al estado.

    Ahora, lo que el ciudadano común y corriente ve -especialmente el que circula por la 4 carriles y cae en sus garras-, es que entre esos “cuantos” saqueadores se instalaron cómodamente los supuestos yaquis rebeldes.

    Y lo hicieron a sus anchas y según se ve hasta que les pegue su regalada gana, porque con el cuento de que aquí no se reprime a nadie, no se les va a tocar ni con el pétalo de un citatorio judicial.

    No vaya a ser que se enojen los señores. Y chínguese el que vaya pasando por ahí.

    Durazo: Discurso al bote de la basura
    Lo cierto es que el discurso oficial con la cantaleta de que “no somos iguales” y de que ya no hay corrupción ni impunidad, se fue al bote de la basura.

    Durante el sexenio pasado, le tupieron lindo y bonito a Claudia Pavlovich por su negligencia al no atender el problema de los bloqueos yaquis, y ella se atrincheró diciendo que el asunto es federal.

    De cierta forma se entendía –que no se justificaba- como un peloteo político, dado los diferentes orígenes de la Gobernadora y el Presidente

    Sin embargo, ahora que se alinearon los astros y tanto el gobierno central como el de Sonora se tiñeron de guinda, las cosas siguen igual, si no es que peores, porque habiendo venido el mismísimo AMLO a apapachar a los yaquis, tampoco se consiguió nada.

    Quienes circulan por la 4 carriles y son asaltados por los yaquis se preguntan, con justificada razón, ¿de qué sirve que manden a Sonora mil o más elementos de la Guardia Nacional, si nada más se les ve en caravanas por las calles, como si protagonizaran desfiles de edecanes?

    ¿Cuándo se les verá poniendo orden, específicamente en Loma de Guamúchil, donde un puñado de envalentonados sujetos se pitorrean del Presidente y del Gobernador?

    ¿Qué imagen se ofrece en Sonora para los miles de paisanos que están pasando por aquí rumbo al sur del país?

    A los pomposamente llamados “Héroes paisanos”, nadie les advirtió que además de venir a jugarse la vida capoteando sicarios en carreteras, se toparían también con retenes hechizos manejados por un turba de asaltantes, cobijados por la tibieza de un gobierno que habla muy bonito, pero actúa muy poco.

    Por eso es válida la pregunta:

    ¿Hasta cuándo solapará el gobernador Durazo a la pandilla de delincuentes yaquis?

  • EL ZANCUDO | ¿QUIÉN LE AYUDA AL GOBERNADOR?

    EL ZANCUDO | ¿QUIÉN LE AYUDA AL GOBERNADOR?

    Por: Arturo Soto Munguía
    En Sonora el 2021 se está despidiendo en medio de cierta efervescencia social. Diversos conflictos aparecen en varios frentes poniendo a prueba la capacidad de operación política de las autoridades gubernamentales. Y financiera, porque algunas de esas inconformidades se resuelven con dinero que, al parecer, no hay.

    Tal es el caso de la burocracia estatal, donde reportan que siguen sin depositarles la segunda parte del aguinaldo en Sedesson, Comunicación Social, Secretaría de Economía, entre otras dependencias. Todos saben que ese derecho laboral se va a cumplir, pero no saben cuándo y esperan que sea antes de las fechas navideñas.

    Pero en el caso de los maestros y demás personal del sistema Cecytes el asunto está peor. Allí no les han pagado las últimas dos quincenas, el aguinaldo y otras prestaciones, por lo que ya se fueron a un paro indefinido y advirtieron que de no obtener respuesta ‘tomarán’ el Aeropuerto de Hermosillo y las casetas de cobro en la carretera federal.

    El sindicato de Cecytes hizo circular ayer por la madrugada un comunicado interno en el que llaman a la movilización en los planteles de Hermosillo, San Pedro, Pesqueira y Miguel Alemán. También organizaron un plantón frente a Palacio de Gobierno, donde coincidieron con maestros del Conalep que exigen desde noviembre la destitución del director, Luis Carlos Santos, y con choferes del transporte urbano que exigen pago de sueldos y aguinaldos.

    En el caso Conalep los maestros denunciaron que la respuesta obtenida por parte de autoridades del gobierno es que el nombramiento de Santos fue hecho por el gobernador y es por tanto inamovible. Han tenido mesas de diálogo con el secretario particular del gobernador, Francisco Vázquez y con el subsecretario de Educación, sin que haya respuestas a sus demandas.

    En el caso de Cecytes, no fue la mejor manera de iniciar su administración como directora para la maestra Gracia Alicia Anduro Grijalva, que meses antes de la elección de junio pasado buscó la candidatura a la alcaldía de Etchojoa o a la diputación local por el distrito XX bajo las siglas de Morena. Ninguna de las dos se le concedió, pero fue nombrada directora de Cecytes.

    Quizás no sea muy relevante, pero sirva como estampa de la nueva genealogía del poder, la señora Anduro Grijalva es madre del magistrado electoral y antes consejero del IEE, Vladimir Gómez Anduro y del recién nombrado rector de la Universidad Tecnológica de Etchojoa, José Félix Gómez Anduro.

