EL ZANCUDO | LAS MOVEDIZAS ARENAS DE LOS ACUERDOS POLÍTICOS

por Arturo Soto Munguía

En el despacho de ayer comentamos que el escenario ideal para una transición pactada en 2024 era que dos de las ‘corcholatas’ (Adán Augusto y Monreal) se hicieran a un lado antes de la encuesta, y que Marcelo terminara levantándole la mano a Claudia, que no ha aparecido debajo del canciller en ninguno de los ejercicios demoscópicos que se han publicado hasta hoy.

No contaba, sin embargo, con la astucia del presidente de la República quien, según reveló el periodista Jorge Zepeda Patterson (de cercanísimas fuentes en Palacio Nacional) y confirmó Ricardo Monreal en una entrevista de radio ayer, el acuerdo inicial sobre el que convergieron todos los asistentes a la cena del pasado lunes en el restaurante “El Mayor” es que participaran los cuatro: el o la que gane se haría de la candidatura presidencial, el segundo lugar iría a la coordinador de los senadores morenistas; el tercero a coordinar a los diputados federales y el cuarto a una cartera en el gabinete.

Ese es el escenario ideal para el proceso de selección de candidato (a) en Morena rumbo al 2024.

Los escenarios ideales, sin embargo, en política suelen ser arenas bastante movedizas.

Aunque será el Consejo Político Nacional de Morena la instancia que determine el método y los tiempos de la selección interna, es claro que ya se encuentra muy perfilado: una sola encuesta que aplicarán tres casas encuestadoras y a partir del análisis de los datos arrojados en ellas, tomar la decisión final. El tema de las renuncias al parecer tampoco es obstáculo.

Lo único que hace ruido es la propuesta de Marcelo Ebrard en el sentido de que también debe haber debates entre los aspirantes, pero eso también lo decidirá el CPN.

Después del domingo próximo veremos qué tan aterciopelado está el camino de la sucesión presidencial, en primera instancia, el proceso interno.

No hay, hasta el momento, un solo indicio consistente de que Morena y sus aliados no vayan a repetir en la presidencia y eso, con ser una gran ventaja es también un detonante de todas las pasiones. Baste ver el fuego graneado al que ha sido sometido en las redes sociales el aún canciller Marcelo Ebrard por atreverse a dar un paso al frente y mover la agenda no solo de los aspirantes, sino del propio presidente que tuvo que salir a mediar en esa cena, realizada en un horario en que AMLO solo excepcionalmente reporta actividad pública.

Ya sueltos los contendientes será muy difícil ahuyentar las tentaciones de guerra sucia y campañas negras; de fuego amigo y sobre todo, de fuego enemigo, pues resulta claro que en la 4T todos son iguales, pero hay unos más iguales que otros, como diría el clásico.

¿A qué me refiero? A que la candidata de los sectores más duros de la izquierda obradorista es sin duda Claudia Sheinbaum, mientras Marcelo es visto como una opción más moderada, más al centro, con más simpatías fuera del círculo rojo y el voto clientelar-corporativo.

Ayer conversaba con un veterano priista, beltronista, para más señas, y me decía sin vacilaciones que su ‘gallo’ es Marcelo. Seguramente no es el único militante de un partido no aliado a Morena, que piense lo mismo. O al menos, que si le toca ser encuestado preferiría votar por el Ebrard que por Claudia. Esa seguramente será una variable a considerar en las encuestas, que seguramente medirán también las preferencias entre simpatizantes o militantes de Morena, además de la población abierta.

En resumen, los cuatro aspirantes son sin duda activos de la 4T, pero la 4T en tanto movimiento amplio, integra a sectores, organizaciones, liderazgos y hasta advenedizos para quienes cada uno de los ‘cuatro fantásticos’ representa opciones, conveniencias, coincidencias y divergencias.

La moneda está en el aire. El proceso será intenso y no desprovisto de emociones, incluyendo aquellas que tienen que ver con una eventual diáspora si los resultados se cierran mucho o inconforman a alguno de los contendientes.

Muchos han llegado a equiparar este proceso con el de 1993, cuando Salinas finalmente se decidió por Colosio y no por Camacho, que ya se hacía con la candidatura en la bolsa. Por cierto y nomás para la anécdota, el secretario particular de Camacho en aquel entonces era Marcelo Ebrard, y el de Colosio, Alfonso Durazo, dos personajes que se vuelven a encontrar en una coyuntura bastante interesante.

II

Hubo rueda de prensa ayer con el gobernador Alfonso Durazo y desde luego el tema de la contienda interna en Morena estuvo presente, con los temas aquí abordados: renuncias, métodos y demás, que le corresponde abordar como presidente del CPN.

Pero hubo mucha más información, luego de enviar un mensaje con motivo del día de la libertad de expresión, un derecho del que se manifestó muy respetuoso.

Anunció que a fin de mes o principios de julio, AMLO estará de nueva cuenta en Sonora para evaluar avances en la construcción del hospital del IMSS, cuya primera piedra podría ser colocada en esta gira. Y ya que andarán por el sur del estado, supervisarán las obras del Plan de Justicia Guarijío, así como la carretera Guaymas-Chihuahua.

La gira tendrá un fuerte contenido indigenista pues también evaluarán el Plan de Justicia Yaqui y se trasladarán hasta la Isla del Tiburón, Punta Chueca y Desemboque, en territorio seri, llegando hasta Puerto Libertad por la carretera 36 que ya está en reconstrucción.

Se refirió a la planta de licuefacción de gas que se construye precisamente en Puerto Libertad y que tendrá una inversión hasta de 18 mil millones de dólares en un lapso de tres años: una inversión superior a la de la planta Tesla en Nuevo León, refirió.

En otro orden de ideas, informó que de acuerdo al informe de la organización World Justice Project, Sonora es el estado que mayor avance ha mostrado en el Índice de Estado de Derecho, destacando el dato de que, tras tres años de estancamiento en el apartado de ‘ausencia de corrupción’ este año se pasó del lugar 29 al lugar 20. También hubo avances notables en materia de gobierno abierto, participación ciudadana y derecho a la información.