Con 998 nuevos casos, ayer fue el día con más alto registro oficial de contagios Covid19 en lo que va del años y como comentábamos ayer, el panorama no es alentador.
Pese a que la letalidad de la variante Ómicron cuya presencia en Sonora reconoció ayer el secretario de Salud, José Luis Alomía es menor que la Covid19, tiene una transmisibilidad más alta y eso ha provocado el disparo en los contagios.
Por todos lados se están reportando casos con síntomas leves y no tanto, pero en el gremio periodístico el virus pegó con tubo en este inicio de año y ya nos mandó a la banca a más de una veintena de comunicadores y comunicadoras a quienes desde nuestra propia convalecencia enviamos deseos de pronta y total recuperación.
Hasta ayer, la lista de colegas infectados iba así: Hilario Olea Ruiz, Juan Carlos Zúñiga, Gerardo Moreno, Germán Contreras, Guillermo González, Gil Reyes, Juana María Olguín, Karina Barraza, Lorena Martínez, Isela Hong, Rafael Rentería, Arturo Salcido, César Fraijo, Ángel Lozano, Gamaliel González, Leonor Hernández, Mónica Miranda, Polet Ruano y Martín Holguín.
Por la naturaleza propia del trabajo y aunque ya se ha normalizado el ‘reporteo a distancia’, es altamente probable que el brote en el gremio se dispare en los próximos días.
Por lo pronto ayer se cambió, acertadamente la comparecencia semanal del gobernador Alfonso Durazo ante los medios de comunicación, mudándola de la sala de prensa al patio central de Palacio de Gobierno, un espacio mucho más amplio, abierto y naturalmente ventilado. Y este día la secretaria de Seguridad y la fiscal estatal, María Dolores del Río y Claudia Indira Contreras ofrecerán una rueda de prensa, misma que será en modalidad virtual.
Ahora sí que por el bien de todos, primero los protocolos.
Fuera de eso, es predecible el desfile de cuentas alegres sobre órdenes de aprehensión ejecutadas, disminución de delitos, vinculaciones a proceso y un largo etcétera de ‘logros’ en materia de seguridad, pero siempre estará presente la sombra de los delitos de alto impacto que mantienen en la zozobra a los habitantes de varios municipios especialmente conflictivos en esa materia.
Cajeme sigue siendo una brasa ardiendo y no hay día en que no se reporten asesinatos y/o hallazgos de cadáveres; Guaymas, Caborca y San Luis Río Colorado son también focos rojos en el tablero de la seguridad pública y no hay, hasta el momento una estrategia más o menos articulada para devolver la paz a esos municipios.
Cajeme es la locura. El año pinta para romper todos los récords de ejecuciones. Nada más en los primeros días de este año la cifra ya llegó a 30 asesinatos con los tres que perpetraron anoche en la colonia Misión del Real, Más temprano habían asesinado a otro frente a las instalaciones del cuartel militar de Esperanza, donde no es el primer tiroteo que se registra.
Si el mes pasado cerró con un promedio sostenido durante los últimos meses de 2021 de dos asesinatos diarios, enero 2022 ya promedia tres.
Veremos si hoy aparece algún anuncio importante al respecto, lo que se antoja difícil considerando la complejidad multifactorial del fenómeno de la violencia criminal, que lamentablemente no cede.
II
Pero volviendo con la rueda de prensa del gobernador, en temas más amables anticipó ayer el rediseño de la programación de Telemax y si nos atenemos a la visión de Estado que Alfonso Durazo ha forjado a través de su larga carrera política en las más altas esferas del poder, seguramente vienen buenas noticias.
Reconvertir un medio de gobierno -o peor aún, de partido- en uno de Estado es algo más que una redefinición teórica: atraviesa por dotar a la televisora de contenidos que recojan la pluralidad política y la diversidad social de los sonorenses, abandonando la tentación de instrumentalizarlo como un altar para el culto a la personalidad del gobernante, una herramienta para el ajuste de cuentas políticas y un ‘garrote de trapo’ para la descalificación y el denuesto de los adversarios, algo que fue moneda corriente en sexenios anteriores, señaladamente en el de Guillermo Padrés, y no se diga más atrás, en el de Manlio Fabio Beltrones.
Durante la administración de Claudia Pavlovich se avanzó en ese camino, pero se quedaron lejos de la idea original con la que fue concebida la función de la televisora oficial en el sexenio de Samuel Ocaña, por cierto uno de los referentes del gobernador Durazo, que a su vez tiene en la dirección de Telemax a Paulina Ocaña, nieta del neumólogo de Arivechi.
Ayer el gobernador fue claro al advertir que la televisora estará dedicada exclusivamente a difundir información, entretenimiento y programas que sirvan a la superación cultural y educativa de la gente de Sonora; que sirva al fortalecimiento de sus valores y no para destinarla al desprestigio de adversarios y a lastimar reputaciones de la gente. Lo dijo con todas sus letras.
El próximo viernes será presentado el nuevo diseño programático de Telemax, que en esta administración ha sido concebida como parte integral de un sistema estatal de comunicación en el que se incluye a Radio Sonora llevando como cabeza de este a Edgar Hiram Sallard, que mucho ha tenido que ver en este relanzamiento cuyo diseño se viene trabajando desde hace tres meses.
Por cierto, la televisora estatal ya no transmitirá dos programas de corte religioso, aunque conservará la misa dominical católica.
Esperemos al viernes para ver de qué van los cambios en la televisora.
III
Ya para cerrar, agradecemos los mensajes y llamadas de colegas, amigos y familiares reportándose para saber cómo va la convalecencia en esta su humilde casa donde permanecemos aislados y en espera de ahuyentar el maldito bicho, que ciertamente ya va de salida.
No enumero a todos y todas por cuestiones de espacio, pero reconozco el detalle de la ex gobernadora Claudia Pavlovich que se dio un tiempo para saludar y quedarse un ratito platicando de varias cosas relacionadas desde luego con su quehacer político, mismas que no estoy en condiciones de contarle porque estuvieron ‘fuera de libreta’, pero de que ando buchón, ando buchón y mejor aquí la dejo antes de que se me salga algo.