    En sentido estricto, el conflicto en los Cecytes no le corresponde resolverlo a ella (aunque sí gestionarlo) en tanto que se trata de recursos financieros que la secretaría de Hacienda no ha liberado pese a que, como aseguran los maestros inconformes, la federación ya depositó la parte que le corresponde (unos 14 millones de pesos), pero falta la parte que le corresponde al estado.

    El punto es que tras la movilización de ayer por parte de los maestros del Cecytes, la respuesta que obtuvieron es que el gobierno del estado no les debe nada y tienen que formarse en la fila de deudores. Hoy se esperan mayores movilizaciones.

    En una buena medida, la solución a estos ‘atorones’ financieros descansa en el secretario de Hacienda, Omar Francisco del Valle Colosio, que tiene un currículum impecable y cartas credenciales impresionantes como especialista en temas financieros, pero algo parece estar sucediendo con él, pues sus más recientes apariciones públicas solo han sido como actor de reparto en los videos que el muy protagónico director del Isssteson, Jesús Manuel Acuña se manda producir y difunde cada vez que quiere echarle en cara la crítica situación por la que atraviesa el instituto a su cargo.

    Más al sur está a punto de escalar el tema de los retenes yaquis en la carretera federal. Por estos días y hasta la primera semana de enero comenzará el abundante flujo de vehículos por esa rúa. Es temporada de jauja para la etnia, con o sin Plan de Justicia.

    Todo lo que resta de diciembre los ‘paisanos’ llegan en una interminable caravana de vehículos, y a principios de año regresarán por esa misma rúa dejando una buena cantidad de dólares en las improvisadas alcancías con que los hermanos yaquis se cobran la llamada ‘servidumbre de paso’, un impuesto que deberían pagar el gobierno y las empresas que usufructúan su territorio pero que solidaria y desinteresadamente pagamos todos los usuarios de la carretera.

    Lo de ‘solidaria y desinteresadamente’ es desde luego, un eufemismo, porque ahora que el gobierno federal ya está operando de nuevo las casetas de cobro, pues hay que apoquinar doble, lo cual genera molestias en los usuarios y ya comienzan a aparecer episodios de rispideces y desencuentros que podrían escalar en violencia.

    El tema de las ‘piolas de cuota’ que instalan los yaquis en la carretera no es nuevo, pero tampoco hay quien lo resuelva, ni siquiera con el Plan de Justicia para la Etnia del que tanto se ha hablado.

    Son varios los titulares de diversas dependencias que deberían estar tomando cartas en este asunto, pero el que tradicionalmente se hacía cargo (por lo menos de aparecerse eventualmente en la zona de conflicto) era el secretario de Gobierno. Actualmente esta cartera la ocupa el maestro Álvaro Bracamonte Sierra, también de currículum impecable pero al que tampoco se le ha visto al menos comiéndose un wakabaki en Loma de Guamúchil.

    El gobernador Alfonso Durazo trae una agenda cargadísima. Un día recibe a los mandos de las fuerzas armadas para tratar el no menos escabroso tema de la violencia criminal en el estado; otro día se reúne con diplomáticos norteamericanos para abordar además de ese asunto, el de la promoción económica; al siguiente vuela a Tabasco para reunirse con sus homólogos de todo el país y con el mismísimo presidente de la República, y si le queda un campito va y entrega los carritos de hot dogs que consiguió la secretaria de Desarrollo Social Wendy Briseño para repartirles a las jefas de familia, bajo el muy aspiracionista nombre de ‘proyectos gastronómicos’.

    De la seguridad pública ni hablamos. María Dolores del Río y Claudia Indira Contreras, como secretaria de Seguridad y Fiscal estatal respectivamente nomás no dan pie con bola. Cuando la prensa nacional e internacional aluden al desastre de la violencia criminal en Sonora, no las citan a ellas sino a Alfonso Durazo, que llegó a la gubernatura con los blasones de su paso por la Secretaría del ramo a nivel federal.

    Para tener apenas tres meses en el cargo, los conflictos se siguen acumulando y el gobernador, que indudablemente es un hombre de Estado, un avezado político, un servidor público capaz y sensible, tampoco es Superman. De hecho, si lo fuera, su kryptonita sería es@s funcionari@s que no le ayudan mucho.

    II

    Mientras tanto el cabildo de Hermosillo aprobó por unanimidad el presupuesto de egresos 2022 que inicialmente era de 4 mil 113 millones de pesos pero tuvo una ampliación para quedar en 4 mil 838 millones 927 mil 748 pesos con 66 centavos.

    El cabildo también aprobó una modificación al acuerdo que crea el organismo denominado Alumbrado Público y que se transforma en Agencia Municipal de Energía y Cambio Climático.

    Esto no es un simple cambio de nombre, sino que al fusionar cinco dependencias materializa el rediseño de la administración pública para hacer un gobierno más compacto, eficiente y barato. Desde luego, al frente de ese nuevo organismo estará Claudia Neudert, una muy cercana colaboradora del alcalde Antonio Astiazarán, que fue su principal apoyo al frente de Energía Sonora, una AC de larga y fructífera experiencia en los temas relacionados con las energías limpias.

    Y por lo pronto aquí la dejamos. Hoy no hubo la gustada sección ‘Cebolla finamente picada’ porque no hubo nada de cebolla que picar. A ver si mañana.