EL ZANCUDO: Por: Arturo Soto Munguía.
No creo equivocarme si digo que entre los 72 alcaldes y alcaldesas que ayer tomaron posesión de sus cargos en Sonora, ninguno conoce en una relación directa de trabajo al gobernador Alfonso Durazo Montaño, mejor que Antonio Astiazarán Gutiérrez.
‘El Toñito’ fue su secretario particular cuando el de Bavispe firmaba como director de Comunicación Social de la secretaría de Gobernación, por allá en 1995, un año después del asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta, fatídico evento que a la postre llevara a Durazo Montaño a renunciar al PRI, donde ambos militaban por aquellos años.
Durazo fue también el padrino de la generación 1989-94 que se graduó en la carrera de derecho en la Universidad de Hermosillo, invitado por el propio Astiazarán, uno de los graduantes.
La vida -y la política- los fue llevando por caminos diferentes, pero los enterados sostienen que la buena relación nunca se perdió.
Ayer, después de 25 años se volvieron a encontrar, ahora en el puente que une los palacios de gobierno en Hermosillo, antes del evento protocolario en el que Durazo tomó la protesta de ley al guaymense que ya firma como alcalde de la capital.
Por esa añeja relación es que no debe extrañar la familiaridad del trato entre ambos, el respeto institucional y las coincidencias que en sus respectivos discursos fueron más allá de la camaradería, con todo y que sus militancias políticas hoy sean distintas.
Porque la derrota de Morena en Hermosillo debió ser dolorosa y sin embargo, Durazo no lució nada incómodo al lado de Astiazarán. Al contrario, se vieron bastante relajados y hasta bromearon en un intercambio frecuente de espaldarazos propio de dos viejos amigos.
Cebollazos aparte y pasados los protocolos de rigor, comenzó el tiempo de probar que están a la altura de los retos que demanda el estado y sus municipios, que no son menores y ambos los tienen claro.
‘No voy a repartir culpas ni gobernar mirando al pasado; desde la campaña sabía lo que enfrentaría y vamos a trabajar juntos porque no puedo darme el lujo de tener un municipio con problemas que lo trasciendan’, dijo Durazo.
‘No soy de los que se esconden en la culpa ajena y no vengo a ganarme el prestigio desprestigiando a los demás’, dijo Astiazarán.
Por donde se le vea, esa es una buena señal para Hermosillo. Está de más decir que el gobernador mostró similar cordialidad con el alcalde de Cajeme, Javier Lamarque Cano y con la alcaldesa de Guaymas, Karla Córdova a quienes también acompañó en sendos eventos, con la diferencia de que ambos llegaron a las presidencias municipales postulados por su mismo partido, Morena.
Durazo tuvo también un reconocimiento para la ex alcaldesa Célida López y su interino, Fermín González, por el manejo financiero, la renegociación de la deuda y el retiro de concesiones en alumbrado público y la planta tratadora de aguas residuales.
Sin embargo, para el caso de Hermosillo, la palabra clave utilizada por el nuevo alcalde fue ‘reparación’. Y vaya que urge, como, ciertamente, urge en el resto de los municipios ‘grandes’.
Por lo pronto el gobernador anunció dos megaproyectos para la capital: un eje vial que cruce la ciudad de norte a sur (y de sur a norte, obvio), desde la salida a Guaymas hasta la salida a Nogales. Y uno que la cruce desde la colonia Nuevo Hermosillo hasta la salida a Bahía Kino. Estas rúas serán construidas con concreto hidráulico.
Durazo Montaño fue muy claro al precisar que los recursos serán invertidos en vialidades que beneficien a la ciudadanía en general, no como acostumbraban hacerlo algunos, para ‘engordar’ terrenos incrementando su plusvalía con dinero del erario.
Muchos oídos chillaron con este anuncio.
En las nuevas tareas, además de la gran ayuda que anunció Alfonso Durazo para la capital (con la acotación de que los alcaldes deben hacer lo propio, porque ‘no me la voy a pasar extendiendo la mano para pedirle al gobierno federal’), Astiazarán Gutiérrez se apoyará en un gabinete que para estas horas ya la bateadora lectora, el ponchado lector deben saber sus nombres.
Por si no, aquí le van rápidamente: Florencio Díaz Armenta, secretario del Ayuntamiento; Irma Laura Murillo Lozoya, Contraloría; Flor Ayala Robles Linares, Tesorería; Manuel Emilio Hoyos Díaz, comisario de Policía y Tránsito; Isela Montes de Oca Tapia, DIF municipal; Ramón Corral Aguirre, Oficial Mayor; Astarté Corro Ruiz, CIDUE; Daniel Durán Puente, jefe de Oficina; Mariella Espriella Salas, Atención a la Mujer; Eduardo Chávez Leal, Asuntos Jurídicos; María Dolores Montaño, Atención Ciudadana; Madeleine Bonnafoux, Vocería y Comunicación Social; Sergio Pavlovich Esclante, Servicios Públicos Municipales; Daniel García Escalante, Bienestar Social y Participación Ciudadana; César Rascón Muñoz, CMCOP; Luis Ernesto Nieves, Promotora Inmobiliaria; Carla Neudert Córdova, Agencia Municipal del Cambio Climático; Marianna González Gastélum, IMCA; Carolina Guerrero, Instituto del Deporte y la Juventud; Gertie María Agraz Boeneker, Agencia Municipal de Desarrollo Económico.
De lo más notable, la separación que habrá en el instituto del deporte y la juventud, en dos que atiendan cada una de las especificidades de esas áreas. También la creación de la Agencia Municipal de Cambio Climático, una oficina que nace de la agenda muy particular del alcalde, que mucho ha trabajado el tema de las energías limpias. Por cierto, Carla Neudert es garantía al frente de esta agencia, pues acumula experiencia y conocimiento, adquiridos precisamente al lado de Astiazarán en su AC Energía Sonora.
Manuel Emilio Hoyos tendrá la oportunidad de probar todo el arsenal teórico-práctico que ha lucido como un crítico de las políticas de seguridad y ahora le tocará estar al frente de esa difícil asignatura; ‘El Güero’ Nieves se probará en la Promotora Inmobiliaria; Daniel Durán y Flor Ayala son dos viejos conocidos del alcalde, producto de aquella camada de políticos conocidos como la Sub 17 que despuntaron en el gobierno de Eduardo Bours y que ya alinean en la liga de veteranos.
Jorge Hoyos y Norberto Corral son también dos venados ya muy lampareados en los que se apoyará mucho la señora Bonnafoux en Comunicación Social.
Todos los municipios amanecerán hoy estrenando alcaldes y alcaldesas. Hay que estar muy pendientes de la región sur, porque en Guaymas, Empalme, Cajeme y Navojoa, los nuevos ediles recibieron, junto con su acreditación oficial, un pañoletón para amarrarse la cabeza, porque el dolor va a ser intenso ya que comiencen a ver cómo les dejaron el changarro sus antecesores.
Y ya de salida, en la sección ‘Cebolla finamente picada’, solo resta apuntar que en el gabinete de Antonio Astiazarán no aparece un solo borreguista.
Ahí ustedes hagan la lectura que quieran.